La caravana de un gobernador colombiano sufre un ataque con explosivos

Los grupos armados ilegales a¨²n proyectan una alargada sombra sobre Colombia, donde una seguidilla de amenazas contra figuras p¨²blicas hace temer el regreso de las peores ¨¦pocas de violencia. La caravana de Juan Guillermo Zuluaga, el gobernador del departamento del Meta, una regi¨®n golpeada por el conflicto armado en el centro del pa¨ªs, sufri¨® la tarde de este lunes un ataque con explosivos durante un recorrido por un paraje rural de La Macarena, una de las zonas hist¨®ricamente copadas por la extinta guerrilla de las FARC. Tanto el dirigente pol¨ªtico del Partido de la U como sus acompa?antes resultaron ilesos.

¡°Estamos muy bien, gracias a dios. Llevamos tres d¨ªas de recorrido en Macarena, en Mesetas y en Uribe, en el sector rural, y no vamos a parar nuestros recorridos de trabajo con la comunidad, de restablecer la confianza¡±, manifest¨® Zuluaga por la noche en un mensaje grabado desde una base militar de la zona, en el que confirm¨® el incidente sin entrar en detalles ni se?alar responsables. ¡°Sabemos y entendemos que a los delincuentes y los bandidos no les gusta que el Estado haga presencia. No vamos a parar, nuestro trabajo sigue¡±, reiter¨® al agradecer los mensajes de apoyo y la labor de las fuerzas armadas. En la ma?ana hab¨ªa publicado en sus redes sociales im¨¢genes de la caravana de unos 30 veh¨ªculos. El Meta es la puerta de entrada a los extensos territorios que componen los Llanos Orientales de Colombia.

La zona donde fue atacado el tambi¨¦n exministro de Agricultura durante el final del mandato de Juan Manuel Santos (2010-2018) sufre el azote de las disidencias de las FARC que se apartaron del acuerdo de paz sellado hace cinco a?os. En particular las encabezadas por Miguel Santanilla Botanche, alias Gentil Duarte, unas de las facciones m¨¢s poderosas. ¡°El mayor reto lo tenemos en el sur del Meta, donde disidencias de las FARC, comandadas por Gentil Duarte, quieren llenar de coca esa zona del departamento, pero no la tienen f¨¢cil¡±, hab¨ªa diagnosticado Zuluaga en octubre de 2020 en una entrevista con el peri¨®dico El Espectador.

El ataque se conoce en medio de un pronunciado deterioro de la seguridad, con recurrentes masacres en diversos lugares de la geograf¨ªa colombiana y el incesante asesinato de l¨ªderes sociales y de excombatientes que firmaron la paz. A ese clima enrarecido se a?aden las amenazas contra l¨ªderes pol¨ªticos. El gobernador del departamento caribe?o del Magdalena, Carlos Caicedo, denunci¨® en agosto que se vio obligado a abandonar brevemente el pa¨ªs ante un inminente plan para asesinarlo por parte del Clan del Golfo, una banda del narcotr¨¢fico heredera de los grupos paramilitares. E incluso el helic¨®ptero en el que viajaba el presidente Iv¨¢n Duque fue atacado en junio con r¨¢fagas de fusil en C¨²cuta, en el departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela, en una acci¨®n que las autoridades atribuyeron a las disidencias.

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