Dinamarca alquila una c¨¢rcel en Kosovo para sus presos extranjeros
Pr¨ªstina recibir¨¢ 21 millones anuales por albergar a 300 reclusos que cumplen condena en el pa¨ªs escandinavo
Cerca de la localidad kosovar de Gjilan, unos 40 kil¨®metros al sudeste de la capital, Pr¨ªstina, hay una c¨¢rcel con 200 reclusos. En 2023 ya no estar¨¢n all¨ª: ser¨¢n reubicados en otras prisiones del pa¨ªs para convertir Gjilan en una suerte de isla penitenciaria danesa a la que ser¨¢n trasladados 300 presos extranjeros que hoy cumplen condena en el pa¨ªs escandinavo. A partir de entonces, los administradores ser¨¢n daneses y regir¨¢n las leyes de ese pa¨ªs. Es el resultado de un ¡ªinusual, pero no in¨¦dito¡ª preacuerdo firmado este lunes por las autoridades de ambos pa¨ªses: uno rico con un problema de saturaci¨®n carcelaria y creciente mano dura con los extranjeros (Dinamarca) y otro con cientos de celdas vac¨ªas, una de las econom¨ªas m¨¢s pobres de Europa y al que solo reconocen como Estado en torno a la mitad de los pa¨ªses miembros de la ONU (Kosovo).
En virtud del pacto, rubricado en Pr¨ªstina por la ministra de Justicia de Kosovo, Albulena Haxhiu, y su hom¨®logo dan¨¦s, Nick Haekkerup, las celdas en Gjilan estar¨¢n disponibles hasta 10 a?os. A cambio, Kosovo recibir¨¢ 21 millones anuales para inversiones de capital, principalmente en el desarrollo de energ¨ªas renovables.
?? & ?? are reaching a very important #agreement for leasing a correctional facility in ?? for transferring 300 inmates from ??!
— Albulena Haxhiu (@albulenahaxhiu_) December 16, 2021
With this agreement ?? will benefit 210 mil. € for 10 years, with a focus on #RuleofLaw and #renewableenergy.
Ninguno de los trasladados ser¨¢ dan¨¦s ni de alto riesgo. Ser¨¢n todos extranjeros condenados a penas que no superan los 10 a?os y que, cuando las purguen en Kosovo, ser¨¢n deportados a sus respectivos pa¨ªses. Solo ¡°presos no peligrosos¡±, precis¨® el ministerio kosovar. No habr¨¢ condenados por actos de terrorismo o cr¨ªmenes de guerra ni personas con problemas de salud mental. ¡°No tenemos capacidad para ello¡±, precis¨® Haxhiu en una comisi¨®n parlamentaria. El personal del centro seguir¨¢ siendo kosovar.
El ministro dan¨¦s describi¨® el acuerdo como ¡°un paso hist¨®rico que permitir¨¢ liberar espacio en nuestras c¨¢rceles a la vez que reduce la carga de trabajo de nuestros funcionarios de prisiones¡±, pero tambi¨¦n como ¡°un mensaje claro a los ciudadanos de terceros pa¨ªses condenados a la expulsi¨®n: vuestro futuro no est¨¢ en Dinamarca y, por tanto, no deb¨¦is purgar all¨ª vuestra pena¡±, seg¨²n aparece citado en un comunicado.
¡°Hemos hecho lo posible para asegurarnos de que est¨¢ dentro de las reglas. Se aplicar¨¢n exactamente las mismas normas que en las prisiones en Dinamarca¡±, agreg¨® Haekkerup. ¡°Seguir¨¢n pudiendo recibir visitantes, aunque por supuesto ser¨¢ dif¨ªcil¡±. La medida se engloba dentro de un paquete de reformas para el sistema penitenciario nacional, dotado con 538 millones de euros, entre las que se incluyen la contrataci¨®n de m¨¢s guardias de prisiones y la construcci¨®n de una nueva c¨¢rcel de alta seguridad, precis¨® el ministro, que cifra en mil las plazas que le faltan al sistema para 2025.
En Kosovo, el Gobierno que lidera el partido nacionalista de izquierdas Vetevendosje, que obtuvo en las elecciones del pasado febrero la mitad de los votos (el mayor porcentaje obtenido en unos comicios en el pa¨ªs), ha informado del acuerdo en comunicados, ruedas de prensa y en el Parlamento, pero el texto es confidencial y ha sido negociado al menos desde el a?o pasado sin consultar a la sociedad civil.
A la espera de que se desvelen los detalles, Driat Cerabregu, del Centro Kosovar de Rehabilitaci¨®n de V¨ªctimas de la Tortura, ONG con sede en Pr¨ªstina, ve un riesgo de empeoramiento de las condiciones del resto de prisioneros en el pa¨ªs. ¡°Conociendo la situaci¨®n general, va a llevar a la sobrepoblaci¨®n carcelaria y a un deterioro en la situaci¨®n de los presos¡±, asegura por tel¨¦fono.
Kosovo tiene 1.642 encarcelados en 11 establecimientos que pueden albergar hasta 2.400, seg¨²n las cifras oficiales. Pero, precisa Cerabregu, existe una suerte de sistema penitenciario dual, con tres presidios recientes como Gjilan ¡ªedificado en la d¨¦cada pasada en base a los est¨¢ndares del Consejo de Europa¡ª y otros, la mayor¨ªa, que datan de los a?os sesenta y setenta, cuando el territorio era parte de Yugoslavia. ¡°En los nuevos la situaci¨®n es bastante buena, pero en los otros las celdas son m¨¢s peque?as y los presos tienen menos espacio en general¡±, agrega. Tambi¨¦n es all¨ª donde se dan m¨¢s casos de autolesiones, suicidios y peleas entre reclusos. ¡°Hay unas pocas denuncias de maltrato, pero nada generalizado¡±, apunta Cerabregu, que cuestiona las cifras oficiales de celdas vac¨ªas y teme, por ello, que algunos de los reclusos de Gjilan acaben en estas prisiones m¨¢s antiguas. El lunes, al anunciar el acuerdo, el Ministerio de Justicia precis¨® que parte del dinero recibido permitir¨¢ ¡°aumentar la calidad e infraestructura general del Servicio Correccional de Kosovo¡±.
¡°La motivaci¨®n del acuerdo es completamente econ¨®mica¡±, se?ala por tel¨¦fono Eraldin Fazliu, presentador de Interaktiv-KTV, un programa de televisi¨®n pol¨ªtico del Grupo Koha que recientemente dedic¨® un debate al tema. Fazliu lamenta la ¡°falta de transparencia¡± del pacto y su potencial impacto en los derechos de los presos. ¡°La idea de comerciar con presos suena un poco medieval. Me sorprende que lo haya hecho un Gobierno socialdem¨®crata¡±, a?ade.
A diferencia de las reservas humanitarias al pacto de algunas ONG kosovares, algunos diputados opositores en el pa¨ªs lo han criticado desde otra ¨®ptica. Hajdar Beqa, del Partido Democr¨¢tico, expres¨® en el Parlamento su temor a que el traslado de presos extranjeros atraiga la delincuencia o influya en alguno de los 1,8 millones de habitantes de Kosovo. ¡°Pueden ser drogadictos o personas que hayan estado involucradas en la prostituci¨®n¡±, se?al¨®.
¡°Sistema de vuelos¡±
El acuerdo tambi¨¦n ha despertado en Dinamarca cr¨ªticas entre activistas y miembros de la oposici¨®n. Rasmus Kjeldalh, director de la asociaci¨®n de protecci¨®n a la infancia Borns Vilkar, ironiz¨® en Twitter: ¡°Supongo que ya estar¨¢ organizado un buen sistema de vuelos a Kosovo que garantice el derecho de los hijos a ver a sus padres encarcelados¡±. La diputada Samira Nawa, del Partido Social Liberal, se?al¨® en la cadena TV2 que ¡°el sistema penitenciario de Kosovo ha sido criticado por organismos internacionales por la corrupci¨®n, la violencia entre los presos y la escasa preparaci¨®n de algunos trabajadores¡±. En 2020, una delegaci¨®n de los servicios penitenciarios daneses visit¨® Kosovo para ver en persona las condiciones de las c¨¢rceles.
Otro pa¨ªs escandinavo, Noruega, lleg¨® hace a?os a un acuerdo similar con Pa¨ªses Bajos. En verano de 2015, unos 250 presos en c¨¢rceles noruegas fueron trasladados a la prisi¨®n de Norgerhaven, 150 kil¨®metros al noreste de ?msterdam. El contrato se cancel¨® a finales de 2018, despu¨¦s de que el Defensor del Pueblo noruego considerara que vulneraba derechos fundamentales de los reos.
La tasa de encarcelamiento en Dinamarca, de 5,8 millones de habitantes, es una de las m¨¢s bajas de la UE: 72 reclusos por cada 100.000 habitantes. Solo Finlandia, Eslovenia y Pa¨ªses Bajos tienen una menor proporci¨®n entre rejas. Sin embargo, desde 2015 la cifra de presos en el pa¨ªs ha aumentado de 3.400 a 4.200 (lo que supone una tasa de ocupaci¨®n por encima del 100%, seg¨²n las estad¨ªsticas nacionales), mientras que el n¨²mero de funcionarios de prisiones ha ca¨ªdo de 2.500 a 2.000.
El pasado septiembre, el Gobierno socialdem¨®crata puso en marcha una reforma legal para impedir que los condenados a cadena perpetua puedan entablar relaciones sentimentales en sus primeros 10 a?os en prisi¨®n. Con esta medida, el Ejecutivo de Mette Frederiksen reaccionaba a un caso medi¨¢tico. Una joven hab¨ªa visitado en la c¨¢rcel a Peter Madsen, uno de los criminales m¨¢s conocidos en el pa¨ªs, y se hab¨ªa enamorado. Madsen fue condenado en 2018 por asesinar y descuartizar a Kim Wall, una periodista que iba a entrevistarlo en un submarino casero construido por ¨¦l.
En los ¨²ltimos a?os, Dinamarca ha mostrado mano dura con la inmigraci¨®n y el asilo al introducir m¨²ltiples restricciones. Algunas han provocado la indignaci¨®n de grupos de derechos humanos. Entre ellas, una ley que permite enviar a pa¨ªses fuera de la UE a los solicitantes de asilo mientras se resuelven sus casos; o la decisi¨®n de revocar permisos de residencia de sirios alegando que la zona de Damasco ya es segura. La semana pasada, Inger Stojberg, ministra de Integraci¨®n entre 2015 y 2019, fue condenada a dos meses de prisi¨®n incondicional por ordenar la separaci¨®n ilegal de parejas de refugiados.
Una promesa de inversi¨®n en el momento justo
Lo firmado el lunes fue una carta de intenciones, es decir, un esbozo del pacto que se suele conocer por sus siglas en inglés, LOI (Letter of Intent). El texto definitivo requerirá la luz verde de ambos parlamentos. Está previsto que llegue al kosovar a principios del próximo año. Allí, el Gobierno necesitará a parte de la oposición, ya que requiere el apoyo de dos tercios de la Cámara, al tratarse de un acuerdo internacional.
El momento, eso sí, juega a su favor. Una promesa de inversión en renovables gana puntos en un momento de crisis energética. Kosovo está importando estos días el 40% de su energía —con un coste siete veces mayor que en el mismo periodo el año pasado— y la compañía de distribución de energía anunció el pasado miércoles cortes de electricidad de dos horas para todos los hogares y por un periodo indefinido.
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