El Supremo de Israel revisa el archivo del caso de los chicos de la playa de Gaza

La imagen de los cad¨¢veres de cuatro chicos abatidos por un dron en una playa de Gaza simboliza la tragedia de la guerra de 2014 en la Franja palestina, la m¨¢s larga librada por Israel tras asentarse como Estado. Los familiares de los menores pugnan a¨²n para que se haga justicia. Pero el Ej¨¦rcito y el fiscal general dieron carpetazo a la investigaci¨®n. Alegaron que los operadores del avi¨®n no tripulado confundieron a los ni?os con milicianos de Ham¨¢s en una zona costera considerada objetivo militar. Desde un hotel cercano, periodistas extranjeros que cubr¨ªan el conflicto solo observaron, sin embargo, a unos chavales que jugaban al f¨²tbol en la arena. El Tribunal Supremo revisa ahora por primera vez el archivo de las diligencias despu¨¦s de que una ONG israel¨ª desvelara las contradicciones contenidas en un informe militar secreto.

Eran cuatro primos, todos miembros del clan Baker, una estirpe de pescadores que da nombre un barrio marinero de la capital de Gaza. Ismail, de nueve a?os; Ahmed, de 10; Zacar¨ªa de 10, y Mohamed, de 11. Perecieron por el impacto de dos misiles disparados desde un dron artillado israel¨ª a primera hora de la tarde del 16 de julio de 2014. El Supremo de Israel escuch¨® el lunes las alegaciones presentadas por tres organizaciones defensoras de los derechos humanos contra el cierre de la investigaci¨®n sobre su muerte. Lo decret¨® el abogado general militar en 2015 y lo ratific¨® la Fiscal¨ªa General del Estado en 2019. Las ONG Adalah (con sede en Haifa, Israel) y Al Mezan y Centro Palestino para los Derechos Humanos (radicadas en Gaza) llevan siete a?os dando la batalla legal en nombre de la familia Baker para que se haga justicia.

El alto tribunal israel¨ª se pronunciar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas sobre la petici¨®n de reapertura del caso, pero fuentes jur¨ªdicas apuntan a que los magistrados ya han expresado su convencimiento de que los hechos se produjeron en zona militar y en periodo de guerra. El Supremo dijo haber recibido un informe confidencial de los servicios de espionaje que define como objetivo militar el per¨ªmetro de la playa y el puerto donde murieron los cuatro ni?os.

Las mismas fuentes precisaron que la presidenta del tribunal, Esther Ayut, hab¨ªa resaltado que el informe de inteligencia militar hab¨ªa sido elaborado poco antes de que se produjera el ataque. Los abogados de las tres ONG no tuvieron acceso al contenido del informe confidencial, presuntamente por razones de seguridad nacional.

Los representantes de Adalah, el Centro de Defensa Legal de los Derechos de la Minor¨ªa ?rabe en Israel, rechazaron de plano dicha argumentaci¨®n durante la vista. Advirtieron de que esa zona de la playa es un ¨¢rea civil, en la que suelen jugar los ni?os, y adem¨¢s se encuentra pr¨®xima a hoteles frecuentados por periodistas internacionales en sus coberturas informativas en Gaza. Entre otros reporteros, equipos de la cadena francesa TF1 y de la catar¨ª Al Jazeera, y los corresponsales del peri¨®dico brit¨¢nico The Telegraph y del alem¨¢n Frankfurter Allgemeine Zeitung fueron testigos de los hechos. Todos constataron que se trataba de un grupo de menores que jugaban al f¨²tbol. Ninguno de los periodistas ha sido citado a declarar en las investigaciones abiertas por la justicia israel¨ª.

Los abogados que representan a la familia Baker argumentaron adem¨¢s que, incluso si se tratara de una zona militar, el derecho humanitario internacional establece que el Ej¨¦rcito tiene la obligaci¨®n de verificar si en los objetivos hay combatientes o civiles antes de lanzar un ataque. Seg¨²n las alegaciones de las ONG, los militares israel¨ªes dieron por buena la informaci¨®n de inteligencia que localiz¨® un dep¨®sito de Ham¨¢s en la playa, y justificaron por ello la decisi¨®n de abrir fuego contra cualquier persona que atravesara el per¨ªmetro.

Los l¨ªmites de un objetivo de guerra

En un informe interno de la Polic¨ªa Militar sobre el caso, que fue desvelado por Adalah en 2018, se precisa que el operador de un dron armado dispar¨® un primer misil contra el dep¨®sito, en el que se hab¨ªa ocultado uno de los ni?os. Falleci¨® en el acto. El resto de los chicos echaron a correr, como se aprecia en el v¨ªdeo grabado por TF1. El operador pidi¨® entonces aclaraciones por radio sobre los l¨ªmites de la zona militar en la que pod¨ªa actuar antes de volver a abrir fuego.

Al no recibir respuesta, lanz¨® medio minuto despu¨¦s un segundo misil, que caus¨® la muerte de otros tres primos Baker y heridas graves a un cuarto. El Ej¨¦rcito se ha negado a entregar a los letrados de la familia las grabaciones de v¨ªdeo del centro de control de drones de la base a¨¦rea de Palmachin, situada al sur de Tel Aviv.

Las ONG que han defendido ante el Tribunal Supremo de Israel la reapertura de la investigaci¨®n y el procesamiento de los responsables de la muerte de los cuatro menores sostienen que la Fuerza A¨¦rea abri¨® fuego ¡°de forma intencionada¡± contra los ni?os ¡°sin previa identificaci¨®n y sin adoptar las precauciones necesarias¡±, en una grave violaci¨®n de las leyes de guerra. Un portavoz de Adalah ha afirmado que ¡°el caso de la muerte de los cuatro chicos de la playa de Gaza refleja una pol¨ªtica de total impunidad para los soldados y oficiales de Israel¡±.

El Centro Palestino para los Derechos Humanos considera en un comunicado que el ¡°sistema judicial israel¨ª encubre cr¨ªmenes de guerra cometidos por el Ej¨¦rcito contra civiles palestinos¡±. ¡°El caso de los chicos Baker es el m¨¢s flagrante ejemplo, y en consecuencia, la instancia apropiada para determinar la responsabilidad es el Tribunal Penal Internacional¡±, concluye la ONG palestina. Cuando este corresponsal visit¨® por primera vez la franja de Gaza, meses despu¨¦s de la muerte de los cuatro ni?os de la playa, Ahmed Baker, padre del peque?o Zacar¨ªa, ya anticipaba ese rumbo. ¡°Solo confiamos en la justicia internacional¡±, proclam¨® entonces el patriarca del clan de pescadores, ¡°y yo ir¨¦ hasta el Tribunal de La Haya aunque sea andando¡±.

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