Compra de votos, una pr¨¢ctica sofisticada y enraizada en Colombia

¡°Si el elector no recibe un ali?o econ¨®mico, no vota. Puede ser plata, un puesto p¨²blico, favores o que le pinten el frente de la casa¡±. En 2018, las palabras de Roberto Gerlein, un exsenador de la costa caribe que ocup¨® una curul en el Senado durante 50 a?os, ya evidenciaban c¨®mo esa pr¨¢ctica ilegal ha marcado las elecciones de las ¨²ltimas d¨¦cadas en Colombia. ¡°Es tradicional no solo en los pueblos del Atl¨¢ntico sino en todos los departamentos de la costa y se ha extendido a todo el pa¨ªs. En Bogot¨¢ compran votos, en Medell¨ªn compran votos; en Pasto compran votos, en el Valle compran votos¡±, dec¨ªa en una entrevista de la ¨¦poca el excongresista, que falleci¨® en 2021. Ahora, aunque de acuerdo con varios expertos esa pr¨¢ctica ilegal se ha sofisticado, contin¨²a presente en todo el pa¨ªs. Apenas a dos d¨ªas de las votaciones a Congreso y a las consultas presidenciales de este domingo, la Misi¨®n de Observaci¨®n Electoral (MOE) recibi¨® 79 denuncias de compra de voto.

El reciente esc¨¢ndalo de la excongresista Aida Merlano, que salpica al precandidato a la presidencia Alejandro Char, revela que ya no se trata de una compra evidente y al menudeo, sino de un entramado criminal. ¡°En el Atl¨¢ntico, en toda la regi¨®n se compran votos, pero aqu¨ª el tema es que se compran con los dineros y recursos de la naci¨®n y ellos son los financiadores de casi toda la clase pol¨ªtica de la regi¨®n¡±, dijo Merlano en febrero pasado en una entrevista a la revista Cambio.

La excongresista fue condenada a 11 a?os por corrupci¨®n electoral en los comicios de 2018 y luego protagoniz¨® una fuga de pel¨ªcula durante una consulta odontol¨®gica en Bogot¨¢. Se descolg¨® por una cuerda y huy¨® en una moto que la esperaba. Meses m¨¢s tarde fue recapturada en Venezuela y desde all¨ª entreg¨® una declaraci¨®n a la Corte Suprema de Justicia de Colombia donde denunci¨® que la casa Char, como se conoce al precandidato y otros pol¨ªticos de su familia, participaron en su fuga.

Desde entonces la prensa local ha revelado videos de c¨®mo funcionaba la Casa Blanca, sede de la campa?a de Merlano y donde, seg¨²n las denuncias, se compraban votos de forma masiva. ¡°Lo que nos dej¨® ver este caso es c¨®mo hay una tecnolog¨ªa dispuesta para la compra y que se volvi¨® algo sistem¨¢tico. Tambi¨¦n, que se ve a pol¨ªticos que acceden a altos cargos p¨²blicos controlando y manejando una estructura criminal organizada que favorec¨ªa distintas candidaturas. El imaginario colectivo dir¨ªa que se compran votos solo para ellos, pero que entraran al Congreso y consiguieran votos para otras candidaturas es llamativo¡±, dice Camilo Mancera, coordinador de justicia electoral de la MOE, misi¨®n que tiene la plataforma Pilas con el Voto donde los ciudadanos pueden denunciar constre?imientos y otras irregularidades electorales.

La impunidad favorece la corrupci¨®n electoral

La mec¨¢nica de la compra de votos arranca incluso el d¨ªa de la inscripci¨®n de c¨¦dulas para votar, tres meses antes. Los intermediarios (coordinadores) entre los ciudadanos y los pol¨ªticos indican a los votantes en qu¨¦ puestos de votaci¨®n deber¨ªan inscribirse y as¨ª pueden hacer seguimiento de que quienes reciben el dinero lo depositen finalmente por el candidato que paga. En muchos casos, explica Mancera, les entregan un anticipo que puede ser 50.000 pesos (14 d¨®lares) cuando se inscriben y el resto del dinero, cuando votan. Solo en Barranquilla la MOE identific¨® 18 puestos de votaci¨®n con ¡°riesgo electoral consolidado¡± y ha lanzado alertas.

A los votantes comprados los suelen llevar directamente hasta el punto de votaci¨®n, acompa?ados por un l¨ªder que verifica que quienes recibieron el anticipo s¨ª cumplan la cita electoral. Esos l¨ªderes, a su vez, reportan a coordinadores y existen unos personajes llamados mochileros, que entregan el dinero que guardan en mochilas. El negocio es la venta masiva de votos. ¡°Les dicen a los pol¨ªticos le vendo un paquete de 2.000 votos, eso le cuesta una cantidad equis de dinero y me aseguro de que a usted le lleguen¡±, agrega Mancera.

Sin embargo, las formas de comprar el voto son variadas. David Char, quien fue senador entre 2002 y 2006 y es primo del precandidato y hermano del expresidente del Congreso Arturo Char, le cont¨® a la Jurisdicci¨®n Especial para la Paz (donde tambi¨¦n admiti¨® alianzas con paramilitares) que otra forma de compraventa del voto se llama ¡°carrusel electoral¡±. ¡°Era un voto seguro, pero m¨¢s costoso, pero no hab¨ªa que hacer ning¨²n trabajo con ning¨²n l¨ªder porque aqu¨ª ten¨ªa metida la mano la Registradur¨ªa. Hab¨ªa gente dentro de la Registradur¨ªa que pon¨ªa al servicio la venta de mesas¡±.

El exsenador habl¨® tambi¨¦n de tejas, materiales de construcci¨®n y otras ayudas a cambio del voto y mencion¨® a Laureano Acu?a, actual senador del Partido Conservador como una persona ¡°conocida en el Atl¨¢ntico que maneja mucho esta forma de comprar votos¡±. Acu?a fue un l¨ªder de barrio que obtuvo una de las mejores votaciones a la C¨¢mara y al Congreso, superando a barones electorales de la costa. Hoy es investigado por la Procuradur¨ªa precisamente por un audio en el que habla de la compra de 70.000 votos para las legislativas de este domingo.

La impunidad en los delitos electorales son la raz¨®n para que este se repita por a?os. Un estudio de la Corporaci¨®n Transparencia por Colombia muestra que entre 2014 y 2021 la Fiscal¨ªa recibi¨® 1.549 noticias criminales relacionadas con el delito de ¡°corrupci¨®n al sufragante¡±, pero solo el 2%, (31 noticias criminales) tienen sentencia. ¡°Esto evidencia que hay dificultad en identificar y judicializar a los responsables del delito¡±, indica el documento Recomendaciones para la implementaci¨®n efectiva de la Pol¨ªtica Criminal Electoral.

Andr¨¦s Hern¨¢ndez, director de la Corporaci¨®n Transparencia por Colombia, explica que la gama de irregularidades es amplia. Va desde fraude al sufragante, fraude en inscripci¨®n de c¨¦dulas, voto fraudulento, favorecimiento de voto fraudulento, tr¨¢fico de votos, y se mantiene el patr¨®n de impunidad: de 7.048 denuncias que tiene la Fiscal¨ªa en esos a?os, apenas 6.276 pasaron a etapa de indagaci¨®n y 111 llegaron a investigaciones formales.

¡°Genera suspicacia que no se conozcan m¨¢s casos como el de Merlano cuando tenemos 7.000 denuncias y cuando sabemos que hay toda una estructura y que no se trata de que alguien espera en el lugar de votaci¨®n con un tamal o tejas¡±, dice Hern¨¢ndez. Para ¨¦l, la pr¨¢ctica de compra de votos ha estado tan presente en el contexto electoral colombiano que cree que este domingo se mantendr¨¢. ¡°Dif¨ªcilmente haya alguna raz¨®n para pensar que en estas elecciones ese patr¨®n vaya a cambiar¡±.

Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S Am¨¦rica y reciba todas las claves informativas de la actualidad de la regi¨®n