El bloqueo de las ayudas de la UE a Palestina pone en peligro la vida de cientos de enfermos de c¨¢ncer
La Comisi¨®n Europea conf¨ªa en superar esta semana el veto del comisario h¨²ngaro justo a tiempo para la gira de Ursula von der Leyen por Oriente Pr¨®ximo. El principal hospital oncol¨®gico de Jerusal¨¦n Este ya se ha visto obligado a dejar de atender a enfermos de Gaza y Cisjordania
La supervivencia de centenares de enfermos de c¨¢ncer palestinos se halla comprometida por falta de medicaci¨®n adecuada para tratarles en el centro oncol¨®gico de referencia en Jerusal¨¦n. La causa de tal penuria es el bloqueo desde hace meses de la ayuda de la Uni¨®n Europa, m¨¢s de 200 millones de euros que la Autoridad Palestina (AP) deb¨ªa haber recibido en 2021. Pero el comisario europeo responsable de esa partida, el h¨²ngaro Oliver V¨¢rhely, la ha mantenido congelada como medida de presi¨®n para obligar a las autoridades palestinas a modificar los libros de texto utilizados por los escolares por entender que incluyen contenidos antisemitas. Fuentes de la Comisi¨®n Europea indican que el veto del h¨²ngaro podr¨ªa superarse en cuesti¨®n de d¨ªas, coincidiendo con la visita esta semana a Israel y Palestina de la presidenta del organismo, Ursula von der Leyen.
La Comisi¨®n Europea tiene previsto plantear este mismo lunes una propuesta que liberar¨ªa los 212 millones de euros pendientes del a?o pasado, m¨¢s una partida a?adida de 10 millones de euros para paliar la actual crisis econ¨®mica que golpea a numerosos pa¨ªses de la zona. La decisi¨®n, seg¨²n fuentes comunitarias, no incluir¨¢ ning¨²n tipo de condicionalidad, m¨¢s all¨¢ de la habitual relacionada con la buena gesti¨®n de los fondos. Bruselas conf¨ªa en que la propuesta reciba el visto bueno de los representantes de los 27 Estados miembros que se sientan en el comit¨¦ encargado de aprobarla.
El posible desbloqueo llega tras la intervenci¨®n de Von der Leyen, seg¨²n las fuentes consultadas. La presidenta de la Comisi¨®n hab¨ªa tolerado la actitud del comisario h¨²ngaro, a pesar de que se estaba poniendo en peligro la vida de cientos de pacientes y condenando a la Autoridad Palestina a un riesgo de colapso econ¨®mico. Pero Von der Leyen inicia este lunes una gira que la llevar¨¢ a Israel, Palestina (el martes), Egipto y Jordania, y la inminente entrega de la esperada ayuda puede facilitar su interlocuci¨®n en la zona porque la situaci¨®n se ha tornado dram¨¢tica para los palestinos.
El hospital Augusta Victoria, situado en la parte oriental de la Ciudad Santa, ha dejado de atender a m¨¢s de 500 pacientes derivados por el Ministerio de Sanidad palestino debido a la falta de fondos. Otros cientos de casos diagnosticados en Cisjordania y la franja de Gaza no han sido ni siquiera derivados. La UE es el principal donante internacional que financia a la AP. Sin las trasferencias del Ministerio de Sanidad palestino, privado a su vez de los ingresos europeos, y sin las subvenciones directas que recibe de Bruselas el centenario hospital Augusta Victoria, sus salas de quimioterapia se hallan casi vac¨ªas en lo alto del monte de los Olivos.
El doctor Yusef Hamamreh, director del centro de d¨ªa de cuidados oncol¨®gicos, describe la desolaci¨®n que se vive en una de las plantas habitualmente m¨¢s concurridas. ¡°En un d¨ªa normal, aqu¨ª habr¨ªa unos 90 pacientes, ahora hay menos de 30¡å, explicaba al mediod¨ªa del jueves. Un 40% de los enfermos proceden de Gaza y el resto, de Cisjordania. En el mostrador de control de la planta muestra la que denomina ¡°lista negra¡±, una treintena de nombres en una de las hojas de un tabl¨®n de anuncios. A todos ellos tendr¨¢ que llamarles poco despu¨¦s para informarles de que no van a poder comenzar el tratamiento porque sus medicaciones ¡°no han llegado¡±. Est¨¢n disponibles en los hospitales y laboratorios de Israel, pero si no se abona al momento la factura no se entregan en la farmacia del Augusta Victoria, admite.
¡°Estas restricciones (de las ayudas europeas) castigan a pacientes con enfermedades terminales que se ven privados de medicinas que pueden salvarles la vida¡±, ha advertido en un comunicado Jan Egeland, secretario general del Consejo Noruego para los Refugiados, una de las ONG con mayor presencia en Palestina. Egeland, un diplom¨¢tico con una larga carrera de servicios humanitarios, de los que fue responsable para la ONU en la guerra de Siria, denuncia que ¡°los palestinos est¨¢n pagando un cruel precio por decisiones pol¨ªticas adoptadas en Bruselas¡±.
Al fondo de una de las salas de quimioterapia se acurruca en un rinc¨®n Aya Sarahin, de 19 a?os, mientras inicia su primer ciclo de tres semanas para combatir un sarcoma, c¨¢ncer que en su caso afecta principalmente a los huesos. La acompa?a Rachida, su madre y la de sus tres hermanas y tres hermanos. ¡°Yo tambi¨¦n quiero formar una familia, como ella¡±, susurra la joven, que tambi¨¦n ha empezado los estudios para formarse como nutricionista en Hebr¨®n, algo adormilada en un sill¨®n. ¡°Venimos temprano cada d¨ªa en un autob¨²s del hospital¡±, refiere rodeada de otras pacientes de la misma ciudad del sur de Cisjordania. Todas sus esperanzas se concentran en esta sala de estilo imperial germ¨¢nico. ¡°Sin presupuesto para medicaci¨®n avanzada, solo podemos aplicar la quimioterapia m¨¢s tradicional, que responde mejor en tumores como el sarcoma¡±, admite el doctor Hamamreh. ¡°A Aya vamos a curarla¡±, promete.
Ante Mirwat Fajuri, de 50 a?os, que ha venido para someterse a un tercer ciclo desde Beit Laya, en el norte de Gaza, el diagn¨®stico del onc¨®logo no parece tan optimista. Su problema es m¨¢s bien log¨ªstico ¡ªmantenerlo hospitalizado en Jerusal¨¦n durante tres semanas, a pesar de las restricciones que Israel impone a los enfermos procedentes de la franja costera¨D que m¨¦dico. ¡°Me detectaron la enfermedad en octubre de 2021, pero no pude comenzar con la quimioterapia hasta marzo pasado, cuando lleg¨® el permiso de los militares¡±, detalla Fajuri, cubierto con una gorra de b¨¦isbol que en nada disimula la ca¨ªda de todo su cabello, mientras observa al jefe del servicio. ¡°Vamos a intentar cronificar su enfermedad: un sarcoma que ya ha entrado en met¨¢stasis en los pulmones y el h¨ªgado¡±, aclara el m¨¦dico especialista. Para el resto de los pacientes palestinos, que precisan tratamientos m¨¢s complejos, no tiene respuesta ahora.
¡°Al terminar el a?o pasado, la Autoridad Palestina adeudaba 70 millones de euros al hospital por los pacientes oncol¨®gicos que ha remitido, pero la UE tampoco le ingresa los fondos desde el oto?o pasado, ni la partida de 13 millones anuales destinada con car¨¢cter finalista a los centros sanitarios de Jerusal¨¦n¡±, precisa Sieglinde Weinbrenner, enfermera, veterana cooperante y delegada en Jerusal¨¦n de la Federaci¨®n Mundial Luterana. Esta organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro gestiona desde 1950 el hospital Augusta Victoria, fundado en 1910 tras la visita a la Ciudad Santa del kaiser Guillermo II. ¡°Nadie parece hacer nada para remediarlo en Bruselas¡±, lamenta la alemana Weinbrenner. ¡°Ursula von der Leyen tambi¨¦n es m¨¦dica, sabe lo que significa que los pacientes de c¨¢ncer no tengan el tratamiento que necesitan, o que sus sesiones se vean interrumpidas o suspendidas. Sabe lo estresante que es, lo que deteriora las posibilidades de curaci¨®n¡±, afirma en un improvisado mensaje a la presidenta de la Comisi¨®n.
La UE es el mayor donante de recursos para la Autoridad Palestina. Los fondos europeos contribuyen a financiar desde los salarios de funcionarios, m¨¦dicos o maestros hasta las pensiones. Pero la posici¨®n del comisario europeo de Vecindad, el h¨²ngaro Oliver Varh¨¦ly, ha secado durante meses ese canal de financiaci¨®n. El Gobierno h¨²ngaro de Viktor Orb¨¢n, que nombr¨® a Varh¨¦ly, tambi¨¦n ha destacado por su veto a cualquier resoluci¨®n de la UE de protesta o condena dirigida a Israel.
¡°Es indignante lo que est¨¢n sufriendo los pacientes a causa de la politizaci¨®n de la ayuda de la UE a la Autoridad Palestina. Soy una ciudadana de Europa y creo en el ideal europeo, pero esta situaci¨®n es completamente inaceptable, desgarradora. Los pacientes est¨¢n pasando de la primera fase de evoluci¨®n del c¨¢ncer a la cuarta... en la que ya no se tienen tantas opciones. La gente se est¨¢ muriendo por esto¡±, remacha Weinbrenner ante unas deudas que asfixian al sistema sanitario palestino, y por extensi¨®n, a su hospital. ¡°Hace poco tuve que hablar con la familia de una enferma de unos 40 a?os que ya no tiene futuro por falta de medios para tratar su c¨¢ncer¡±, revela. ¡°Hay veces que me paso el d¨ªa llorando¡±.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.