Ucrania rinde homenaje a Boris Johnson
El mandatario brit¨¢nico goza de una popularidad inaudita entre los ucranios por su apoyo militar y su ret¨®rica contra Rusia
El jueves fue un d¨ªa triste para los ucranios. En esta ocasi¨®n no solo lo fue por la amenaza constante de las bombas rusas, lo fue porque el primer ministro brit¨¢nico, Boris Johnson, anunci¨® que dimit¨ªa del cargo. Para muchos en el Reino Unido y en Europa, Johnson es un populista y un embustero, pero no en Ucrania. Volod¨ªmir Zelenski, presidente del pa¨ªs, habl¨® con ¨¦l por tel¨¦fono para expresarle la tristeza ¡°de toda la sociedad ucrania¡±.
El Reino Unido es el segundo donante internacional de armas para Ucrania, aunque muy por detr¨¢s de Estados Unidos ¡ª23.800 millones de euros¡ª. El Gobierno de Johnson ha comprometido hasta ahora ayuda militar valorada en 3.800 millones de euros, seg¨²n el Instituto de Kiel para la Econom¨ªa Mundial (IfW). La Uni¨®n Europea es el principal apoyo financiero mundial para Ucrania, pero en una sociedad con un esp¨ªritu b¨¦lico tan vivo, los discursos sin pelos en la lengua del primer ministro brit¨¢nico contra Rusia se han ganado las simpat¨ªas de los ucranios. ¡°No tenemos duda de que Gran Breta?a preservar¨¢ su apoyo, pero su liderazgo personal y carisma le han hecho especial¡±, dijo Zelenski.
La relaci¨®n entre Johnson y Zelenski es muy fluida, con contactos telef¨®nicos por lo menos una vez por semana. La agencia Reuters detall¨® que el l¨ªder brit¨¢nico hab¨ªa ido m¨¢s all¨¢ de sus competencias estrictas en la esfera nacional y hab¨ªa mediado regularmente con otros pa¨ªses e instituciones para hacer llegar material militar a Ucrania. Pero sobre todo hay algo en el car¨¢cter buf¨®n de Johnson que enamor¨® a los ucranios, mayores y j¨®venes, de izquierdas y de derechas. ¡°Los ucranios est¨¢n tristes¡±, confirmaba el jueves Katia Shmorhun, abogada de 36 a?os de Kiev, durante un paseo por el centro hist¨®rico de la capital: ¡°No es tanto por las armas que nos ha facilitado como por su actitud. Frente al talante m¨¢s dialogante con Rusia de Francia y de Alemania, o el discurso cada vez m¨¢s moderado de Joe Biden [presidente de Estados Unidos], Johnson hablaba sin tapujos¡±. Oleksandr Scherba, diplom¨¢tico ucranio con una larga experiencia en la UE, escribi¨® en Twitter que dudaba de que Johnson hubiera sido tan beligerante contra Rusia si el Reino Unido hubiera formado parte de la UE.
The Economist ha titulado su portada de este viernes resumiendo el adi¨®s de Johnson como ¡°la ca¨ªda de un payaso¡±. El mismo d¨ªa, en la cafeter¨ªa Zavertailo de Kiev no daban abasto sirviendo los pasteles Johnsoniuk, un postre dedicado al primer ministro. El dulce, delicioso, es una peque?a tarta de manzana y canela coronada con una capa de merengue y una cucharada de helado de vainilla que representan el cabello rubio y despeinado de Johnson. En 15 minutos del mediod¨ªa, durante la visita de EL PA?S, ya se hab¨ªan vendido una docena de unidades. La encargada del local explic¨® que cuando lo anunciaron como novedad hace tres semanas, se convirti¨® enseguida en el producto m¨¢s vendido, ¡°superando incluso a nuestro famoso croissant de almendras¡±.
El cosaco Boris
Marina Tsarenok, psic¨®loga, clienta de la cafeter¨ªa Zavertailo y fan del Johnsoniuk, admit¨ªa preocupaci¨®n por el relevo de Johnson: ¡°M¨¢s que por la cantidad de ayuda que recibimos, es porque quien le suceda, seguro que no ser¨¢ tan claro hablando¡±. Tsarenok explic¨® que hab¨ªa le¨ªdo en las cadenas de Telegram rumores que apuntaban a que su renuncia era ¡°una conspiraci¨®n rusa¡±, pero ella no lo cre¨ªa. El furor por Boris Johnson en Ucrania no termina en un pastelito: la comunidad cosaca de Chernihiv le nombr¨® oficialmente cosaco con el nombre de Boris Chuprina ¡ªel chuprina es el tradicional flequillo cosaco, por lo que la traducci¨®n ser¨ªa Boris Flequillo Largo¡ª; en Dnipr¨®, una de las mayores ciudades de Ucrania, hay una iniciativa ciudadana para rebautizar una avenida con su nombre, y en Vasilkiv, al sur de Kiev, renombrar¨¢n el paseo fluvial con el nombre de Johnson.
¡°Para m¨ª es un h¨¦roe, no solo por la ayuda que nos ha dispensado, sino por c¨®mo se ha comportado, sin miedo, como un hombre de verdad¡±, afirmaba la maestra de escuela Svetlana Kiyenko durante un paseo de vacaciones por la capital ucrania. Kiyenko aseguraba con visible pesar que el jueves estuvo triste por su dimisi¨®n. ¡°Es que incluso la segunda visita que realiz¨® a Kiev [el pasado junio], la hizo para huir de los problemas que ten¨ªa en su pa¨ªs¡±, opinaba por su parte Shmorhun, y a?ad¨ªa que tiene conocidos en Inglaterra que, cuando le defiende, le repiten que ¡°es un mentiroso y un segundo Donald Trump¡±. ¡°Pero a m¨ª me gusta c¨®mo es, que entre en una tienda y se presente con un ¡®hola, soy Boris¡±, comentaba esta joven de Kiev. El futuro inquilino en el n¨²mero 10 de Downing Street lo tendr¨¢ dif¨ªcil para conquistar los corazones ucranios como el cosaco Boris Flequillo Largo.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.