Las fuerzas de seguridad de Sri Lanka desalojan la Presidencia y la principal acampada de protesta
Hay nueve detenidos y, seg¨²n los manifestantes, al menos 50 heridos. El nuevo jefe de Estado, Ranil Wickremesinghe, hab¨ªa dado a los manifestantes un ultim¨¢tum de 72 horas
Cuando no hab¨ªan transcurrido ni 24 horas desde que el nuevo presidente de Sri Lanka, Ranil Wickremesinghe, fuera investido el jueves en el cargo, el ej¨¦rcito y fuerzas especiales de la polic¨ªa expulsaron en la madrugada de este viernes a parte de los manifestantes acampados en el parque Galle de la capital, Colombo. Tambi¨¦n desalojaron la Presidencia, ocupada desde el 9 de julio por la multitudinaria protesta popular contra el anterior mandatario. Nueve personas, entre ellas dos heridas, han sido detenidas en la operaci¨®n, confirm¨® Nalin Thalduwa, un portavoz policial, a la agencia Reuters. Los organizadores de las acampadas han denunciado que al menos 50 manifestantes resultaron heridos durante el desalojo de la protesta que el pasado 15 de julio forz¨® la huida y posterior renuncia del anterior jefe del Estado, Gotabaya Rajapaksa, en medio de la peor crisis econ¨®mica del pa¨ªs desde su independencia del Reino Unido en 1948.
Ranil Wickremesinghe hab¨ªa jurado en la ma?ana del jueves como nuevo presidente tras obtener la mayor¨ªa de los apoyos en el Parlamento durante una votaci¨®n secreta. Sustituy¨® a su aliado Rajapaksa, principal blanco de las iras de los manifestantes, que le acusaban de haberse lucrado personalmente mientras los esrilanqueses de a pie afrontan una grave escasez de suministros b¨¢sicos como el combustible e incluso medicinas y alimentos.
Sin embargo, la llegada a la jefatura del Estado del tambi¨¦n impopular Wickremesinghe, que ejerci¨® como primer ministro con su predecesor en la presidencia, no auguraba un retorno a la calma, pues los manifestantes lo consideran parte de la ¨¦lite corrupta a la que culpan de haber expoliado en beneficio propio los recursos del pa¨ªs, por lo que tambi¨¦n hab¨ªan pedido su dimisi¨®n. Al igual que el entonces presidente Rajapaksa, Wickremesinghe se comprometi¨® a renunciar a su cargo el pasado d¨ªa 13, una promesa que ambos incumplieron.
La continuidad de aliados del presidente depuesto en los puestos clave del Estado se ha visto plasmada de nuevo este viernes cuando otro aliado de Rajapaksa, el diputado Dinesh Gunawardena, prest¨® juramento como nuevo primer ministro de Sri Lanka, apenas unas horas despu¨¦s de que las fuerzas de seguridad irrumpieran en los campamentos de protesta. Est¨¢ previsto que el resto del Ejecutivo jure tambi¨¦n su cargo durante esta jornada. Una de las principales demandas de los manifestantes que desde hace meses claman en las calles del pa¨ªs, la convocatoria de elecciones y la renovaci¨®n en los puestos del poder, queda as¨ª incumplida.
Tras tomar posesi¨®n de su cargo el jueves, el reci¨¦n investido presidente, que tambi¨¦n ha asumido el Ministerio de Finanzas, hab¨ªa dado un ultim¨¢tum de 72 horas a los acampados en edificios y sedes oficiales para que los abandonaran. Wickremesinghe emiti¨®, el mismo d¨ªa, una orden a todos los miembros de las Fuerzas Armadas para que se prepararan para ¡°mantener el orden p¨²blico¡± a partir de este viernes. El lunes, cuando a¨²n era presidente interino ¡ª fue nombrado para ese cargo por Rajapaksa antes de que el Parlamento lo confirmara como jefe de Estado¡ª , Wickremesinghe hab¨ªa decretado el estado de emergencia, que faculta a los militares para detener a los manifestantes y restringir el derecho de manifestaci¨®n.
Estas decisiones hicieron temer una oleada represiva que, seg¨²n los organizadores de las protestas, se ha concretado esta madrugada, cuando cientos de militares y agentes de la Polic¨ªa desmantelaron parte del campamento bautizado como Gota go home (por Gotabaya, nombre de pila del anterior presidente), en el parque Galle, en el centro de Colombo, antes de dirigirse a la sede de la Presidencia para sacar a los all¨ª acampados. Los medios de comunicaci¨®n del pa¨ªs mostraron im¨¢genes de soldados con equipamiento antidisturbios y armados con rifles de asalto derribando las tiendas de ese parque, convertido en el epicentro de las protestas y levantado en abril por manifestantes enfurecidos por la situaci¨®n de bancarrota del pa¨ªs. Seg¨²n el organizador de la protesta, Manjula Samarasekara, los agentes agredieron a los manifestantes.
¡°Estamos siendo atacados, necesitamos ayuda¡±, confirm¨® a la agencia Efe uno de los manifestantes, Manodhya Jayaratne, hacia las 2.30 hora local (22.30 del jueves en hora peninsular espa?ola), cuando comenz¨® la operaci¨®n de desalojo. ¡°Nos golpearon de forma muy cruel¡±, declar¨® a Reuters Buddhika Abeyrathne, de 34 a?os, que presenci¨® la redada. ¡°El se?or Wickremesinghe no sabe lo que es la democracia¡±, a?adi¨®.
Tras las redadas, cientos de manifestantes marcharon desde la estaci¨®n de tren de la ciudad hasta el parque Galle, donde fueron retenidos por militares y polic¨ªas antidisturbios, que hab¨ªan levantado barricadas para cerrar el paso a la multitud. ¡°Esta es la cara de Ranil Wickremesinghe. En su primer d¨ªa [en la presidencia] ya ha utilizado a las fuerzas armadas¡±, declar¨® a Reuters Rajeevkanth Rajkumar, director general de una empresa de construcci¨®n, ¡°No queremos que m¨¢s personas inocentes resulten heridas, pero iremos a ese sitio [el lugar de la protesta] a cualquier precio¡±, a?adi¨®.
El Colegio de Abogados de Sri Lanka ha advertido de que la represi¨®n puede desestabilizar el pa¨ªs, pendiente de un rescate del Fondo Monetario Internacional. ¡°El uso de las fuerzas armadas para reprimir las protestas civiles en el primer d¨ªa de mandato del nuevo presidente es despreciable y tendr¨¢ consecuencias graves para la estabilidad social, econ¨®mica y pol¨ªtica de nuestro pa¨ªs¡±, censur¨® el colectivo de abogados en un comunicado.
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