La posible entrada de capital chino en el puerto de Hamburgo desata una tormenta pol¨ªtica en Alemania
El canciller Olaf Scholz defiende la compra de un 35% de la participaci¨®n y planea un viaje a China de claro componente econ¨®mico mientras los Veintisiete alertan de que el gigante asi¨¢tico es un ¡°competidor¡±
La posible entrada de capital chino en el puerto de Hamburgo ha desatado una tormenta pol¨ªtica en Alemania y ha provocado malestar entre los socios de la Uni¨®n Europea, que precisamente este viernes se reunieron en Bruselas en busca de una estrategia com¨²n hacia China. Mientras los Veintisiete expresan su preocupaci¨®n por la dependencia econ¨®mica del gigante asi¨¢tico, Berl¨ªn parece ir por su cuenta. No solo estudia un acuerdo para permitir que una empresa estatal china se haga con el 35% de una terminal del tercer puerto europeo, sino que tambi¨¦n mantiene su previsi¨®n de hacer un viaje de claro contenido econ¨®mico al pa¨ªs a principios de noviembre. En el avi¨®n del canciller Olaf Scholz volar¨¢ una nutrida representaci¨®n de empresarios alemanes.
Aunque Scholz desestim¨® las cr¨ªticas asegurando que no ha notado malestar con Alemania en el reciente Consejo Europeo, a las voces internas que alertan sobre repetir los mismos errores que con Rusia se han sumado tambi¨¦n detractores en Bruselas. Mientras la diplomacia de la UE se?ala que Pek¨ªn debe ser considerado como un ¡°competidor¡± y un ¡°rival global¡± que fomenta ¡°una visi¨®n alternativa del orden mundial¡±, Berl¨ªn se aleja con los hechos del debate europeo al seguir una pol¨ªtica que parece priorizar los negocios con Pek¨ªn.
En casa a Scholz le llueven las cr¨ªticas desde todos los frentes, incluidos los partidos que forman la coalici¨®n de Gobierno de socialdem¨®cratas, verdes y liberales. En el origen de la disputa est¨¢ un acuerdo de 2021 entre la empresa de log¨ªstica portuaria HHLA, en manos p¨²blicas, y el operador chino Cosco Shipping Ports seg¨²n el cual este ¨²ltimo se har¨ªa con el 35% de la terminal de contenedores de HHLA de Tollerort, una de las tres que forman el complejo portuario de Hamburgo.
Seg¨²n una investigaci¨®n de las televisiones NDR y WDR, la Canciller¨ªa presiona para que se firme el acuerdo, pese a que los seis ministros involucrados en la evaluaci¨®n de las grandes inversiones han rechazado darle el visto bueno. Entre los ministerios que se niegan a aprobar la venta est¨¢n los de Exteriores y Econom¨ªa, liderados por los verdes; el de Finanzas, en manos de los liberales, pero tambi¨¦n los de Interior y Defensa, dirigidos por pol¨ªticas socialdem¨®cratas.
Inyecci¨®n econ¨®mica
Scholz fue alcalde de Hamburgo entre 2011 y 2018. El actual alcalde, Peter Tschentscher, tambi¨¦n socialdem¨®crata, defiende el acuerdo porque supone una inyecci¨®n econ¨®mica para el puerto y la mejora de su posici¨®n respecto a sus competidores. Argumenta adem¨¢s que el grupo chino no tendr¨ªa acceso a la infraestructura cr¨ªtica y que la propiedad seguir¨ªa siendo de dominio p¨²blico. ¡°No estamos hablando de vender el puerto, como ha ocurrido en otros casos¡±, subray¨® Scholz el viernes. ¡°Hablamos de la posible venta de una terminal y existen otras situaciones similares en otros puertos de Alemania occidental¡±, a?adi¨®.
La pol¨¦mica de la entrada de capital chino en la terminal ha estallado justo en v¨ªsperas de un viaje a China en las pr¨®ximas semanas, seguramente hacia el 3 o el 4 de noviembre, seg¨²n adelantaron fuentes gubernamentales. La visita tambi¨¦n ha provocado recelos en Berl¨ªn por el momento en que se produce, en medio de una guerra de agresi¨®n rusa que ha generado una crisis energ¨¦tica en Europa, y en pleno debate sobre el riesgo de algunas inversiones en un entorno internacional tensionado. El mensaje de la oposici¨®n y los socios de Gobierno de Scholz se resume en que no hay que cometer los mismos errores de dependencia, es decir, que no se pueden poner muchos huevos en la misma cesta.
¡°[El viaje] forma parte de la buena pol¨ªtica de la Rep¨²blica Federal de Alemania, porque hay muchos temas de los que tenemos que hablar los unos con los otros¡±, asegur¨® Scholz en Bruselas. ¡°No hay ninguna voz relevante en Europa que defienda la desglobalizaci¨®n y el desacoplamiento¡±, a?adi¨®: ¡°Nadie dice que tengamos que salir de China, que no podamos exportar, que no debamos invertir o importar m¨¢s de China. Lo que todos dicen, y yo tambi¨¦n, es que vivimos en un mundo cada vez m¨¢s multipolar y que los pa¨ªses fuertes no debemos concentrarnos solos en unos pocos pa¨ªses¡±.
Por si el ambiente pol¨ªtico no estuviera lo suficientemente caldeado, el diario econ¨®mico Handelsblatt ha desvelado que la Comisi¨®n Europea advirti¨® a Berl¨ªn sobre la venta del puerto a la empresa china hace meses. La informaci¨®n recoge que la infraestructura no solo tiene importancia civil, sino tambi¨¦n militar, por lo que cualquier cambio de propiedad deber¨ªa analizarse con especial precauci¨®n.
Para China, la mayor potencia comercial, la participaci¨®n en puertos de todo el mundo es una de sus principales estrategias dentro de la iniciativa Nueva Ruta de la Seda. Este ambicioso proyecto, lanzado en 2013 por el presidente Xi Jinping, no solo aspira a crear corredores comerciales por tierra, sino tambi¨¦n por mar con presencia en puertos importantes a lo largo de las principales rutas comerciales desde y hacia China. Empresas del gigante asi¨¢tico ya tienen participaciones en una decena de puertos europeos, entre ellos Le Havre y Dunkerque en Francia; Amberes y Brujas en B¨¦lgica o El Pireo en Grecia (donde Cosco es accionista mayoritario).
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