El Kremlin trata de recuperar el nombre de Stalingrado
El partido del presidente ruso rehabilita la figura del antiguo dictador sovi¨¦tico e insiste en comparar la guerra de Ucrania con la cruenta batalla de la II Guerra Mundial
Vlad¨ªmir Putin confes¨® una vez al cineasta estadounidense Oliver Stone que ¡°Stalin fue un producto de su ¨¦poca¡±. El dictador sovi¨¦tico era, a ojos del presidente ruso, una figura hist¨®rica v¨ªctima de ¡°una excesiva demonizaci¨®n¡±. En el presente, en la ¨¦poca marcada por la invasi¨®n rusa de Ucrania, las autoridades presionan para renombrar de nuevo la ciudad de Volgogrado como Stalingrado. El mandatario visita este jueves la urbe con motivo del 80? aniversario de la victoria que encauz¨® la guerra contra el nazismo. Las glorias del pasado, incluso las que se atribuy¨® a Stalin, son un activo pol¨ªtico muy valioso para sus justificaciones del presente.
El Parlamento de Volgogrado impuso en 2013 la tradici¨®n de cambiar el nombre de la ciudad durante 24 horas cada 2 de febrero, d¨ªa de la derrota del VI Ej¨¦rcito alem¨¢n en Stalingrado, aunque la iniciativa no lleg¨® a cristalizar en una tradici¨®n, ya que no se cumpli¨® todos los a?os, como en 2017. Fue una de las iniciativas emprendidas por aquella ¨¦poca por las autoridades para fomentar el patriotismo, como la muy popular cinta de San Jorge. Este a?o, sin embargo, la campa?a ha ido mucho m¨¢s lejos y los letreros de la ciudad fueron sustituidos ya el lunes 30 de enero.
La exaltaci¨®n de la figura de Stalin en el presente se ha materializado incluso en la aprobaci¨®n en junio del a?o pasado de una ley que proh¨ªbe establecer paralelismos entre el Tercer Reich y la Uni¨®n Sovi¨¦tica, y entre las acciones de sus ej¨¦rcitos durante la II Guerra Mundial. Ello incluye hasta penas de 15 d¨ªas de c¨¢rcel por ¡°delitos¡± como denunciar las conquistas territoriales que obtuvo Mosc¨² en Polonia a trav¨¦s de las cl¨¢usulas secretas del pacto Molotov-Ribbentrop, cuya existencia fue revelada por el Gobierno de Mija¨ªl Gorbachov.
Putin, al que la directora de Russia Today ha llegado a referirse con el mismo t¨ªtulo que ostentaba Stalin (Vozhd, caudillo), calific¨® el pacto de Stalin y Hitler de ¡°inmoral¡± en una carta abierta a Polonia. D¨¦cada y media despu¨¦s, aquellas afirmaciones son delito, porque su nueva versi¨®n oficial es que el acuerdo con el Tercer Reich fue solo una forma de ganar tiempo.
A pesar de este fervor nost¨¢lgico, las encuestas del propio Kremlin demuestran que la poblaci¨®n est¨¢ en contra de renombrar a su ciudad en homenaje a Stalin. Seg¨²n los sondeos del centro estatal VtsIOM, un 67% de los habitantes de Volgogrado rechazan la medida porque la consideran un derroche de dinero y un sinsentido. La mayor¨ªa de los consultados critican la iniciativa con el argumento de que no se debe vivir en el pasado.
El Kremlin, por su parte, intenta vincular su guerra contra Ucrania con la II Guerra Mundial a base de repetir que Kiev es un supuesto ¡°r¨¦gimen a desnazificar¡±. El recuerdo en cada hogar de la que en Rusia se conoce como Gran Guerra Patria y las millones de vidas perdidas en la lucha contra el Tercer Reich son sus bazas. Por ello, las autoridades de Volgogrado han planteado cambiar su nombre a trav¨¦s de varias iniciativas ciudadanas, incluidas varias formadas por veteranos tanto de batallas de hace 80 a?os como de las actuales en Ucrania.
Refer¨¦ndum sobre el cambio de nombre
El Gobierno de la regi¨®n se plantea celebrar un refer¨¦ndum sobre el cambio de nombre. Y el partido de Putin, Rusia Unida, ha instruido a sus pol¨ªticos a hacer comparaciones esta semana entre la ofensiva sobre Ucrania y la batalla de Stalingrado, ¡°aquella l¨ªnea de donde es imposible retirarse¡±. Al preguntarle si Volgogrado, la ciudad del Volga, podr¨ªa volver a honrar el nombre de Stalin definitivamente, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha eludido una respuesta clara: ¡°No puedo confirmar nada¡±.
Putin visitar¨¢ Volgogrado hoy. En su agenda figura depositar una ofrenda floral ante la Llama Eterna del Sal¨®n de la Gloria Militar, situado en la colina de Mam¨¢yev Kurg¨¢n, y pasear por el museo-panorama dedicado a la batalla de Stalingrado. En su entrada fueron inaugurados este mi¨¦rcoles tres bustos con las efigies de Stalin, como comandante supremo de las Fuerzas Armadas de la URSS, y de los mariscales Gueorgi Zh¨²kov y Aleksandr Vasilevski, responsables de la primera gran victoria sovi¨¦tica.
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