El Departamento de Justicia de EE UU acusa a la polic¨ªa de Louisville de pisotear los derechos civiles

La polic¨ªa de Louisville es racista, hace un uso excesivo de la fuerza, permite que los perros muerdan a los sospechosos despu¨¦s de que estos se hayan rendido, lleva a cabo registros en virtud de ¨®rdenes judiciales defectuosas, abusa del patad¨®n en la puerta y de los golpes para vencer resistencias y, en definitiva, viola constantemente la primera y la cuarta enmiendas de la Constituci¨®n, que protegen la libertad de expresi¨®n y los derechos de los ciudadanos ante la actuaci¨®n de los agentes. La lista de acusaciones es m¨¢s extensa y se incluye en un informe del Departamento de Justicia de Estados Unidos presentado en la capital de Kentucky (628.000 habitantes en el censo de 2021) por el Fiscal General del Estado, Merrick Garland, que sentenci¨® este mi¨¦rcoles ante la prensa: ¡°Esas conductas socavan su misi¨®n y tensan la relaci¨®n con la comunidad a la que deben proteger y servir. Son inaceptables. Desgarradoras¡±.

El informe, 90 p¨¢ginas en las que sucede un ejemplo de brutalidad policial tras otro ¨Dpalizas, discriminaci¨®n racista y con enfermos mentales, abuso de herramientas como el estrangulamiento para reducir a los detenidos¨D se encarg¨® hace dos a?os, como respuesta de la muerte a manos de los agentes en marzo de 2020 de la empleada negra de hospital Breonna Taylor, durante una chapucera operaci¨®n policial antidrogas que acab¨® en tragedia en el apartamento en el que la joven, de 26 a?os, viv¨ªa. Taylor se convirti¨® en uno de los iconos de las protestas que prendieron ese a?o por todo el pa¨ªs bajo el paraguas del movimiento Black Lives Matter, tras la muerte por asfixia en Minneapolis, dos meses despu¨¦s, de George Floyd, bajo el peso de la rodilla de un uniformado blanco llamado Derek Chauvin.

Para redactar el documento, que concluye que ¡°la polic¨ªa de la ciudad ha practicado un estilo agresivo que despliega de forma selectiva, especialmente contra los negros, pero tambi¨¦n contra otros colectivos vulnerables¡±, el Departamento de Justicia se entrevist¨® con centenares de agentes y v¨ªctimas de sus tropel¨ªas, y revis¨® las grabaciones de las c¨¢maras corporales que los polic¨ªas deben llevar durante el desempe?o de su trabajo. En esas grabaciones, dice el informe, se ve a los agentes mofarse de personas con discapacidad, arrojar desde sus coches de patrulla bebidas a los transe¨²ntes y emplear ep¨ªtetos racistas como ¡°monos¡±, ¡°animales¡± o ¡°ni?os¡± para referirse a ciudadanos negros

Garland se detuvo en esos tres insultos durante su comparecencia de este mi¨¦rcoles y entresac¨® una frase de las 90 p¨¢ginas, que, dijo, resume los hallazgos que estas contienen. La pronunci¨® un agente de alto rango parapetado tras el anonimato: ¡°Breonna Taylor fue un s¨ªntoma de problemas que hemos tenido durante a?os [en las fuerzas de seguridad de Louisville]¡±.

En el caso del asesinato de Taylor, tuvo que intervenir el Departamento de Justicia para depurar responsabilidades. Su investigaci¨®n sobre lo que sucedi¨® aquella noche ha concluido que los tres agentes que participaron en el allanamiento de la casa tomaron r¨¢pidamente ¡°medidas para ocultar sus fechor¨ªas¡±; entre otras, mentir al FBI. Tambi¨¦n, que ¡°pidieron una orden de registro del apartamento a sabiendas de que no hab¨ªa un motivo para la b¨²squeda¡±. Los agentes fueron imputados en agosto pasado por violar los derechos civiles de la v¨ªctima

¡°En la mayor¨ªa de los incidentes problem¨¢ticos que investigamos, los supervisores revisaron la conducta en cuesti¨®n pero no consideraron que los agentes hubieran cometido ninguna falta¡±, se puede leer en el informe, en el que se cifra en 40 millones de d¨®lares el dinero que el departamento de polic¨ªa ha pagado em los ¨²ltimos seis a?os para enterrar las acusaciones por mala conducta.

En el caso del asesinato de Taylor, tuvo que intervenir el Departamento de Justicia para depurar responsabilidades. Su investigaci¨®n sobre lo que sucedi¨® aquella noche ha concluido que los tres agentes que participaron en el allanamiento de la casa tomaron r¨¢pidamente ¡°medidas para ocultar sus fechor¨ªas¡±; entre otras, mentir al FBI. Tambi¨¦n, que ¡°pidieron una orden de registro del apartamento a sabiendas de que no hab¨ªa un motivo para la b¨²squeda¡±. Los agentes, que fueron exonerados por un Gran Jurado, fueron imputados en agosto pasado por el departamento que dirige Garland por violar los derechos civiles de la v¨ªctima.

A la presentaci¨®n del informe acudi¨® el alcalde de Louisville, Craig Greenberg, que prometi¨® ¡°corregir los errores del pasado¡± y pidi¨® que sus conclusiones ¡°no se politizaran¡±. ¡°No se trata de pol¨ªtica ni de ning¨²n otro sitio. Estamos hablando de Louisville (...) Haremos progresos hacia la reforma, hasta que podamos asegurarnos que nuestras fuerzas de seguridad cumplen las normas¡±.

Con los ¨²ltimos episodios de violencia policial, como la letal paliza que cinco polic¨ªas negros dieron en enero al afroamericano Tyre Nichols en Memphis, a¨²n frescos, el prop¨®sito de enmienda de Greenberg no parece que vaya a ser el ¨²ltimo. El Departamento de Justicia tiene abiertas otras investigaciones parecidas en lugares como Minneapolis, Oklahoma City, Mount Vernon, Nueva York, Phoenix o Worcester (Massachussets).

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