El Reino Unido registra cifras r¨¦cord de inmigraci¨®n pese a las promesas del Brexit
El saldo neto de 606.000 personas, tras la entrada el a?o pasado de 1,2 millones y la salida de 557.000, incrementa la presi¨®n sobre Sunak y los conservadores, que prometieron una reducci¨®n dr¨¢stica
El saldo neto de inmigrantes que llegaron al Reino Unido en 2022 fue de 606.000 personas, seg¨²n las cifras publicadas este jueves por la Oficina Nacional de Estad¨ªstica (ONS, en sus siglas en ingl¨¦s). Supone una cifra r¨¦cord del 24% m¨¢s que la de 488.000 personas registrada un a?o antes. A pesar de que las previsiones de los expertos (por ejemplo, el Centro para Estudios Pol¨ªticos) llegaron a sugerir un saldo neto muy superior ¡ªentre 700.000 y un mill¨®n de inmigrantes¡ª, los datos conocidos incrementan la presi¨®n sobre Rishi Sunak y el Partido Conservador.
Desde 2010, cuando el saldo neto era de 250.000 y el entonces primer ministro David Cameron prometi¨® reducir las cifras a ¡°unas decenas de miles¡±, los tories no han dejado de repetir la misma promesa a la vez que se chocaban con el creciente muro de la realidad migratoria. El propio Sunak, aunque ya se ha olvidado de su compromiso de bajar las cifras a la mitad, sigue prometiendo unos resultados que no llegan.
En 2022, seg¨²n la ONS, el n¨²mero total de inmigrantes llegados al Reino Unido fue de cerca de 1,2 millones. El saldo neto surge de restar a esa cifra las 557.000 personas que abandonaron el pa¨ªs ese mismo a?o. En total, se incorpor¨® a la masa de poblaci¨®n brit¨¢nica el equivalente a una ciudad como Glasgow.
Lo parad¨®jico de la situaci¨®n es que la inmensa mayor¨ªa de los nuevos inmigrantes son extracomunitarios. Desde que el Brexit sali¨® adelante, bajo la bandera del take back control (recuperemos el control, un eslogan que hac¨ªa sobre todo referencia a las fronteras), el flujo de reci¨¦n llegados a suelo brit¨¢nico se ha descontrolado por completo, pero las cifras de ciudadanos de la UE no han hecho m¨¢s que reducirse.
Del total de personas que pasaron a vivir en el Reino Unido en 2022, 925.000 eran de pa¨ªses de fuera de la UE. Apenas 151.000 de la cifra total eran ciudadanos comunitarios, junto a cerca de 88.000 brit¨¢nicos que regresaron a su tierra.
¡°El principal componente que explica este aumento en las cifras de inmigraci¨®n lo constituyen las personas procedentes de pa¨ªses no comunitarios que han llegado en busca de trabajo, estudios o por razones humanitarias, y eso incluye a todos los que llegaron desde Ucrania u Hong Kong¡±, ha explicado Jay Lindopp, la directora del Centro para la Migraci¨®n Internacional, que forma parte de la ONS.
Tan solo en 2022 el Reino Unido acogi¨® a 463.000 estudiantes extranjeros, atra¨ªdos por la fama y el prestigio de la educaci¨®n universitaria. Una gran parte de ellos permanecer¨¢ en el pa¨ªs durante varios a?os m¨¢s, o definitivamente. Y tienen el derecho a traer con ellos a sus familiares.
El Gobierno de Boris Johnson abri¨® sus puertas a todos los residentes de la antigua colonia de Hong Kong que quisieran huir de la restricci¨®n de las libertades impuesta por Pek¨ªn. M¨¢s de 52. 000 personas se acogieron a la oferta el a?o pasado, adem¨¢s de 76.000 solicitantes de asilo.
Y finalmente, cientos de miles de personas procedentes de Ucrania (114.000 en este caso, seg¨²n el censo de la ONS) y Afganist¨¢n han utilizado v¨ªas perfectamente legales para adquirir su residencia brit¨¢nica.
Crisis pol¨ªtica interna entre los conservadores
El ala dura del Partido Conservador ha convertido el discurso contra la inmigraci¨®n en la bandera sustitutiva de un Brexit que cada vez tiene peor fama, hasta el punto de que un pol¨ªtico populista que alcanz¨® la primera fila con el discurso anti-UE, como Nigel Farage, ha admitido recientemente que la salida de la Uni¨®n Europea ¡°ha sido un fracaso¡±.
Las figuras emergentes entre ese neoconservadurismo que afila los dientes, ante la previsible ca¨ªda electoral de Sunak dentro de un a?o, han comenzado a endurecer su discurso. Entre ellas est¨¢ la ministra del Interior, Suella Braverman, que lograba enardecer hace dos semanas a los asistentes de la conferencia organizada por la corriente interna National Conservatism (Conservadurismo Nacional). ¡°No es xen¨®fobo decir que una inmigraci¨®n masiva y acelerada no es sostenible a la hora de proporcionar vivienda o servicios [a los reci¨¦n llegados]¡±, defend¨ªa Braverman, de origen indio e hija de inmigrantes procedentes de Kenia. ¡°No supone tener prejuicio alguno el asegurar que son demasiadas las personas que han venido hasta aqu¨ª de manera ilegal y reclaman asilo. No tenemos suficientes medios para acomodarlos¡±, jaleaba la ministra a sus seguidores.
La fina l¨ªnea de los laboristas
El Partido Laborista de Keir Starmer camina sobre una fina l¨ªnea en la cuesti¨®n de la inmigraci¨®n. Consciente de la impopularidad que el asunto sigue teniendo entre la parte de su electorado m¨¢s cercana a las tesis del Brexit, la formaci¨®n de izquierdas rechaza las peticiones de los empresarios para que se ampl¨ªe la cuota de visados de trabajo y promete que, cuando llegue al Gobierno, har¨¢ que sean los ciudadanos brit¨¢nicos los que ocupen esos puestos.
Aunque su promesa, calcada a la que en su d¨ªa hizo el Gobierno de Boris Johnson, sea tambi¨¦n escasamente realista, seg¨²n se?alan los expertos en el mercado laboral brit¨¢nico, el laborismo cuenta con la f¨¢cil ventaja de poder deshacer, con un juego de palabras, los esl¨®ganes del Partido Conservador. ¡°Han perdido el control sobre este asunto [frente al take back control prometido]. Han fracasado a la hora de elaborar una estrategia para solucionar las tensiones de nuestro mercado laboral, y el resultado ha sido que las empresas se aferran desesperadamente a la mano de obra extranjera¡±, ha dicho en la emisora LBC el portavoz laborista de Inmigraci¨®n, Stephen Kinnock.
La oposici¨®n laborista ha podido aprender la lecci¨®n m¨¢s importante de estos ¨²ltimos a?os, y se resiste a poner en cifras cualquier compromiso de reducci¨®n del volumen de inmigrantes.
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