Adi¨®s al petro, la criptomoneda fallida de Nicol¨¢s Maduro

El fin del petro, la criptomoneda estatal que ofrec¨ªa garant¨ªa de respaldo con petr¨®leo y oro nacional, basado en la tecnolog¨ªa de cadena de bloques y lanzado con un enorme esfuerzo promocional por el Gobierno de Nicol¨¢s Maduro, est¨¢ cerca. Entre las fuentes econ¨®micas y financieras consultadas se asume que el instrumento monetario ir¨¢ muriendo poco a poco, camino a su liquidaci¨®n definitiva, despu¨¦s de, presumiblemente, asumir deudas y cerrar los compromisos con acreedores, vinculados sobre todo al sector comercial.

Desde fines de mayo, seg¨²n reportaron los usuarios, la cadena de bloques del petro comenz¨® a tener una conducta irregular y la plataforma #PetroApp a evidenciar fallas. La trama de la corrupci¨®n PDVSA-Crypto, estructurada en torno a una red de altos funcionarios vinculados a Tarek El Aissami, hasta el pasado febrero presidente de Petr¨®leos de Venezuela (PDVSA) y vicepresidente del ?rea Econ¨®mica del Gobierno de Maduro, constituye una de las razones fundamentales de este en¨¦simo experimento fallido de pol¨ªticas p¨²blicas del chavismo.

La criptomoneda petro (PTR) fue presentada en 2017 con enorme publicidad, tras producirse el derrumbe de la econom¨ªa de controles de cambio y precios. Se concibi¨® como una herramienta para transar activos y capitalizar recursos, desde el supuesto de que su soporte eran las cuantiosas reservas petroleras internacionales certificadas en el pa¨ªs. Muchos usuarios del entorno social del chavismo, vinculados al sistema Patria [plataforma virtual creada para que la poblaci¨®n cobre salarios y ayudas] se dedicaron a cambiar progresivamente bol¨ªvares por petros, alentados por la propaganda oficial, con el objeto de ahorrar activos. Tambi¨¦n empresarios y cadenas comerciales.

Su implantaci¨®n fue tomando aliento progresivamente, incorporando su presencia como forma de pago en algunas transacciones digitales oficiales, y se hizo obligatorio como unidad de referencia luego de la segunda reconversi¨®n monetaria de Maduro en servicios tributarios y consulares. Su nacimiento estuvo acompa?ado de una campa?a muy activa de la plana dirigente oficialista para promocionar su uso y darlo a conocer entre la poblaci¨®n, y en 2018 desembarcaron en el pa¨ªs, de manera masiva, las criptomonedas. Tarek El Aissami convenci¨® a Maduro de que las criptomonedas eran un excelente instrumento para evadir las sanciones internacionales, ya entonces en vigor, y para dar ox¨ªgeno a una econom¨ªa en colapso.

Joselit Ram¨ªrez, presidente de la Superintendencia Nacional de Criptoactivos, cercano en lo personal y lo pol¨ªtico a El Aissami, est¨¢ hoy en prisi¨®n. Hugbel Roa, tambi¨¦n amigo de El Aissami ¡ªy tambi¨¦n preso¡ª, era el ministro de Ciencia y Tecnolog¨ªa y Educaci¨®n Universitaria, encargado de presentar y asumir el proyecto del Petro a finales de 2017. La purga adelantada por Maduro al desmantelar la extendida red de corrupci¨®n, barri¨® a una parte importante del personal t¨¦cnico de Sunacrip (Superintendencia Nacional de Criptoactivos). Ahora, se ha nombrado una nueva junta de este ente, presidida por Anabel Pereira.

El escaso margen de maniobra para operar el Petro, basado en su naturaleza centralizada, conspir¨® contra su utilidad funcional desde el comienzo. Tambi¨¦n la escasa credibilidad de su equipo promotor. ¡°El Petro no es un bitcoin, que tienes que minar para validar las transacciones. Es un algoritmo con un techo¡±, explica Henkel Garc¨ªa, analista financiero. ¡°Para que ese proceso sea cre¨ªble, sobre todo en un Gobierno con gente que tiene tantos problemas de credibilidad, era necesario ofrecer una v¨ªa de canje. El Petro ha sido aceptado m¨¢s por un juego de arbitraje, pod¨ªa comprarse m¨¢s barato en un mercado secundario, pero no mucho m¨¢s¡±.

La dolarizaci¨®n de la econom¨ªa venezolana en 2018, apunta Garc¨ªa, hizo que parte de la orientaci¨®n estrat¨¦gica del petro como captador de recursos internacionales perdiera peso espec¨ªfico. ¡°El petro fue relanzado como seis o siete veces antes de lo que sucede hoy¡±. ¡°Las criptomonedas terminaron convertidas en el instrumento de un grupo de pol¨ªticos corruptos chavistas para desfalcar lo poco que quedaba de dinero en Petr¨®leos de Venezuela¡±, sostiene el economista Omar Zambrano. Las sanciones internacionales en contra del Gobierno de Maduro obligaban a la jerarqu¨ªa chavista a comercializar petr¨®leo de manera irregular, adelantando operaciones comerciales ¡°en negro¡±. Las transacciones con criptomonedas hicieron posible el desv¨ªo de recursos a los bolsillos de la escuadra de gerentes de Tarek El Aissami.

Un informe publicado por la ONG anticorrupci¨®n Transparencia Venezuela sostiene que, al mando de El Aissami, Petr¨®leos de Venezuela asignaba a la Superintendencia de Criptoactivos la responsabilidad de la comercializaci¨®n del crudo venezolano. Ya cerca de su final, la Asociaci¨®n Nacional de Cripoactivos ha emitido un comunicado en el cual lamenta la progresiva mengua y decadencia del petro, afirmando que se env¨ªa ¡°un mensaje muy negativo a la comunidad nacional e internacional¡±.

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