El Kremlin allana el camino para una nueva movilizaci¨®n masiva de soldados
Vlad¨ªmir Putin ordena ampliar el m¨¢ximo de personal del ej¨¦rcito a 2,2 millones de militares, mientras el Ministerio de Defensa quiere reducir la lista de enfermedades que eximen del reclutamiento
El Gobierno ruso asegura que no contempla una nueva movilizaci¨®n para la enquistada invasi¨®n de Ucrania, pero al mismo tiempo allana el terreno para engordar las filas del ej¨¦rcito. El Ministerio de Defensa ruso quiere tener a su disposici¨®n al mayor n¨²mero de civiles posible y desde finales del pr¨®ximo a?o excluir¨¢ como motivo para evitar un reclutamiento ¡°aquellas enfermedades que no tienen un impacto significativo en la capacidad militar¡± de la persona llamada a filas. No se concretan cu¨¢les. En l¨ªnea con el mismo objetivo, el presidente Vlad¨ªmir Putin ha decretado un aumento del personal te¨®rico de las Fuerzas Armadas ¡ªunas cifras que no necesariamente se corresponden con las efectivas con las que cuenta el ej¨¦rcito¡ª hasta los 2,2 millones de miembros.
Las bajas y el cansancio se acumulan en el frente y Rusia necesitar¨¢ m¨¢s hombres si la guerra se alarga, como prev¨¦ el Kremlin, que alerta de un aumento de las ¡°amenazas contra Rusia¡± vinculadas a la ¡°operaci¨®n militar especial [nombre oficial de la invasi¨®n de Ucrania] y la expansi¨®n en curso de la OTAN¡±. Mosc¨² asevera que los objetivos iniciales de la guerra no han cambiado.
¡°La operaci¨®n militar especial seguir¨¢. Nuestra econom¨ªa se ha adaptado y proporciona el marco necesario para su continuaci¨®n¡±, ha advertido este lunes el portavoz de Putin, Dmitri Peskov, tras incidir en que el Kremlin aguarda a que Occidente abandone a Kiev a su suerte. ¡°Est¨¢ claro que les es cada vez m¨¢s dif¨ªcil gastar dinero en el barril ucranio sin fondo¡±, ha manifestado el alto cargo.
Un tercio del presupuesto ruso est¨¢ destinado al gasto militar (un 40% si se a?aden otros cap¨ªtulos de seguridad) y Mosc¨² no se contenta con el territorio ucranio que ha ocupado hasta ahora. ¡°No vemos ninguna raz¨®n por la que deban revisarse nuestros objetivos¡±, respondi¨® el pasado viernes el ministro de Exteriores, Sergu¨¦i Lavrov, al ser preguntado durante la ¨²ltima cumbre de la OSCE (Organizaci¨®n para la Seguridad y la Cooperaci¨®n en Europa) sobre el escaso movimiento en las l¨ªneas del frente.
Seg¨²n el Ministerio de Defensa brit¨¢nico, las fuerzas rusas est¨¢n sufriendo estos dos ¨²ltimos meses en su ofensiva sobre Avdiivka (en el este de Ucrania) un desgaste parecido o mayor al de la batalla de Bajmut a principios de a?o. Pese a ello, el Kremlin asegura tener todo bajo control. El vicepresidente del Consejo de Seguridad ruso y antiguo presidente del pa¨ªs, Dmitri Medv¨¦dev, dijo este fin de semana que el ej¨¦rcito ha contratado a m¨¢s de 452.000 personas este a?o. No concret¨® si esa cifra incluye la integraci¨®n desde julio de los mercenarios y voluntarios de grupos como Wagner, ordenada por el Ministerio de Defensa.
Los motivos de salud estuvieron entre las principales alegaciones de los j¨®venes rusos que intentaron evitar la primera gran movilizaci¨®n en septiembre de 2022, cuando m¨¢s de 300.000 civiles fueron llamados a filas. El Ministerio de Defensa se?ala ahora en su borrador de decreto que ha tomado nota ¡°de la experiencia recogida¡± en Ucrania. Aquel reclutamiento fue ca¨®tico y hubo miles de denuncias de los movilizados. Aunque Putin y el ministro de Defensa, Sergu¨¦i Shoig¨², afirmaron que solo ser¨ªan llamados aquellos con experiencia militar que formaban parte de la reserva, el decreto de movilizaci¨®n no lo especificaba y hubo casos en los centros de reclutamiento en los que se intent¨® obligar a servir en Ucrania a civiles que contaban con un certificado m¨¦dico que deb¨ªa eximirles.
Propuesta de ampliar la mili
La reducci¨®n de la lista de enfermedades que eximen del reclutamiento no solo facilitar¨¢ la movilizaci¨®n de civiles, sino que tambi¨¦n se extender¨¢ a la contrataci¨®n de militares profesionales y a los llamamientos anuales de j¨®venes para cumplir el servicio militar obligatorio. De hecho, algunos legisladores rusos han puesto sobre la mesa la ampliaci¨®n de la mili hasta los dos a?os para contar con m¨¢s tropas disponibles. Andr¨¦i Guruliov, diputado, teniente general y miembro del comit¨¦ de Defensa de la Duma Estatal, ha propuesto adem¨¢s suprimir centros de estudios para favorecer la entrada de los rusos en las Fuerzas Armadas, ya que estar en proceso de formaci¨®n sirve para aplazar el servicio militar obligatorio.
Putin tambi¨¦n prepara un ej¨¦rcito que pueda enfrentarse a la OTAN a medio plazo. El Kremlin cambi¨® el pasado viernes por decreto la cifra m¨¢xima de los integrantes en las Fuerzas Armadas y lo elev¨® hasta los 2,2 millones de miembros, 1,3 millones de ellos posibles combatientes. No es la primera vez que Rusia modifica este tope: ya lo hizo el mandatario en 2000 y 2010 al reformar la desmesurada estructura militar heredada de la URSS, y lo volvi¨® a hacer en agosto de 2022, al aumentar el l¨ªmite en 130.000 militares seis meses despu¨¦s de comenzar la invasi¨®n de Ucrania, tras ver que se alargar¨ªa.
El Ministerio de Defensa ha explicado en un comunicado que la revisi¨®n de la dimensi¨®n te¨®rica de las Fuerzas Armadas ¡°se debe al aumento de las amenazas contra Rusia vinculadas a la operaci¨®n militar especial y la expansi¨®n en curso de la OTAN¡±. Al desgaste sufrido en los campos de batalla de Ucrania se suman la incorporaci¨®n a la Alianza de Finlandia y sus m¨¢s de 1.300 kil¨®metros de frontera con Rusia en abril de este a?o, y la futura adhesi¨®n de Suecia, a¨²n pendiente de la aprobaci¨®n definitiva por parte de Turqu¨ªa y Hungr¨ªa.
M¨¢s redadas de la polic¨ªa
Otro indicio de una posible movilizaci¨®n a corto plazo es que la polic¨ªa rusa ha intensificado en los ¨²ltimos meses las redadas en mezquitas, mercados y f¨¢bricas para captar potenciales reclutas entre los inmigrantes que tienen la doble nacionalidad. El objetivo son aquellos procedentes de las antiguas rep¨²blicas sovi¨¦ticas de Asia central, que forman la mayor¨ªa de la comunidad migrante en Rusia. Tras recibir la nacionalidad, algunos de ellos no formalizaron otro documento obligatorio, el llamado billete militar, un registro con el que el Ministerio de Defensa tiene a mano el perfil de los posibles reclutas.
En agosto pasado, m¨¢s de un centenar de trabajadores de un mercadillo de verduras de San Petersburgo fueron detenidos y llevados a un centro de alistamiento para cumplimentar este tr¨¢mite. ¡°Para aprovechar esta oportunidad de educar m¨¢s a los rusos¡±, dec¨ªa la polic¨ªa en su comunicado sobre los inmigrantes, ¡°la ciudadan¨ªa no solo otorga derechos, sino tambi¨¦n responsabilidades, incluida la obligaci¨®n constitucional de hacer el servicio militar¡±.
Este tipo de registros se han sucedido estas ¨²ltimas semanas en una de las mayores empresas de log¨ªstica del pa¨ªs, Wildberries, una alternativa a Amazon en Rusia. Este pasado fin de semana tuvo lugar el ¨²ltimo en un almac¨¦n de la regi¨®n de Tula, al sur de Mosc¨², donde una decena de empleados fueron detenidos ¡°para una verificaci¨®n rutinaria de documentos como parte del reclutamiento militar¡±, adujo la empresa para quitarle hierro. A finales de noviembre, Wildberries vio c¨®mo sus m¨¢s de 8.000 empleados interrumpieron el trabajo unas horas tras conocerse la primera redada, en la que m¨¢s de 40 trabajadores fueron llevados del dormitorio comunal en el que viv¨ªan al centro de reclutamiento.
Otro caso sonado tuvo lugar el pasado octubre, cuando Mamut Useinov, estrella de un conocido concurso televisivo de cantantes, fue apresado en una mezquita de Mosc¨². Seg¨²n su versi¨®n, junto a otros fue subido en un autob¨²s y retenido durante horas en un centro de reclutamiento. ¡°Me llevaron a la fuerza, mis documentos fueron confiscados ilegalmente y no tuve la oportunidad de apelar ni informar sobre mis enfermedades y creencias¡±, lamentaba en su cuenta personal de Instagram. ¡°Nos dijeron que deb¨ªamos firmar un contrato por un a?o o ir¨ªamos a prisi¨®n¡±, agreg¨® Useinov. Seg¨²n su relato, varios de los arrestados aceptaron entrar en el ej¨¦rcito.
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