90 d¨ªas de experimento: Portland decreta el estado de emergencia para desengancharse del fentanilo

El fentanilo se ha ensa?ado con Portland. Las autoridades del Estado de Oreg¨®n han decretado esta semana la emergencia por 90 d¨ªas para desengancharse del potente opi¨¢ceo que ha provocado una crisis de salud en Estados Unidos. La sustancia ha dejado en el condado de Multnomah, donde se ubica la ciudad, un incremento de las sobredosis mortales de 533% en los ¨²ltimos cuatro a?os. ¡°Nunca hemos visto una droga as¨ª de adictiva y estamos lidiando con nuestra respuesta¡±, admiti¨® la gobernadora Tina Kotek. La medida pretende ser un experimento m¨¢s en una ciudad que ha explorado nuevas rutas en la pol¨ªtica de drogas sin los resultados esperados.

La declaraci¨®n de la emergencia permite a las autoridades estatales, del condado y municipales establecer una zona cero en el centro de Portland, que ha visto c¨®mo la emergencia ha provocado tambi¨¦n una crisis econ¨®mica. Decenas de negocios han abandonado el n¨²cleo de la ciudad m¨¢s poblada de Oreg¨®n, con 600.000 habitantes.

El centro de comando pretende unificar la respuesta ante la epidemia y borrar las trabas burocr¨¢ticas entre los niveles de Gobierno. Los adictos al fentanilo podr¨¢n encontrar en un mismo edificio toda la atenci¨®n que necesitan. Sin importar si esta es la necesidad de una cama en un centro de rehabilitaci¨®n, una cita con un m¨¦dico o para obtener programas sociales o apoyo para comer.

¡°Vale la pena invertir, luchar por y mostrar un camino claro a la rehabilitaci¨®n para todos aquellos que est¨¢n luchando contra la adicci¨®n al fentanilo¡±, asegur¨® la gobernadora Kotek en una rueda de prensa. Los detalles de la medida se dar¨¢n a conocer en las pr¨®ximas semanas, pero de momento la prensa local ha informado que la declaratoria no necesita de nuevos recursos econ¨®micos. Solo enfoca el gasto de los tres niveles en la atenci¨®n de cientos de personas.

La medida ha sido recibida con escepticismo. ¡°Deber¨ªamos guardar el aplauso hasta que veamos qu¨¦ es lo que sucede realmente¡±, dijo Sharon Meieran, una de las comisionadas del condado de Multnomah, al diario local The Oregonian. La funcionaria pidi¨® adoptar la emergencia el a?o pasado para hacer frente a la epidemia que ha dejado 210 muertes entre 2018 y 2022 (el ¨²ltimo a?o disponible en las estad¨ªsticas) y que ha acarreado un incremento en varios delitos. ¡°Se han tomado demasiado tiempo en decidir que tenemos una crisis en las manos que ciertamente no va a terminarse en 90 d¨ªas¡±, a?adi¨®.

El fondo del debate que se tiene ahora en Oreg¨®n es qu¨¦ debe hacer el Estado con la Iniciativa 110, que despenalizaba la propiedad de peque?as cantidades de drogas duras, entre ellas el fentanilo, la hero¨ªna y las metanfetaminas. La medida fue aprobada en 2020 por el 56% de los votantes de la entidad, uno de los m¨¢s liberales en el combate a la prohibici¨®n de las drogas.

La iniciativa, la primera de su tipo en el pa¨ªs, pretend¨ªa cambiar d¨¦cadas de un enfoque punitivo de la pol¨ªtica de drogas, que ha provocado la sobrepoblaci¨®n carcelaria y se ha ensa?ado especialmente con negros y latinos pobres. Normas similares han sido aprobadas y puestas en marcha en varias ciudades del Oeste estadounidense, como Seattle, Los ?ngeles y San Francisco. Las autoridades de estas ciudades han limitado, cuando no dado marcha atr¨¢s, a este tipo de propuestas.

Este parece ser el destino de la Iniciativa 110. Los dem¨®cratas, quienes gobiernan Oreg¨®n desde 1987, revelaron recientemente una propuesta legislativa que modificar¨ªa el esp¨ªritu de la medida. De aprobarse, el Congreso local convertir¨ªa nuevamente en un delito no grave la posesi¨®n de peque?as cantidades. La nueva norma tambi¨¦n permitir¨ªa a las autoridades confiscar sustancias y evitar el uso en la v¨ªa p¨²blica. Tambi¨¦n har¨ªa m¨¢s f¨¢cil para los fiscales la persecuci¨®n de los traficantes y forzar a los pacientes a internarse en una cl¨ªnica de rehabilitaci¨®n, una muestra de fuerza que tambi¨¦n est¨¢ a debate en San Francisco. El 63% de los habitantes de Oreg¨®n apoyan la nueva ley.

Oreg¨®n se encuentra por debajo de la media nacional en sobredosis mortales de drogas il¨ªcitas. Tiene 30 muertes por cada 100.000 habitantes, mientras que la capital, D.C., est¨¢ a la cabeza de la lista con 94,2 y es seguida por Tennessee (55,4), Delaware (55,1) y Maine (51,6). La media nacional est¨¢ en 35. Las autoridades de la entidad informaron que en 2022 tres personas mor¨ªan cada d¨ªa por sobredosis accidentales. La peor parte se la llevaban los adictos negros, que registran 36% m¨¢s sobredosis fatales que los blancos en el condado de Multnomah. El fentanilo, una sustancia entre 80 y 100 veces m¨¢s fuerte que la morfina y 50 veces m¨¢s mortal que la hero¨ªna, ha catapultado la crisis.

Los pol¨ªticos parecen haberse decidido sobre el futuro de la Iniciativa 110. El experimento, no obstante, ha sido defendido por los cient¨ªficos y acad¨¦micos. En el oto?o pasado, un estudio realizado por la Escuela Grossman de Medicina de la Universidad de Nueva York (NYU), concluy¨® que la norma no provoc¨® un aumento en las sobredosis ni en las muertes por abuso de sustancias.

El equipo de m¨¦dicos investig¨® 13 Estados que ten¨ªan un nivel similar de consumo de sustancias al de Oregon. Despu¨¦s de tres a?os de an¨¢lisis, el periodo en el que ha estado vigente la iniciativa, no hay pruebas contundentes de que esta haya causado m¨¢s muertes. Corey Davis, el responsable de la investigaci¨®n, asegur¨® que las sobredosis accidentales se dispararon ¡°b¨¢sicamente en todas partes¡±.

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