El plan sobre migraci¨®n y ayuda a Ucrania e Israel peligra en el Senado de EE UU por el rechazo republicano

El proyecto de ley que aplica nuevos y m¨¢s duros controles migratorios, adem¨¢s de autorizar una nueva remesa de ayuda para Ucrania e Israel, ha tardado cuatro meses en consensuarse en el Senado de EE UU, pero solo se han necesitado horas para que quede al borde del fracaso. La falta de apoyos entre los republicanos ¡ªincluso entre aquellos que ayudaron en la negociaci¨®n¡ª y las cr¨ªticas de Donald Trump la condenan a languidecer sin llegar siquiera a votarse. La asistencia a Kiev en un momento clave de la guerra, como el resto de las partidas previstas en la propuesta, se precipita al limbo legislativo. El presidente, Joe Biden, el gran defensor de la medida, ha acusado a su predecesor de boicotear el texto por razones electorales. ¡°Todas las indicaciones son que este proyecto de ley ni siquiera llegar¨¢ a votarse en el Senado. ?Por qu¨¦? Por una simple raz¨®n: Donald Trump. Porque Donald Trump cree que le perjudica pol¨ªticamente¡±, ha declarado Biden en un discurso en la Casa Blanca.

¡°[La propuesta de ley] Va a hacer el pa¨ªs m¨¢s seguro. Va a hacer la frontera m¨¢s segura, tratar a la gente de manera m¨¢s humana y justa, y hacer la inmigraci¨®n legal m¨¢s eficiente, de acuerdo con los valores de nuestra naci¨®n y nuestras obligaciones en los tratados internacionales¡±, ha agregado Biden. ¡°No hacer nada no es una opci¨®n. Durante a?os, los republicanos han pedido reforzar la frontera. Ahora tienen un proyecto de ley que la refuerza m¨¢s que nunca, y estamos viendo todo tipo de declaraciones en contra¡±, ha agregado el presidente. Trump, que se ha declarado p¨²blicamente en contra de la medida, ¡°necesita un argumento para pelear en la campa?a¡± y quiere que sea este, ha sostenido el inquilino de la Casa Blanca.

La medida, que ha recibido el apoyo de la Patrulla Fronteriza, ha recibido cr¨ªticas tanto del ala progresista de los dem¨®cratas como, sobre todo, de la oposici¨®n republicana, que se prepara para vetar esta semana el debate y la votaci¨®n de la propuesta de ley. As¨ª, la dejar¨ªan en el limbo durante semanas, si no meses. Una reuni¨®n de los senadores conservadores, el lunes por la noche, evidenci¨® la fuerte animadversi¨®n hacia el proyecto. Tras 90 minutos de debate, el propio l¨ªder de la minor¨ªa republicana, Mitch McConnell, recomendaba a sus legisladores votar ¡°no¡± si el contenido de la propuesta no les convenc¨ªa. Pocos expresaron su apoyo al texto.

El proyecto de ley hab¨ªa comenzado a negociarse en octubre, cuando Biden pidi¨® al Congreso una partida suplementaria para la seguridad nacional de casi 120.000 millones de d¨®lares. De ellos, m¨¢s de la mitad est¨¢n previstos para la ayuda militar y econ¨®mica a Ucrania en su lucha contra la invasi¨®n rusa; cerca de 14.000 millones se dedicar¨ªan a la asistencia a Israel en la guerra en Gaza; el resto, a colaborar con Taiw¨¢n y a reforzar el control fronterizo, entre otros objetivos. Un grupo de senadores de ambos partidos ha debatido desde entonces c¨®mo armonizar la solicitud del presidente con las demandas republicanas que exig¨ªan una reforma que endureciera el sistema migratorio para dar el s¨ª a los fondos para Ucrania.

Una medida ¡°terrible¡±, seg¨²n Trump

En enero, Donald Trump, favorito en las primarias de su partido, se pronunci¨® contra la medida. Aunque desconoc¨ªa su contenido ¡ªlos propios negociadores no hab¨ªan terminado de perge?arlo¡ª, arremeti¨® en un mitin contra la propuesta, asegurando que era ¡°terrible¡±.

Desde entonces, los legisladores republicanos se han ido alineando con las tesis del que, hoy por hoy, es el l¨ªder indiscutible del partido. Y rechazan dar a la Administraci¨®n Biden nada que pueda parecer un triunfo, en pleno a?o electoral, y menos en materia migratoria, donde los votantes favorecen a los republicanos. ¡°?No seamos EST?PIDOS! Necesitamos una ley aparte sobre frontera e inmigraci¨®n. ?No hay que vincularla con la ayuda al exterior de ninguna manera, modo o forma!¡±, escribi¨® Trump en su red social, Truth Social.

El domingo se dio a conocer el texto consensuado. La Casa Blanca emiti¨® un comunicado en el que expresaba su satisfacci¨®n e instaba al Congreso a votar la medida lo antes posible. Sin embargo, este lunes, incluso los senadores republicanos que participaron en las negociaciones admit¨ªan que el futuro de la medida no est¨¢ nada claro. Este martes, el senador John Thune ha indicado que es ¡°improbable¡± que su bancada d¨¦ el visto bueno a proceder con la votaci¨®n, que el l¨ªder de la mayor¨ªa dem¨®crata, Charles Schumer, quiere celebrar el mi¨¦rcoles. ¡°Creo que nuestros miembros quieren m¨¢s tiempo para valorar [el proyecto de ley]¡±, apuntaba el republicano, que, pese a todo, dejaba abierta la posibilidad de una votaci¨®n m¨¢s adelante.

¡°Tras meses de negociaciones de buena fe, tras meses de darles a los republicanos muchas de las cosas que ped¨ªan, el l¨ªder McConnell y el grupo republicano est¨¢ dispuesto a tumbar la partida suplementaria de seguridad nacional, aunque contenga las provisiones sobre la frontera que hab¨ªan exigido de modo tan ferviente¡±, ha defendido Schumer.

En la C¨¢mara de Representantes, la medida tiene a¨²n menos probabilidades de salir adelante. All¨ª, los republicanos cuentan con la mayor¨ªa ¡ªaunque por apenas un pu?ado de votos¡ª y el presidente de la C¨¢mara, Mike Johnson, ya ha asegurado que el proyecto de ley ¡°nace muerto¡± en este foro. La bancada republicana tiene previsto, en su lugar, votar un proyecto de ley que se reduce ¨²nicamente a la ayuda a Israel. Tambi¨¦n ha iniciado los tr¨¢mites para un juicio pol¨ªtico contra el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, a quien acusa de mentir al Congreso y de permitir una pol¨ªtica migratoria excesivamente laxa e incumplir con ello las tareas de su cargo.

Para Trump y los republicanos, mantener vivo el debate sobre la inmigraci¨®n es algo que puede reportarles ventajas electorales en esta campa?a. El a?o pasado se batieron r¨¦cords de entradas irregulares, 2,4 millones de personas, un 14% m¨¢s con respecto al a?o anterior; en diciembre, la Patrulla Fronteriza detuvo a casi 250.000 personas que trataban de cruzar la frontera de manera ilegal, la cifra m¨¢s alta en d¨¦cadas. La t¨¢ctica del gobernador de Texas, Greg Abbott, de enviar autobuses cargados con estos migrantes a ciudades de mayor¨ªa dem¨®crata ¡ªChicago, Denver, Nueva York, Washington DC¡ª ha abierto tambi¨¦n el debate en lugares donde hasta ahora se apoyaba una reforma migratoria liberal.

Las posiciones contra la inmigraci¨®n han reforzado a Trump en su batalla en las primarias y el expresidente percibe que puede ganar votos para las elecciones de noviembre si dibuja a Biden como d¨¦bil y dispuesto a mantener ¡°abiertas¡± las fronteras. Al mismo tiempo, el rechazo republicano al proyecto de ley ¨Dy que recoge muchas de sus pretensiones¨D proporciona un argumento a sus rivales dem¨®cratas, que pueden describir la negativa como un movimiento puramente electoralista y acusarles de no querer, en realidad, resolver el problema.

Una encuesta para la cadena ABC, realizada en noviembre, conclu¨ªa que un 36% de los estadounidenses declaraba confiar m¨¢s en los republicanos para mantener la seguridad del sistema migratorio, frente a un 24% que se fiaba m¨¢s de los dem¨®cratas. El mes pasado, una serie de sondeos indicaba que solo un 29% aprobaba la gesti¨®n migratoria, mientras que un 63% la desaprobaba. Por su parte, unas encuestas de Gallup apuntan que a medida que ha aumentado el n¨²mero de detenciones en la frontera, tambi¨¦n ha crecido la preocupaci¨®n de los votantes por el asunto. Si en junio del a?o pasado, cuando se detectaron pocos cruces, solo un 9% de los independientes consideraba la inmigraci¨®n como una prioridad, ahora el 16% de este grupo lo ve as¨ª. Y este segmento del electorado puede tener la llave de la Casa Blanca.

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