Las amenazas a la seguridad planean sobre los Juegos Ol¨ªmpicos de Par¨ªs de este verano

Tony Estanguet, presidente del comit¨¦ organizador de los Juegos Ol¨ªmpicos de Par¨ªs, duerme tranquilo. Cuando, durante un almuerzo con periodistas hace unos d¨ªas en un restaurante italiano en el extrarradio norte de Par¨ªs, se le pregunt¨® qu¨¦ le inquietaba a unos meses de la ceremonia inaugural, el 26 de julio, respondi¨®: ¡°A m¨ª, personalmente, no gran cosa¡±.

Estanguet, que en su carrera como cano¨ªsta fue oro ol¨ªmpico en S¨ªdney, Atenas y Londres, a?adi¨®: ¡°No hay ning¨²n elemento que muestre que no lo vayamos a lograr¡±.

La villa ol¨ªmpica a orillas del Sena est¨¢ terminada. Las instalaciones y estadios, listos. Todo a punto para que, por primera vez en un siglo, la capital de Francia acoja unos Juegos y se convierta este verano en el centro del mundo.

Pero hay algo que, a poco m¨¢s de 100 d¨ªas de la inauguraci¨®n, preocupa a las autoridades y a los especialistas: la seguridad. Estos Juegos Ol¨ªmpicos se celebrar¨¢n en un contexto internacional tenso, con las guerras en Oriente Pr¨®ximo y Ucrania.

Una amenaza es Rusia. Par¨ªs se prepara para ciberataques rusos o campa?as de desinformaci¨®n. ¡°Ser¨¢ un riesgo¡±, coment¨® el presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, al inaugurar este jueves el Centro Acu¨¢tico. ¡°Por eso hay que mantenerse firmes¡±.

Otra amenaza planea sobre el evento: el terrorismo. Explica Fr¨¦d¨¦ric P¨¦chenard, exdirector general de la polic¨ªa nacional, y hoy concejal de la oposici¨®n en Par¨ªs: ¡°Estoy inquieto. Organizar algo como los Juegos Ol¨ªmpicos es enorme e incontestablemente hay riesgos objetivos¡±.

Desde 2015, Francia ha sufrido varios atentados y cuenta en su territorio con una multitud de islamistas radicales que podr¨ªan pasar a la acci¨®n. El atentado cerca de Mosc¨², la capital rusa, el pasado 22 de marzo, en el que murieron 144 personas, ha reforzado la alarma ante la posibilidad de que el Estado Isl¨¢mico o una organizaci¨®n similar intente algo parecido en Europa occidental.

Los Juegos Ol¨ªmpicos son un espect¨¢culo universal con audiencias que pueden superar los mil millones de telespectadores: un escenario apetitoso para cualquier reivindicaci¨®n, incluidas las m¨¢s violentas. Hay antecedentes: la matanza de atletas israel¨ªes por un grupo palestino en M¨²nich en 1972 abri¨® una era de terrorismo internacional.

Ceremonia inaugural

El momento de mayor riesgo es la ceremonia inaugural, que por primera vez tendr¨¢ lugar fuera de un estadio y en un entorno urbano. Los atletas desfilar¨¢n en barcas por el Sena a lo largo de seis kil¨®metros con Notre-Dame, el museo del Louvre y la torre Eiffel como trasfondo.

¡°El riesgo se ha anticipado y se ha medido, y los medios son enormes¡±, dice P¨¦chenard. ¡°Pero el concepto mismo de la ceremonia de apertura, que seguramente ser¨¢ magn¨ªfica en t¨¦rminos est¨¦ticos y art¨ªsticos, provoca algunos sudores fr¨ªos respecto a la seguridad¡±.

¡°Estaremos preparados¡±, prometi¨® Macron en el Centro Acu¨¢tico. ¡°Si la amenaza evolucionase¡±, dijo, ¡°disponemos de escenarios de repliegue¡±. El presidente daba as¨ª a entender que hay un plan b por si algo falla a ¨²ltima hora, o si surgen nuevos riesgos.

Par¨ªs se adaptar¨¢ a la situaci¨®n del momento en funci¨®n de las amenazas y las capacidades para garantizar la seguridad de espectadores y atletas. En realidad, ya lo ha hecho.

Se preve¨ªa inicialmente la presencia de 600.000 personas a orillas del Sena para seguir la ceremonia. Ahora son 300.000. Se lleg¨® a hablar de hacer circular 160 barcos para los atletas; ahora son 94, seg¨²n explic¨® en una audiencia a principios marzo ante el Senado Marc Guillaume, prefecto de la regi¨®n de Par¨ªs.

En la misma sesi¨®n, la directora general de los servicios de seguridad interior, C¨¦line Berthon, constat¨® que ¡°desde hace algo m¨¢s de un a?o¡± crece la amenaza terrorista. Se trata, precis¨®, de ¡°perfiles bastante j¨®venes, con frecuencia muy activos en internet, extremadamente consumidores de contenidos violentos y capaces de pasar al acto r¨¢pidamente con medios rudimentarios¡±.

El Ministerio del Interior est¨¢ verificando la identidad y los antecedentes de las personas involucradas en los Juegos, desde el mill¨®n de voluntarios, incluidos los portadores de la llama ol¨ªmpica, hasta los 20.000 agentes de seguridad privada. Entre los voluntarios se han realizado ya 180.000 controles y 800 personas se han visto apartadas, entre ellas 15 fichados como amenaza potencial. Entre los agentes privados, un millar han sido apartados, entre ellos 102 fichados.

¡°No son solo islamistas radicales que quieran pasar la acci¨®n¡±, dijo el ministro del Interior, G¨¦rald Darmanin, a la cadena LCI. ¡°Tambi¨¦n puede ser gente de la ecolog¨ªa radical que querr¨ªa apagar la llama y poder mostrar al mundo entero su causa¡±.

La movilizaci¨®n de las fuerzas de seguridad tiene pocos precedentes. Habr¨¢ 45.000 polic¨ªas y gendarmes desplegados para la ceremonia inaugural. Todos los asistentes entre el p¨²blico ser¨¢n sometidos a controles.

¡°M¨¢s bien me siento confiado respecto a las fuerzas de seguridad del pa¨ªs¡±, dice Guillaume Farde, profesor en el Instituto de estudios pol¨ªticos y especialista en cuestiones de seguridad. ¡°Lo que observo es que son capaces y que en los ¨²ltimos 15 a?os han afrontado desaf¨ªos dif¨ªciles¡±.

Farde cita la manifestaci¨®n del 11 de enero de 2015, despu¨¦s del atentado contra la revista sat¨ªrica Charlie Hebdo, y tambi¨¦n la Eurocopa, un a?o despu¨¦s. No hubo incidentes.

¡°Ahora en Francia hay voces derrotistas que dicen: ¡®Hay que parar, [la ceremonia] fracasar¨¢, vamos hacia la cat¨¢strofe¡±, dice el experto. ¡°Hay un m¨¦todo para garantizar el riesgo cero, y es no hacer nada. La cuesti¨®n es qu¨¦ parte de riesgo se asume para tener ¨¦xito, porque no hay ¨¦xito sin asumir riesgos. Lo que hay que hacer es evaluarlos constantemente, lo que es el caso actualmente, y reajustar el dispositivo en funci¨®n de la evoluci¨®n de la amenaza, lo que tambi¨¦n es el caso¡±.

El crimin¨®logo Alain Bauer, que hace dos a?os alertaba de que la ceremonia inaugural era en aquel momento ¡°una locura criminal¡±, afirma: ¡°Mucho ha cambiado desde aquella declaraci¨®n, pero el riesgo sigue siendo muy elevado para el p¨²blico, los atletas y, por tanto, la imagen de los Juegos Ol¨ªmpicos. Existen ahora planes de sustituci¨®n y en el Ministerio del Interior y la prefectura de polic¨ªa poco a poco el realismo se impone¡±.

Estanguet, el presidente del comit¨¦ organizador, se?ala que la seguridad est¨¢ en el n¨²cleo del proyecto ol¨ªmpico desde el inicio, y que Par¨ªs y Francia tienen experiencia. Recuerda que la candidatura se anunci¨® tras los atentados de enero de 2015: ¡°Hubo entonces una respuesta pol¨ªtica que consist¨ªa en decir: ¡®Francia seguir¨¢ defendiendo su imagen, su modo de vida; no recularemos¡±.

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