La extrema derecha de Le Pen vence en la primera vuelta de las legislativas de Francia sin asegurarse la mayor¨ªa absoluta

Francia, cuna de una idea de la Europa de los derechos humanos y la Ilustraci¨®n, tiene una semana para decidir si coloca a la extrema derecha euroesc¨¦ptica y nacionalista en el poder, o si frena su ascenso imparable con una coalici¨®n heterog¨¦nea que abarque desde la izquierda radical a la derecha moderada. Esta es la elecci¨®n que afrontan los franceses tras la victoria rotunda, en la primera vuelta de las elecciones legislativas, del Reagrupamiento Nacional (RN) de Marine Le Pen.

Nunca este partido euroesc¨¦ptico y nacionalista hab¨ªa ganado unas legislativas en el pa¨ªs que, junto a Alemania, ha sido el motor de la UE desde su fundaci¨®n. Nunca los lepenistas, relegados durante d¨¦cadas en el rinc¨®n de los apestados ideol¨®gicos, hab¨ªan alcanzado el lugar central que hoy ocupan en esta sociedad.

S¨ª, los partidos de la esfera ideol¨®gica de Le Pen hab¨ªan ganado elecciones y gobernado otras partes de Europa y en Estados Unidos. Pero Francia, donde la extrema derecha ha recorrido desde los a?os ochenta un largo camino hasta su normalizaci¨®n, se resist¨ªa. ?Ya no?

El RN, pese al ¨¦xito excepcional en estas legislativas no tiene nada asegurado. Con un tercio de votos en la primera vuelta, es el favorito para convertirse en la primera fuerza parlamentaria tras la segunda vuelta, el 7 de julio. Pero no est¨¢ claro que disponga de un n¨²mero suficiente de diputados para designar a un primer ministro y formar un Gobierno.

Algunas proyecciones para la segunda vuelta lo sit¨²an a unas decenas de esca?os del umbral de los 289 que marca la mayor¨ªa absoluta; otras m¨¢s cerca. Las alternativas son tres: una mayor¨ªa absoluta del RN; una gran coalici¨®n alternativa de moderados e izquierdistas; o el bloqueo parlamentario y la amenaza de desgobierno.

La izquierda se perfila, tras estas elecciones, como principal bloque frente al RN. Las formaciones ligadas a Macron, dominantes desde 2017 en la Asamblea Nacional, quedan en tercera posici¨®n, pierden todo el poder acumulado estos a?os, y son los mayores damnificados de la decisi¨®n del presidente.

Este lunes se abre en Francia otra campa?a, la de la segunda vuelta, en las que los franceses se enfrentar¨¢n, como quer¨ªa el presidente Emmanuel Macron al convocar hace tres semanas por sorpresa las legislativas, a un ¡°momento de clarificaci¨®n¡±. ?Ha llegado el momento de dejar acceder al Gobierno a este partido, que recoge millones de votos, elecci¨®n tras elecci¨®n, y que ha sabido conectar e interpretar un malestar profundo de la sociedad? ?O el maltrecho frente republicano, la alianza para poner un cord¨®n sanitario ante la extrema derecha, renacer¨¢ para impedir de nuevo que toquen poder?

Todo se decidir¨¢ en los pr¨®ximos cinco d¨ªas de campa?a, un sprint que determinar¨¢ si Francia da un giro, y con ella Europa. Una uni¨®n de los partidos contrarios al RN podr¨ªa frenar las ambiciones de esta formaci¨®n e impedir que Jordan Bardella, mano de derecha de Le Pen y su candidato a primer ministro, encabece el pr¨®ximo Gobierno franc¨¦s.

Estas elecciones, convocadas inesperadamente por Macron y marcadas por la mayor participaci¨®n desde 1981, cercana al 67%, tienen el efecto de un se¨ªsmo en Francia. Por primera vez, gana unas legislativas un partido con ra¨ªces en la ultraderecha xen¨®foba y antisemita, aunque bajo el liderazgo de Marine Le Pen haya mudado de piel y se haya desprendido de sus aristas m¨¢s agresivas.

El RN ha obtenido un 33,1% de votos, seg¨²n los resultados pr¨¢cticamente definitivos divulgados este lunes por el Ministerio del Interior franc¨¦s, casi el doble de su resultado en las legislativas pasadas, hace dos a?os. En segunda posici¨®n ha quedado la coalici¨®n de izquierdas Nuevo Frente Popular, con un 27,9%, algo m¨¢s de dos puntos por encima de los resultados que obtuvo en 2022.

La candidatura macronista Ensemble (Juntos) queda lejos, en tercera posici¨®n, con un 20,8%, cinco puntos menos que las legislativas pasadas. Los Republicanos, el partido de la derecha tradicional hermanado del PP espa?ol, saca un 6,5%.

Macron, en una declaraci¨®n escrita publicada al cierre de los colegios, hizo un llamamiento a ¡°una gran uni¨®n claramente dem¨®crata y republicana¡± ante el RN. L¨ªderes de la izquierda, desde la euroesc¨¦ptica y anticapitalista hasta la europe¨ªsta, llamaron a unirse tras los candidatos que tengan m¨¢s posibilidades de batir a la extrema derecha en la segunda vuelta.

¡°La democracia ha hablado¡±, declar¨® Le Pen. ¡°Ahora necesitamos una mayor¨ªa absoluta para que en ocho d¨ªas Emmanuel Macron nombre primer ministro a Jordan Bardella.¡±

Las legislativas en Francia son en realidad 577 elecciones simult¨¢neas en 577 circunscripciones para elegir 577 diputados. No se clasifican para la segunda vuelta los dos m¨¢s votados en la primera, como en las presidenciales, sino los candidatos que en la primera vuelta superen el 12,5% del total de inscritos en el censo electoral.

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La coalici¨®n de Macron y de la izquierda se comprometen a retirar a sus candidatos en tercera posici¨®n

Participaci¨®n cercana al 70%

La participaci¨®n cercana al 70% implica que habr¨¢ decenas de circunscripciones en las que la segunda vuelta se disputar¨¢ entre tres candidatos. Es lo que se conoce como triangulares.

En la primera vuelta de las anteriores legislativas, la participaci¨®n fue del 47,5%. Entonces solo hubo ocho distritos con triangulares. El 7 de julio podr¨ªa haber casi 300, seg¨²n algunos c¨¢lculos.

Las triangulares dispersan el voto, lo que puede facilitar la elecci¨®n de los candidatos del RN, que parten en cabeza. Pero, si los candidatos menos votados se retiran para concentrar el voto contra la extrema derecha, los de Le Pen lo podr¨ªan tener m¨¢s complicado para lograr una mayor¨ªa absoluta.

De ah¨ª lo significativo de la r¨¢pida declaraci¨®n de Macron, al llamar a un frente contra la extrema derecha. Est¨¢ por ver c¨®mo se va a concretar y a qui¨¦n incluye el concepto de ¡°dem¨®cratas y republicanos¡±.

Algunos macronistas han indicado que retirar¨ªan a sus candidatos si el candidato del Nuevo Frente Popular ante el del RN era socialista, ecologista o incluso comunista. Pero no si pertenec¨ªa a la m¨¢s radical La Francia Insumisa de Jean-Luc M¨¦lenchon, dominante en la coalici¨®n izquierdista.

En las pr¨®ximas horas se ver¨¢ m¨¢s claro si realmente resucita el llamado frente republicano. Tras el ¨¦xito electoral inapelable del partido ultra, en todo caso, la pol¨ªtica francesa ha entrado en una nueva fase.

Todo se ha precipitado en unos d¨ªas. Han sido tres de las semanas m¨¢s intensas de la pol¨ªtica francesa en tiempos recientes, desde que en la noche del 9 de junio Macron anunci¨® por sorpresa la disoluci¨®n de la Asamblea Nacional, donde los partidos que le apoyan eran mayoritarios, y la convocatoria de legislativas anticipadas. La decisi¨®n, en respuesta a la debacle electoral de los macronistas en las europeas y la victoria de la extrema derecha, precipit¨® una reacci¨®n en cadena en los partidos. Los macronistas, desconcertados y en muchos casos irritados con la decisi¨®n de su l¨ªder, se lanzaron a hacer campa?a a la desesperada, y ocultando en los carteles a Macron. La derecha tradicional de Los Republicanos (LR) implosion¨® al marcharse su presidente, ?ric Ciotti, con el RN de Le Pen. La heterog¨¦nea izquierda francesa logr¨® contra todo pron¨®stico un acuerdo para presentar candidaturas ¨²nicas y un programa com¨²n.

En esta campa?a se ha abierto un nuevo cap¨ªtulo de recomposici¨®n del paisaje partidista franc¨¦s, que se inici¨® en 2017 con la irrupci¨®n de Macron. De aqu¨ª sale una Francia con tres bloques: una amplia derecha nacionalista y euroesc¨¦ptica; una izquierda robusta que como m¨ªnimo aspira a ser la principal fuerza de oposici¨®n; y un bloque central disminuido. El macronismo puede haber firmado esta noche su acta de defunci¨®n.

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