?Qui¨¦n ha ganado el debate del 9-J? Los mayores aciertos y errores de cada candidato

Aciertos:

Teresa Ribera despliega estilo. Se muestra firme, sin invadir, agredir ni insultar, pero tampoco se deja avasallar: si la interrump¨ªan, reconven¨ªa la mala educaci¨®n de Dolors Montserrat y el ¡°ejemplo de intransigencia¡± de Jorge Buxad¨¦. La candidata socialista enfatiz¨® con eficacia su mensaje central: el peligro de Europa es perder ¡°el alma¡± por una alianza derecha-ultraderecha. Se declar¨® ¡°orgullosa¡± del Pacto Verde ¡°porque el tiempo no espera¡±; de las renovables y de los bajos precios el¨¦ctricos espa?oles; de los nuevos fondos europeos. Reclam¨® una pol¨ªtica de defensa europea basada ¡°en reglas¡±, en los derechos humanos, con la ONU. Y contrapuso al S¨¢nchez aplaudido en el Parlamento ucranio con el tr¨ªo de las Azores.

Errores:

Es un error dejar preguntas sin respuesta. Tres veces Dolors Montserrat la inquiri¨® sobre si el Gobierno mantendr¨¢ la rebaja del IVA alimentario. Pod¨ªa escoger argumentos para contestar: a¨²n no toca decidir; no es asunto europeo sino interno; hay que elegir alguna ayudas o reducir el d¨¦ficit. El silencio lo rellena el rival. Tambi¨¦n le cost¨® bajar a ejemplos concretos en defensa de sus propuestas. Por ejemplo, sobre la simbiosis derecha-ultraderecha. Para su suerte, desde el PP se record¨® a Vox que ambos han votado juntos erosionando el Pacto Verde: aplazando a 2035 el plazo final del coche de combusti¨®n, en la ley de restauraci¨®n de la naturaleza, en la directiva de pesticidas¡­

XAVIER VIDAL-FOLCH

Aciertos:

Lo mejor, su defensa cerrada de Ucrania. Dolors Montserrat es la favorita al frente de las siglas con mayor intenci¨®n de voto en las europeas y levant¨® la bandera de los lazos de su partido con el coraz¨®n fundacional de la Uni¨®n y sus valores, una verdad ciertamente hist¨®rica, como su apoyo incuestionable a defender e incorporar a Ucrania a la UE. A partir de ah¨ª, la candidata, con muchas horas de vuelo en las contiendas pol¨ªticas, se esforz¨® por subrayar el discurso de la ¡°Europa de las personas¡±, que tradujo en planes para luchar contra el c¨¢ncer, la ELA, la salud mental, la emancipaci¨®n de los j¨®venes, el mundo rural o el abaratamiento de la cesta de la compra. El mensaje ciudadano qued¨® expreso en ciertas propuestas concretas, aunque muchas no tuvieran relaci¨®n con las pol¨ªticas desde Bruselas.

Errores:

Lo peor, el cansino racarraca antisanchista. Sufre el Partido Popular el engorro de librar dos batallas a la vez: de frente, contra Pedro S¨¢nchez; en la retaguardia, contra una ultraderecha que le va mordiendo los tobillos como un chihuahua empecinado que no le deja avanzar. Y eso ha sido palpable en una Dolors Montserrat obligada a mantener la vista puesta en el retrovisor y camuflar sus pactos con Vox y los brazos abiertos a la extrema derecha europea. Por el contrario, y en lugar de centrarse en lo medular, lo europeo, prioriz¨® las hip¨¦rboles que est¨¢n caracterizando al PP de Feij¨®o: S¨¢nchez es Puigdemont, pacta leyes con delincuentes, saca a depredadores sexuales de la c¨¢rcel, regala la amnist¨ªa y esconde la corrupci¨®n. El cansino y simplista racarraca antisanchista con dosis de populismo agrario y fiscal y sin mojarse en la lucha contra el cambio clim¨¢tico.

BERNA GONZ?LEZ HARBOUR

Aciertos:

Adi¨®s a los tiempos en que Vox aparec¨ªa como un partido marginal tanto en las alianzas como en los discursos. Jorge Buxad¨¦ presumi¨® de pertenecer a una familia pol¨ªtica al alza "en toda Europa", con la Italia de Giorgia Meloni como m¨¢xima expresi¨®n, y celebr¨® la centralidad de su agenda durante el debate. "Me alegro de que se oigan los temas de Vox", festej¨® con una sonrisa. Como colof¨®n, se encontr¨® con Dolors Montserrat (PP) inc¨®moda y a la defensiva ante su insistente acusaci¨®n de pactar por sistema con el PSOE en la UE, incluyendo supuestas medidas contra el campo espa?ol.

Errores:

Vox reincide en sus tics de desconsideraci¨®n hacia las mujeres. A Irene Montero (Podemos), Buxad¨¦ la llam¨® dos veces "ministro", una alusi¨®n f¨¢cil de viralizar que sirve como recordatorio del predominio de lo masculino en el liderazgo, el discurso y la pr¨¢ctica del partido. El repertorio del candidato en este campo se limit¨® a presentar a las mujeres como v¨ªctimas indefensas de la amenaza del inmigrante, un cortapega del "feminacionalismo" de Marine Le Pen que en Espa?a a¨²n no ha demostrado la misma capacidad que en Francia para reducir la brecha de g¨¦nero del electorado de extrema derecha.

?NGEL MUN?RRIZ

Aciertos:

Su mayor acierto ha sido ser capaz de diferenciar las posiciones de Sumar de las del PSOE sin da?ar el Gobierno de coalici¨®n e incluso reivindic¨¢ndolo claramente. No era f¨¢cil. Ha dejado claro que defiende una pol¨ªtica tributaria m¨¢s atrevida, especialmente hacia las grandes corporaciones, y una mayor firmeza contra los para¨ªsos fiscales. Pero tambi¨¦n ha puesto en valor las coincidencias en el programa ambiental y en pol¨ªtica exterior, particularmente la posici¨®n sobre Palestina. Ha sido especialmente h¨¢bil su met¨¢fora de que Sumar es el coraz¨®n del Gobierno de coalici¨®n, un ¨®rgano que impregna de valores y sentimiento la pol¨ªtica; y tambi¨¦n su alegato contra las posiciones del candidato de Vox al desearle que su familia no tenga nunca que emigrar y encontrarse enfrente con alguien como ¨¦l.

Errores:

Sus intervenciones han sido en ocasiones atropelladas. En sus intentos de aterrizar el debate en cuestiones europeas y polemizar con la derecha se ha visto en algunos momentos m¨¢s agresiva que firme, y eso le ha restado eficacia expositiva. El lenguaje corporal era vehemente e impositivo, en vivo contraste con la serenidad y ponderaci¨®n de Teresa Ribera, y con el mayor control y claridad discursiva de Irene Montero. Algunas expresiones como ¡°tiene que estudiar un poco m¨¢s¡± han resultado faltonas. Ten¨ªa f¨¢cil la confrontaci¨®n contra el PP y Vox, pero en el debate se dirim¨ªa otro pulso, el que Sumar mantiene con Podemos. La manera en que se han ignorado hablaba m¨¢s que el silencio sobre el mar de fondo que las enfrenta.

MILAGROS P?REZ OLIVA

Aciertos:

Nadie ha defendido con mayor convicci¨®n el argumento pacifista. Pr¨¢cticamente en cada una de sus intervenciones, Irene Montero ha reiterado la misma idea: el primer objetivo de Europa deber¨ªa ser la consecuci¨®n de la paz. Cuando tocaba hablar de valores: ¡°Si no podemos parar el genocidio, ?qu¨¦ es Europa?¡±. Cuando tocaba hablar de econom¨ªa: ¡°El Pacto Verde es una tomadura de pelo¡± en un contexto de econom¨ªa de guerra que implicar¨¢ el aumento del gasto militar y recortes en gasto social. Cuando tocaba hablar de seguridad: ¡°La guerra y la sumisi¨®n a Estados Unidos es la principal amenaza¡±.

Errores:

Aunque ha sido m¨¢s brillante en el contrataque a los candidatos de Vox y Ciudadanos, en especial cuando se ha plantado contra el racismo neofascista de Jorge Buxad¨¦, a la hora de las propuestas Irene Montero no ha logrado concretar ni una sola medida de las que impulsar¨ªa si fuese elegida eurodiputada. Durante una hora y media, m¨¢s all¨¢ de reiterar ideas izquierdistas b¨¢sicas, no supo exponer cu¨¢les ser¨ªan las pol¨ªticas a trav¨¦s de las cuales acabar con las guerras que se desarrollan en las fronteras del continente. Su discurso funcionar¨ªa mejor en las plazas que en el Parlamento. No es extra?o que haya terminado con el cl¨¢sico ¡°s¨ª se puede¡±.

JORDI AMAT

Aciertos:

Jordi Ca?as reivindic¨® que estas elecciones van de Europa, no de Carles Puigdemont o de las peleas entre el Partido Popular y el PSOE. Expuso c¨®mo las pol¨ªticas que se legislan desde la Uni¨®n Europea afectan a los ciudadanos espa?oles, un ejercicio pedag¨®gico para que estos comicios no sean vistos como alejados o et¨¦reos. Por ejemplo, compar¨® las exigencias que se aplican a los agricultores nacionales frente a c¨®mo se fabrican esos mismos productos en otros pa¨ªses ¡ªmenor uso de pesticidas¡ª e, incluso, se?al¨® los retos que todav¨ªa supone para muchos municipios rurales la inversi¨®n en energ¨ªas renovables.

Errores:

Pese a detectar los problemas, Ca?as no despleg¨® una amplia bater¨ªa de medidas para afrontarlos, algo que habr¨ªa definido el discurso de Ciudadanos. Su participaci¨®n en el debate qued¨® diluida entre PP, PSOE y Vox. Puesto que Ca?as defiende ayudar a Ucrania, debi¨® haber rebatido el argumento de Podemos sobre que el gasto militar podr¨ªa ocasionarnos recortes. En realidad, la UE ya hab¨ªa pedido contenci¨®n del d¨¦ficit a los Estados antes de que Espa?a suscribiera su reciente acuerdo de seguridad con Ucrania. La suspensi¨®n de las reglas fiscales se remontaba a la pandemia para permitirnos mayor endeudamiento en gasto social.

ESTEFAN?A MOLINA