La posible alianza con Le Pen pone a la derecha tradicional francesa al borde de la escisi¨®n
El presidente de Los Republicanos promueve un pacto con la extrema derecha para las elecciones legislativas

La derecha moderada de Los Republicanos (LR), muy debilitada tras siete a?os de Emmanuel Macron en el palacio del El¨ªseo, se encuentra al borde de la explosi¨®n. La decisi¨®n de su presidente, ?ric Ciotti, de buscar una alianza con la extrema derecha para las legislativas anticipadas del 30 de junio y el 7 de julio ha desencadenado una rebeli¨®n entre los otros l¨ªderes de (LR), partido hermano en Francia del PP espa?ol.
Ciotti ha anunciado este martes su intenci¨®n de cerrar un pacto entre LR y el Reagrupamiento Nacional (RN) de Marine Le Pen. El l¨ªder de la derecha ha justificado este paso, que har¨ªa saltar por los aires definitivamente d¨¦cadas de cord¨®n sanitario contra la extrema derecha, por el peligro que, en su opini¨®n, representa para Francia tanto una alianza de izquierdas como el bloque centrista del presidente Emmanuel Macron.
¡°Hoy Los Republicanos somos demasiado d¨¦biles para oponernos a dos bloques que son demasiado peligrosos¡±, dijo este martes el presidente de LR en una entrevista con la cadena TF1. ¡°Necesitamos una alianza [con el RN] para seguir siendo nosotros mismos¡±. Con esta alianza, Ciotti pretende garantizar la reelecci¨®n de los 61 diputados actuales de su partido gracias al apoyo del RN; a cambio, LR deber¨ªa apoyar a candidatos del RN en otras circunscripciones para que no compitiesen entre ellos.
LR, partido heredero del RPR y la UMP de los presidentes Jacques Chirac y Nicolas Sarkozy, reclama para s¨ª el legado del gaullismo. El Reagrupamiento Nacional (RN) es heredero de un viejo partido ultra fundado por personas que combatieron a De Gaulle, en ocasiones con violencia, y en algunos casos colaboraron con la Alemania nazi.
¡°Decisi¨®n valiente¡±, seg¨²n Le Pen
En declaraciones a la agencia France Presse, Le Pen celebr¨® ¡°la decisi¨®n valiente¡± de Ciotti y ¡°su sentido de la responsabilidad¡±. A?adi¨® que ¡°40 a?os de pseudo-cord¨®n sanitario, que ha hecho perder muchas elecciones, est¨¢ desapareciendo¡±. Una coalici¨®n con LR, o con lo que quede de este partido, ser¨ªa un paso m¨¢s en el proceso de normalizaci¨®n del Reagrupamiento Nacional.
Le Pen hab¨ªa negociado, en paralelo, con Reconquista, el peque?o partido de su sobrina, Marion Mar¨¦chal, y ?ric Zemmour. Mar¨¦chal anunci¨® que no habr¨ªa acuerdo porque su t¨ªa rechaza asociarse con Zemmour. La radicalidad de este antiguo tertuliano y ensayista socava el esfuerzo de Le Pen por presentar una imagen de moderaci¨®n.
Con la disoluci¨®n de la Asamblea Nacional tras la victoria de Le Pen en las europeas del domingo, y la convocatoria de legislativas tres semanas despu¨¦s, Macron quiere acelerar el proceso de descomposici¨®n del viejo orden pol¨ªtico. Su apuesta es captar para el llamado bloque central a quienes, en la izquierda moderada y en la derecha moderada, son contrarios a los pactos con ambos extremos.

La izquierda, desde la euroesc¨¦ptica de Jean-Luc M¨¦lenchon a la europe¨ªsta del Partido Socialista, acord¨® el lunes negociar un ¡°nuevo frente popular¡± ante la extrema derecha. Pero el martes aparecieron grietas en este acuerdo. Rapha?l Glucksmann, que encabez¨® la lista socialista en las europeas y super¨® a la de los m¨¦lenchonistas, avis¨® de que ¡°la uni¨®n no puede hacer al precio de renunciar a los principios¡±. Entre estos, precis¨®, figura ¡°el apoyo a la construcci¨®n europea¡± y ¡°la ayuda militar a la resistencia ucrania¡±. No ser¨¢ f¨¢cil que la izquierda radical los acepte.
Si LR se escinde entre partidarios y contrarios al acuerdo con la extrema derecha, los disidentes podr¨ªan unirse al macronismo, que ya cuenta en sus filas con destacados exdirigentes de este partido. Uno de ellos es el actual ministro del Interior, G¨¦rald Darmanin, quien no dud¨® en aludir a los pactos de los a?os treinta con Hitler, y declar¨®: ¡°?ric Ciotti firma los acuerdos de M¨²nich y hunde en el deshonor a la familia gaullista al abrazar a Marine Le Pen. ?Verg¨¹enza! ?Franceses, despertemos!¡±.
Otro exrepublicano y hoy macronista, el actual ministro de Econom¨ªa y Finanzas, Bruno Le Maire, exhort¨®, usando otra palabra que alude a la ¨¦poca de la ocupaci¨®n alemana: ¡°Demos un lugar en nuestra mayor¨ªa a todos los cargos electos y militantes de LR que rechazan la colaboraci¨®n¡±.
El anuncio de Ciotti ha sublevado a buena parte de los l¨ªderes de su partido, pues consideran que aliarse con el RN es una traici¨®n a sus principios. Hace 22 a?os, Chirac se negaba a debatir en televisi¨®n con Jean-Marie Le Pen; ahora sus herederos buscan una coalici¨®n con su hija.
Olivier Marleix, jefe del grupo parlamentario en la Asamblea Nacional, reaccion¨®: ¡°?ric Ciotti solo habla por ¨¦l. Debe abandonar la presidencia de Los Republicanos¡±. De los 61 diputados republicanos, 45 rechazan el acuerdo con el RN, seg¨²n un recuento del diario Lib¨¦ration. Se oponen incluso miembros destacados del ala m¨¢s conservadora, como el cabeza de lista en las europeas, Fran?ois-Xavier Bellamy, y el presidente de la regi¨®n Auvernia-R¨®dano-Alpes, Laurent Wauquiez. Otro republicano destacado, el presidente del Senado G¨¦rard Larcher, pidi¨® la dimisi¨®n de Ciotti.
Ciotti, ante las cr¨ªticas de sus correligionarios, defendi¨®: ¡°Existe una enorme distancia entre lo que se escucha en Par¨ªs, las discusiones de los estados mayores [de los partidos] bastante desconectados de la realidad, y la base que me dice en mi ciudad, Niza, o en otros lugares: ¡®Poneos de acuerdo¡¯¡±.
La escisi¨®n de LR, si se produce, culminar¨ªa un proceso de demolici¨®n que empez¨® en 2017, cuando Macron, tras ganar sus primeras elecciones, lanz¨® una opa sobre este partido y se llev¨® a su Gobierno a figuras como Le Maire y Darmanin. Despu¨¦s gobern¨® ocupando el espacio del centroderecha y canibalizando este espacio pol¨ªtico.
En las presidenciales de 2017, el candidato de LR, Fran?ois Fillon, obtuvo un 20% de votos, aunque no se clasific¨® para la segunda vuelta. En las de 2022, la candidata Val¨¦rie P¨¦cresse se derrumb¨® a un 4,8%. Este partido, que durante d¨¦cadas fue hegem¨®nico en Francia junto a los socialistas, forma hoy el cuarto grupo en diputados de la Asamblea Nacional. En las europeas qued¨® quinta posici¨®n con un 7,25%.
Los populares europeos no descartan alianzas con Meloni
Tras la resaca electoral de las europeas y cuando empieza la negociación de los grandes puestos, el Partido Popular Europeo se ha negado a descartar las alianzas con partido de ultraderecha como los Hermanos de Italia, con raíces neofascistas, de Giorgia Meloni, pese a la presión de socialdemócratas y liberales. El acercamiento a los ultras ha generado debate en las filas de los populares, con voces como la de Jean-Claude Juncker, expresidente de la Comisión, que ha advertido contra todo lo que suene a dinamitar el cordón sanitario. Sin embargo, el presidente del PPE, el alemán Manfred Weber, ha insistido este martes en que no se cierran ninguna puerta a pactar con los ultras que consideran aceptables, como los de Meloni.
A la vez, los populares han intensificado los contactos con los verdes, que se han ofrecido a actuar como freno de emergencia a la extrema derecha si se vuelve a priorizar la agenda medioambiental y cuyos votos darían holgura a la tradicional coalición moderada formada por populares, socialdemócratas y liberales. Los europeístas, eso sí, han insistido en que para aliarse con los conservadores, estos tienen que rechazar acercarse a los ultras.
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