La poeta Amanda Gorman recuerda el poder de la palabra en la investidura de Biden

Amanda Gorman ha brindado uno de los momentos m¨¢s poderosos de la investidura del presidente Joe Biden con su texto The Hill We Climb (La colina que subimos, en su traducci¨®n al espa?ol). A los 22 a?os se ha convertido en la poeta m¨¢s joven en declamar en una ceremonia inaugural de un Gobierno. La autora ha recordado la fuerza de la palabra tras cuatro a?os de incendiarias proclamas gritadas a todo pulm¨®n en la era de Donald Trump. Originaria de la vibrante y diversa Los ?ngeles (California), Gorman se convierte en el rostro de una comunidad al que la Administraci¨®n de Biden busca dar voz y esperanza. O en sus palabras: ¡°Crear un pa¨ªs comprometido con todas las culturas, colores y caracteres del hombre¡±.

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Fotogaler¨ªa: La toma de posesi¨®n de Joe Biden, en im¨¢genes

¡°Siempre hay luz si tan solo somos lo suficientemente valientes para verla. Si tan solo fu¨¦ramos suficientemente valientes para serla¡±, cerr¨® Gorman, vestida de un amarillo chillante y una diadema roja que destac¨® en el gris Washington. Su declamaci¨®n arranc¨® un aplauso de quienes la rodeaban en el escenario del Capitolio. La poeta afirm¨® que comenz¨® a escribir el texto minutos despu¨¦s de recibir la llamada de invitaci¨®n del equipo de transici¨®n de Biden. Ley¨® a Winston Churchill para ayudar a comprender la ret¨®rica del poder. A Walt Whitman para inspirarse y al activista abolicionista Frederick Douglas para hablar del pa¨ªs con el que sue?a.

M¨¢s importante fue el horror que la hizo concluirlo. El 6 de enero, despu¨¦s de que miles de simpatizantes de Trump tomaran por asalto el Congreso, pudo poner el punto final. ¡°Fue como si alguien encendiera un bot¨®n en mi cerebro. Lo termin¨¦ ese mismo d¨ªa por la noche¡±, confi¨® Gorman a la CNN.

El poema de Gorman ha cautivado a las audiencias en una ma?ana de formalismos. The Hill We Climb describe con elocuencia el pa¨ªs lleno de oscuridad que hereda Biden y el miedo de millones de estadounidenses ante el ascenso de los movimientos extremistas alentados por Trump. ¡°Cuando llega el d¨ªa nos preguntamos, ?d¨®nde podemos hallar luz en esta sombra que nunca termina?¡±, inici¨® cuestionando Gorman.

Laureada en 2017 con el premio para poetas j¨®venes, Gorman ha llenado su poes¨ªa de valores y de ideales pol¨ªticos como el cambio clim¨¢tico y la desigualdad econ¨®mica. Hace un par de a?os recordaba sus or¨ªgenes: hija de una madre soltera que es maestra de sexto a?o en el barrio de Watts, al sur de la ciudad californiana. ¡°Me ha dotado del valor de la educaci¨®n. No solo para m¨ª sino para los otros... Me sirvi¨® para llevar mi educaci¨®n a otro nivel¡±, afirm¨®.

Habl¨® de justicia y esperanza, dos palabras que fueron repetidas por varios de los oradores, pero ninguno con la potencia de la joven afroamericana. ¡°La democracia puede retrasarse peri¨®dicamente, pero nunca ser¨¢ derrotada permanentemente. En esta verdad, en esta fe en la que confiamos tenemos los ojos puestos en el futuro. La historia tiene los ojos puestos en nosotros. Esta es la era de la justa redenci¨®n¡±, continu¨®. ¡°No regresaremos a lo que fue, sino que nos trasladaremos a lo que ser¨¢ un pa¨ªs magullado, ¨ªntegro, benevolente pero audaz, feroz y libre¡±.

Gorman se une a un pu?ado de poetas que han embellecido con palabras las crudas formas del poder. En 1961 Robert Frost cambi¨® de planes para John F. Kennedy, el primer cat¨®lico que lleg¨® a la Casa Blanca (Biden es el segundo). Frost declam¨® de memoria una obra suya obligado por los fuertes vientos que le impidieron leer del atril el texto que escribi¨® para la ocasi¨®n. La joven californiana tambi¨¦n sigue la estela de Maya Angelou, quien en 1993 declam¨® En el pulso de una ma?ana hace exactamente 27 a?os, durante la investidura de Bill Clinton. Gorman tambi¨¦n ley¨® los textos de Richard Blanco y Elizabeth Alexander de las ceremonias de la era Obama.

A diferencia de quienes la precedieron, Gorman se para ante un pa¨ªs dividido como nunca y fracturado en temas raciales. Eso tambi¨¦n estuvo presente en su obra, que como buena parte de sus textos, abre un camino a la esperanza en el futuro: ¡°De alguna manera hemos resistido y hemos sido testigos de una naci¨®n que no est¨¢ rota, sino simplemente inacabada. Nosotros, los sucesores de un pa¨ªs y una ¨¦poca en la que una flaca chica negra, descendiente de esclavos y criada por una madre soltera, podemos so?ar con convertirnos en presidente solo para encontrarse recitando para uno¡±.

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