Biden apura sus ¨²ltimos dos meses en la Casa Blanca para afianzar algunas de sus pol¨ªticas
El presidente saliente trata de acelerar la ayuda a Ucrania, la concesi¨®n de incentivos a instalaciones de renovables y microprocesadores y cubrir las vacantes judiciales en pleno traspaso de poderes
¡°Tenemos 74 d¨ªas para terminar el mandato, nuestro mandato. Hagamos que cada d¨ªa cuente¡±. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, insisti¨® a su equipo el jueves pasado en que todav¨ªa le quedan cosas por hacer en los ¨²ltimos dos meses largos de su presidencia. La prioridad del equipo de la Casa Blanca es ahora facilitar un mod¨¦lico traspaso de poderes al presidente electo, Donald Trump, al que Biden recibir¨¢ el mi¨¦rcoles en el Despacho Oval. Sin embargo, el dem¨®crata tratar¨¢ tambi¨¦n de afianzar algunas de las pol¨ªticas que ha desarrollado en sus cuatro a?os de mandato. Entre las prioridades, evitar el cierre parcial de la Administraci¨®n con una pr¨®rroga presupuestaria, cubrir las vacantes judiciales, aumentar la ayuda a Ucrania y acelerar la concesi¨®n de incentivos a las energ¨ªas renovables y a la instalaci¨®n de nuevas f¨¢bricas de microprocesadores.
Al retirarse de la carrera de la reelecci¨®n, el presidente ya pas¨® a ser lo que en Estados Unidos se llama un pato cojo, un presidente que pierde poder e influencia por el poco tiempo que le queda en el cargo. Esa condici¨®n se acentu¨® la semana pasada con la elecci¨®n de Trump, que puede destruir parte de su legado. Aun as¨ª, el pato cojo quiere hacer un esprint final.
Biden quiere cubrir en estos dos meses tantas vacantes de jueces federales como sea posible. Son cargos vitalicios y el actual presidente ha tratado de que reflejen la diversidad del pa¨ªs, con muchos nombramientos de mujeres y minor¨ªas. Lleva 261 propuestas en su mandato, de las que 213 han pasado ya el examen del Senado. Sin perder tiempo, el viernes ya propuso a dos mujeres para los juzgados de distritos del sur de Nueva York y de Guam.
El objetivo es tratar de sacar adelante todas las confirmaciones pendientes que sea posible antes de que los dem¨®cratas pierdan a principios de 2025 la mayor¨ªa en el Senado, al iniciarse la nueva legislatura. En la actualidad hay 47 vacantes en los juzgados federales. Las que no se cubran antes de fin de a?o ser¨¢n ya designaciones para Trump, que nombr¨® a 234 jueces federales de orientaci¨®n conservadora en su primer mandato, incluidos tres del Tribunal Supremo.
Trump anunci¨® en campa?a que revertir¨ªa buena parte de las medidas de la Ley de Reducci¨®n de la Inflaci¨®n, que en realidad era un paquete de medidas fiscales, clim¨¢ticas y sobre medicamentos. Los incentivos aprobados en esa ley a la implantaci¨®n de energ¨ªas renovables son los que m¨¢s peligran. Trump apoya indisimuladamente a los combustibles f¨®siles. Considera que el abaratamiento del precio del petr¨®leo puede ayudar a contener la inflaci¨®n. Por eso, Biden tratar¨¢ de adjudicar los incentivos que sea posible. El problema es que la tramitaci¨®n de los mismos es compleja. Es probable que la mayor¨ªa republicana paralice buena parte de los fondos a¨²n no asignados, aunque algunas ayudas a hogares podr¨ªan mantenerse.
Microprocesadores
El presidente electo tambi¨¦n se ha mostrado contrario a las ayudas de la Ley de Chips, con la que Biden ha logrado atraer inversiones multimillonarias para que Estados Unidos fabrique microprocesadores y as¨ª combatir la dependencia del exterior que se puso de manifiesto con la pandemia. El presidente electo cree que la soluci¨®n est¨¢ en los aranceles, no en los incentivos, aunque hayan resultado exitosos.
El Departamento de Comercio ha asignado m¨¢s del 90% de los 39.000 millones de d¨®lares (36.000 millones de euros) en incentivos previstos por esa ley, pero el problema es que solo se ha firmado un convenio vinculante. Empresas como TMSC, Intel, Samsung y Micron necesitan cerrar los flecos pendientes y firmar sus acuerdos en estos dos meses. Si no, corren el riesgo de tener que renegociar las condiciones o, lo que es peor, quedarse sin las ayudas.
El presidente ¡°quiere seguir aplicando esas leyes hist¨®ricas que fue capaz de hacer¡±, indic¨® la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, la semana pasada en una rueda de prensa. El Gobierno federal seguir¨¢ centrado tambi¨¦n en prestar ayuda a las comunidades devastadas por los huracanes Helene y Milton y otros desastres recientes. Jean-Pierre indic¨® que entre las prioridades estar¨¢ evitar un cierre parcial de la Administraci¨®n cuando la actual pr¨®rroga presupuestaria expire el 20 de diciembre. No deber¨ªa ser excesivamente complicado en un contexto de traspaso de poderes. Lo que s¨ª querr¨ªa Biden es que se apruebe la nueva Ley de Autorizaci¨®n de la Defensa Nacional para el a?o fiscal en curso, una de las leyes presupuestarias m¨¢s destacadas.
Una de las frustraciones de Biden es que la fortaleza macroecon¨®mica de Estados Unidos no haya llegado al bolsillo de los votantes. La tasa de paro es baja, la inflaci¨®n est¨¢ controlada, la econom¨ªa crece con fuerza y los salarios est¨¢n ganando poder adquisitivo. Pero como admiti¨® el jueves el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, hacen falta probablemente varios a?os con esas ganancias para que las heridas de la inflaci¨®n m¨¢s alta en cuatro d¨¦cadas se cierren. Es posible que Trump acabe recogiendo los frutos. ¡°El presidente est¨¢ orgulloso de dejar la econom¨ªa m¨¢s fuerte del mundo al presidente electo, y eso es lo que va a heredar¡±, dijo Jean-Pierre la semana pasada.
El propio Biden se refiri¨® a ello el jueves en la Casa Blanca. ¡°Gran parte del trabajo que hemos hecho ya lo est¨¢ notando el pueblo estadounidense. La gran mayor¨ªa se notar¨¢ en los pr¨®ximos 10 a?os. Tenemos una legislaci¨®n que aprobamos que apenas se est¨¢ empezando a aplicar¡±, indic¨®. ¡°Vamos a ver c¨®mo se realizan obras de infraestructura por valor de m¨¢s de un bill¨®n de d¨®lares, que cambiar¨¢n la vida de la gente en zonas rurales y comunidades que est¨¢n en verdaderas dificultades, porque lleva tiempo hacerlas, y mucho m¨¢s que va a llevar. Pero ah¨ª est¨¢¡±, continu¨®. ¡°El camino por delante est¨¢ despejado, suponiendo que lo mantengamos. Hay tanto que podemos hacer y que haremos bas¨¢ndonos en la legislaci¨®n aprobada. Es verdaderamente hist¨®rico¡±, a?adi¨®.
Pol¨ªtica exterior
El presidente saliente no habl¨® de pol¨ªtica exterior en esa intervenci¨®n, pero s¨ª lo hizo despu¨¦s su portavoz. En las guerras de Gaza y L¨ªbano, Washington seguir¨¢ trabajando por lograr un alto el fuego y la liberaci¨®n de los rehenes, pero, obviamente, su capacidad de presi¨®n sobre el primer ministro israel¨ª, Benjam¨ªn Netanyahu, se ha reducido.
En cuanto a Ucrania, el objetivo de Biden es aumentar la ayuda militar en el tiempo que queda, como ya anticip¨® ¨¦l mismo en septiembre con motivo de la visita del presidente ucranio, Volod¨ªmir Zelenski. ¡°En septiembre el presidente habl¨® de aumentar la ayuda a Ucrania¡±, dijo Jean-Pierre. ¡°Eso no va a cambiar. Vamos a aumentar la ayuda a Ucrania. Entendemos lo importante que es asegurarse de que tienen lo que necesitan¡±, a?adi¨®. ¡°Hemos tomado medidas para reforzar las defensas a¨¦reas de Ucrania y mejorar sus capacidades en el campo de batalla. Por tanto, seguimos comprometidos¡±.
Uno de los temores del propio Biden y de los aliados de la OTAN es que Trump trate de presionar a Zelenski con la amenaza de cortarle la asistencia militar para que negocie un acuerdo de paz con Rusia. El presidente electo lleg¨® a decir en campa?a que era capaz de acabar con la guerra incluso antes de tomar posesi¨®n. Con la recepci¨®n de nueva ayuda en el tramo final del mandato de Biden, Zelenski gana como m¨ªnimo tiempo y refuerza su posici¨®n negociadora.
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