M¨¢s all¨¢ de un contagio: estas son las dificultades que enfrentan los ni?os en el aula en tiempos de pandemia

La vuelta al cole tras el confinamiento por la pandemia y la nueva normativa preventiva para evitar contagios en los centros escolares ha creado una situaci¨®n at¨ªpica en las aulas, que ha derivado en que algunos ni?os y j¨®venes acudan a la consulta con ¡°pesadillas y miedo a salir a la calle o a tocar las cosas sin haberse lavado antes las manos. Se han vuelto m¨¢s f¨®bicos y se ven casos de enuresis o hacerse pis en la cama de noche, cuando ya lo ten¨ªan superado. Aunque cada ni?o es distinto y gestiona la situaci¨®n de forma diferente, les afecta el hecho de que en el colegio, uno de los lugares donde m¨¢s se socializa, tengan que mantener las distancias y no puedan jugar con libertad y dar rienda suelta a poder explorar, tocar o experimentar, cuestiones que para los adultos no son tan necesarias, pero s¨ª para los ni?os. En general, se trata de normas que entienden con la cabeza, pero que les cuesta gestionar en su d¨ªa a d¨ªa¡±, comenta Mar¨ªa Jos¨¦ Llad¨®, psicopedagoga del centro de atenci¨®n psicol¨®gica, Acimut Bienestar.

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El acoso escolar no es cosa de ni?os

La capacidad de adaptaci¨®n de los ni?os en tiempos de la covid: una lecci¨®n para adultos

El regreso al cole este a?o escolar est¨¢ resultando complicado tanto para los profesores como para los alumnos. La forma de facilitar la adaptaci¨®n a la situaci¨®n ser¨ªa ¡°evitar poner todo el ¨¦nfasis en las medidas de protecci¨®n externa, hablar muchas horas al d¨ªa sobre el virus y dar tambi¨¦n ¨¦nfasis al hecho de que tenemos un sistema inmunitario que cumple de manera natural muy bien su labor de defender nuestro cuerpo frente a agentes externos nocivos. Conviene transmitir a los ni?os que la situaci¨®n que se ha creado con la pandemia es algo pasajero y que recuperaremos nuestra anterior vida¡±, a?ade Llad¨®.

Respetar la individualidad y necesidades espec¨ªficas de los ni?os en las aulas

Cada ni?o tiene sus propias particularidades. A la hora de que los alumnos se adapten en los colegios con la nueva normativa que implica el uso de mascarillas y el mantenimiento de la distancia de seguridad entre personas, conviene tener en cuenta sus necesidades para garantizar el aprendizaje y el bienestar de ni?os y j¨®venes en el ¨¢mbito escolar. ¡°Conviene hacer ahora m¨¢s hincapi¨¦ que nunca, con las nuevas normas en las aulas por la pandemia, sobre c¨®mo transmitir los conocimientos de forma eficaz, contemplando aspectos como que los ni?os m¨¢s activos, que necesitan m¨¢s el movimiento como canal de aprendizaje, precisan que se les ofrezcan recursos espec¨ªficos, como dejarles un espacio al fondo de la clase para que se muevan, porque as¨ª descargan su energ¨ªa para poder aprender mejor. Otros ni?os son m¨¢s visuales o auditivos y conviene tener en cuenta todas estas peculiaridades, de forma que a un ni?o que aprende mejor a trav¨¦s del o¨ªdo, no conviene ponerle al lado de la puerta, donde hay m¨¢s ruido que le distrae¡±, explica la psicopedagoga Mar¨ªa Jos¨¦ Llad¨®.

La nueva realidad que la pandemia ha creado en los colegios dificulta la socializaci¨®n, el aprendizaje y el respeto de las peculiaridades de cada alumno. ¡°Hay que tener sentido com¨²n y plantearnos si no estamos sobredimensionando las cosas. El ¨ªndice de contagios en ni?os y adolescentes es bajo. ?Hay que tomar precauciones? Claro. Pero, tal vez, nos estamos preocupando en exceso por su salud f¨ªsica y no pensamos en el coste que para ellos pueda tener todo esto a nivel psicol¨®gico, emocional o social. Ya hay ni?os que se marean, vomitan, tienen somnolencia y tambi¨¦n ha habido alg¨²n desmayo¡±, explica Carmen Cabestany, profesora de secundaria y presidenta de la Asociaci¨®n No Al Acoso Escolar (NACE).

Los profesores est¨¢n en primera l¨ªnea para gestionar el d¨ªa a d¨ªa de los ni?os en el colegio con las medidas preventivas por la pandemia. ¡°Las dificultades de los profesores son muchas e importantes. Se nos ha trasladado la responsabilidad de vigilar que no se toquen; que no se abracen; que guarden distancia; que se pongan gel; que lleven la mascarilla y que limpien las mesas. Lo hacemos con la mejor disposici¨®n, pero esto viene a complicar, y mucho, la labor docente. Por otra parte, nosotros mismos damos clases con mascarilla, lo cual dificulta mucho la comunicaci¨®n, porque la voz no llega igual. Lo mismo sucede con los alumnos, a los que es, realmente, dif¨ªcil entender. Lo recomendable en estas circunstancias es que apliquemos el sentido com¨²n y ayudemos a los ni?os a llevar esta situaci¨®n lo mejor posible. Precauciones s¨ª, pero sin alarmismos¡±, concluye la profesora Carmen Cabestany.

Carta de una madre con hijos escolarizados durante la pandemia

El d¨ªa a d¨ªa de los progenitores con hijos que asisten al colegio con la normativa de prevenci¨®n que impone la pandemia ha creado un panorama de incertidumbre, que se refleja en testimonios, como el de RDS, madre de dos ni?os de siete y cinco a?os.

Nosotros vivimos en una zona rural del Noreste de Espa?a, donde no se est¨¢ viviendo la situaci¨®n como en las grandes ciudades. En casa, hemos tenido la suerte de disfrutar de un territorio abierto donde poder movernos libremente, lo que nos ha permitido vivir son paranoias ni estr¨¦s. La situaci¨®n se ha complicado con la vuelta al sistema escolar. Sinceramente, no siento ser nadie para decir lo que est¨¢ bien o mal hecho. Creo que las medidas que se toman son por el bien com¨²n.

Nos ha chocado, tanto a mis hijos como a m¨ª, el nivel de restricci¨®n mental y f¨ªsica. No entendemos c¨®mo, una vez m¨¢s, los peque?os son los grandes olvidados, c¨®mo se les somete a tan grandes normas de seguridad y no se aplican medidas para que puedan estar relajados y respirando sanamente. No entendemos c¨®mo los ni?os menores de seis a?os, que no tienen obligaci¨®n de llevar mascarilla, deben hacerlo en el colegio durante cinco horas seguidas. Los estamos privando de desarrollar su necesidad natural de movimiento; de poder cantar; de poder hablar.

No entendemos c¨®mo se puede tener 20 alumnos en una clase sin permitirles darse la vuelta para hablar con el compa?ero, sin poder jugar en el recreo o hacer educaci¨®n f¨ªsica libremente. Hay maestros con mucho miedo al contacto, as¨ª como padres y profesores que no se atreven a buscar alternativas. A mi parecer, los colegios deber¨ªan de buscar y aplicar muchas m¨¢s opciones que resulten saludables y sean flexibles para gestionar la situaci¨®n.

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