Por qu¨¦ la siesta veraniega es beneficiosa para los ni?os y c¨®mo conseguir que la duerman

La siesta, esa costumbre tan espa?ola de dormir despu¨¦s de comer, quiz¨¢s cobra m¨¢s sentido en verano, para as¨ª preservar la digesti¨®n en reposo durante las horas m¨¢s calurosas. Pero, ?por qu¨¦ es recomendable para los ni?os durante las vacaciones? Esta cabezadita les permite ¡°recuperar fuerza y poder afrontar la tarde con energ¨ªa y buen humor. Esto repercute no solo en su funcionamiento y aprendizaje durante el resto del d¨ªa, sino tambi¨¦n, significativamente, en el momento de tener que conciliar el sue?o por la noche, porque un ni?o cansado est¨¢ irritable, muy activo y le cuesta m¨¢s dormirse¡±, explica Cristina Cordero, neuropediatra experta en trastornos del neurodesarrollo del servicio de Pediatr¨ªa del Hospital Rey Juan Carlos en Madrid. Adem¨¢s, ¡°con el calor, la actividad f¨ªsica intensa, las comidas m¨¢s abundantes o tard¨ªas y los d¨ªas m¨¢s largos, es f¨¢cil que se sienta agotado¡±, a?ade la tambi¨¦n directora del programa de asistencia neuropedi¨¢trica de Neuroym¨¢s, que investiga la calidad del sue?o infantil, del centro m¨¦dico madrile?o.

Los beb¨¦s son los que m¨¢s precisan dormir durante el d¨ªa. ¡°Como normal general, hasta los 18 meses suelen necesitar dos siestas, una por la ma?ana y otra por la tarde. A partir de esa edad y hasta los cuatro o cinco a?os, en general, solo ser¨ªa conveniente la de la tarde, y con m¨¢s edad, ya ninguna¡±, informa la experta. Aunque no todos los ni?os tienen las mismas necesidades, ¡°como norma general, este descanso no debe superar los 90 minutos ni hacerse a horas cercanas al momento de acostarse por la noche, ya que puede influir en la conciliaci¨®n del sue?o y establecerse un c¨ªrculo vicioso de cansancio y necesidad de descansar a deshoras¡±, advierte.

¡°Aunque es bueno que los menores de cinco a?os duerman por la tarde, esto se debe dar siempre y cuando est¨¦n acostumbrados a ello el resto del a?o y en los mayores de esa edad no se debe forzar. Si no la necesitan, no la dormir¨¢n¡±, argumenta la especialista. Eso no quita que se anime a hacer un rato de reposo en esas horas centrales del d¨ªa, en las que el calor es m¨¢s intenso, ¡°con actividades tranquilas y en un lugar fresco, aunque el ni?o no llegue a dormirse¡±, aconseja Cordero.

Ser¨¢n los peque?os quienes marquen la pauta en cuanto a su necesidad de dormir la siesta. ?Qu¨¦ ocurre si son los padres los que fuerzan la retirada de este tiempo de descanso? ¡°Cuando obligamos a un ni?o de entre tres y cinco a?os a retirar la siesta, bien porque las necesidades escolares as¨ª lo exigen o con el objetivo de que duerman m¨¢s horas durante la noche, estamos privando a su cuerpo del descanso que precisa, lo que se traduce en mayor cansancio e irritabilidad durante el d¨ªa, adem¨¢s de un sue?o nocturno de peor calidad, con menos tiempo de sue?o profundo y mayor predisposici¨®n a algunos trastornos como los terrores nocturnos o las pesadillas¡±, a?ade Marta Furones, neuropediatra del Hospital Universitario General de Villalba y coordinadora del grupo de trabajo de sue?o de la Sociedad Espa?ola de Neurolog¨ªa Pedi¨¢trica (SENEP).

Tambi¨¦n est¨¢ la otra cara de la moneda. Seg¨²n esta experta, los padres suelen desear que sus hijos duerman siempre la siesta, pero la realidad es que cuando a partir de los cinco a?os lo siguen haciendo, es posible que haya alg¨²n problema que les est¨¦ impidiendo un descanso nocturno adecuado o insuficiente, por lo que es recomendable que consulten con su pediatra. ¡°Seg¨²n nuestros datos, el 25% de ni?os de dos a?os duerme dos siestas al d¨ªa, el 66%, una y el 8% tiene estos descansos de manera irregular. A los cuatro a?os, el 50% de los ni?os la realiza solo algunos d¨ªas¡±, sostiene Furones.

Siete recomendaciones para una buena siesta infantil

Conviene que el sue?o vespertino de los ni?os se haga de manera adecuada para evitar que interfiera en el descanso nocturno. Eva Arias, neuropediatra del Hospital Cl¨ªnico San Carlos de Madrid y tambi¨¦n coordinadora del grupo de trabajo de sue?o de SENEP, recomienda algunas pautas.

1. Procurar que las siestas tengan una duraci¨®n de menos de dos horas.
2. Evitar que se realicen m¨¢s tarde de las seis de la tarde.
3. Favorecer el descanso en un lugar oscuro o con luz tenue y con temperatura agradable.
4. Mantener un horario regular.
5. Evitar estimulantes como la cafe¨ªna, los alimentos azucarados y el uso de pantallas o dispositivos electr¨®nicos.
6. Dormir siempre en el mismo lugar que por la noche, si las circunstancias lo permiten.
7. A la hora de viajar, una opci¨®n es hacer coincidir la hora de la siesta con el trayecto en coche, ya que muchos ni?os tienden a dormirse en ese momento.

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