Las autoridades mexicanas detienen a El Marro, uno de l¨ªderes criminales m¨¢s buscados

El Gobierno mexicano ha capturado este domingo a Jos¨¦ Antonio Y¨¦pez, alias El Marro, uno de sus principales objetivos criminales. El Marro dirig¨ªa supuestamente el cartel de Santa Rosa de Lima, una organizaci¨®n con base en Guanajuato, se?alada por robar combustible de los ductos de Pemex y otros delitos como la extorsi¨®n o el secuestro. De hecho, las autoridades han informado de que durante la detenci¨®n de El Marro han liberado a una empresaria local, que estaba secuestrada.

El secretario de Seguridad del Gobierno Federal, Alfonso Durazo, ha informado de la captura en varios mensajes de Twitter. ¡°Cubiertas las formalidades jur¨ªdicas¡±, ha escrito, ¡°[El Marro] ser¨¢ trasladado a la prisi¨®n del Altiplano para ponerlo a disposici¨®n del juez federal que dict¨® orden de aprehensi¨®n por delincuencia organizada y robo de combustibles¡±. Durazo no ha explicado d¨®nde detuvieron a El Marro o en qu¨¦ circunstancias, si hubo enfrentamientos o no. En un comunicado escueto, la fiscal¨ªa de Guanajuato ha informado de que adem¨¢s del capo han detenido a otras cinco personas y han decomisado ¡°un arsenal¡±.

Su detenci¨®n pone a prueba a la Fiscal¨ªa General de la Rep¨²blica. Ser¨¢n investigadores de la dependencia los que deban sostener ante el juez las acusaciones de delincuencia organizada y robo de combustible. Desde hace unos a?os, los cambios en el sistema de procuraci¨®n de justicia en M¨¦xico han tra¨ªdo de cabeza a los investigadores, incapaces muchas veces de probar sus acusaciones en el tribunal.

El Marro era uno de los objetivos principales del Gobierno. A finales de junio, un operativo de autoridades estatales y federales en Guanajuato acab¨® con casi 30 detenidos, entre ellos la madre del presunto l¨ªder de la red criminal. Como en otras ocasiones, el cartel de Santa Rosa de Lima respondi¨® generando caos, esta vez en Celaya. Quemaron veh¨ªculos y bloquearon avenidas para evitar la acci¨®n de las fuerzas de seguridad.

Horas despu¨¦s, El Marro subi¨® dos v¨ªdeos a redes sociales, donde aparec¨ªa visiblemente afectado y anunciaba venganza. Pero parece que el Gobierno le segu¨ªa muy de cerca. A mediados de julio, la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretar¨ªa de Hacienda le congel¨® millones de pesos en cuentas bancarias. Y esta madrugada ha ca¨ªdo finalmente ¨¦l, a manos del Ej¨¦rcito y la polic¨ªa y la fiscal¨ªa estatales.

Escurridizo, El Marro hab¨ªa logrado escapar hasta ahora. En marzo del a?o pasado, las autoridades dieron con una de sus propiedades en Guanajuato, una mansi¨®n de dos pisos con piscina, palmeras, un sal¨®n de fiestas, caballerizas y estatuas. El presunto criminal, que manten¨ªa dos tigres en la casa, hab¨ªa construido t¨²neles para escapar en caso de ser necesario, al m¨¢s puro estilo Chapo Guzm¨¢n.

Desde finales del Gobierno de Enrique Pe?a Nieto, Guanajuato es uno de los Estados m¨¢s violentos de M¨¦xico. Si en 2014 y 2015 la regi¨®n registr¨® menos de 1.000 asesinatos, en los a?os siguientes la cifra se dispar¨®. En 2017 se contaron 2.285 asesinatos y en 2018 el n¨²mero aument¨® a 3.517.

Las autoridades federales y estatales han se?alado que el aumento de la violencia en la zona se debe a una disputa entre dos redes criminales. Una es la de El Marro y la otra es el Cartel Jalisco Nueva Generaci¨®n, CJNG. La de El Marro, el Cartel Santa Rosa de Lima, es un grupo local, que debe su nombre a su lugar de origen, una peque?a comunidad en el municipio de Villagr¨¢n. El cartel Jalisco parece sin embargo una red mucho mayor, con presencia en varios Estados del pa¨ªs, en la punta de mira del Gobierno de Estados Unidos por el tr¨¢fico de drogas a aquel pa¨ªs.

Lo cierto es que la violencia en la entidad aument¨® a la par que el robo de combustible. En 2018, la paraestatal Pemex detect¨® 1.547 tomas clandestinas en sus ductos en Guanajuato, agujeros por donde bandas de ladrones sacaban miles de litros de gasolina en pocas horas. En otros estados como Veracruz, Puebla o Hidalgo la situaci¨®n era parecida y el Gobierno mand¨® al Ej¨¦rcito a vigilar los ductos. En algunos puntos de la geograf¨ªa, caso de Guanajuato, los militares acamparon literalmente encima de los tubos para evitar el robo.

Para mediados de 2019, el Ejecutivo, comandado por Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, anunci¨® que la situaci¨®n estaba controlada. Los reportes de tomas clandestinas disminuyeron en Guanajuato y la tasa de asesinatos tambi¨¦n, pero no tanto. El a?o termin¨® con 2.775 homicidios dolosos.

Celebrada desde el Gobierno federal, la detenci¨®n de El Marro contradice el paradigma de seguridad del Ejecutivo. Al menos en teor¨ªa. Desde su llegada a la presidencia, L¨®pez Obrador ha insistido en que no se trata de detener a los capos. Valga como ejemplo el operativo para capturar al hijo del Chapo Guzm¨¢n, Ovidio, el a?o pasado en Sinaloa. Despu¨¦s de que el Ej¨¦rcito lo detuviera en su casa, el Gobierno orden¨® que lo soltaran para evitar represalias del Cartel de Sinaloa. Sin embargo, El Marro ha ca¨ªdo. El siguiente en la lista es el l¨ªder del CJNG, Nemesio Oseguera, alias El Mencho, que se ha convertido tambi¨¦n en uno de los objetivos m¨¢s importantes para el Gobierno de Estados Unidos.