Antonio Sola: ¡°Hemos creado monstruos que han resultado ser una farsa¡±
Para el estratega pol¨ªtico espa?ol, los v¨ªdeos de Lozoya o del hermano de L¨®pez Obrador recibiendo dinero evidencian el fin de una vieja pol¨ªtica
Es f¨¢cil encontrarse con Antonio Sola en cualquier lugar del mundo donde hay unas elecciones. Despu¨¦s de 450 campa?as electorales, Sola, nacido en Terrassa (Espa?a) en 1972, es uno de los consultores electorales m¨¢s prestigiosos. En las ¨²ltimas d¨¦cadas ha asesorado a varios mandatarios africanos, a los republicanos en Estados Unidos, al Partido Popular en Espa?a y, en alg¨²n momento, casi todos los presidentes de Am¨¦rica Latina han pasado por sus manos. En M¨¦xico, trabaj¨® con Felipe Calder¨®n pero lo ha hecho tambi¨¦n en gobernaturas y alcald¨ªas del PRI o de Morena, la formaci¨®n de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador.
Durante el tiempo que dura una campa?a, se convierte en el hombre que habla al o¨ªdo al candidato hasta que lo lleva a la Presidencia. Para Sola, la publicaci¨®n de los videos del exdirector de Pemex Emilio Lozoya que apuntan a Enrique Pe?a Nieto y al principal partido de la oposici¨®n, el PAN, as¨ª como las im¨¢genes del hermano de L¨®pez Obrador recibiendo dinero, evidencian la agon¨ªa de un modelo que ¨¦l mismo ayud¨® a vender, dice en una entrevista telef¨®nica desde Ecuador.
Pregunta. ?C¨®mo ve el papel del grupo de pol¨ªticos tecn¨®cratas que llegaban para modernizar todo y terminaron envueltos en pol¨¦mica?
Respuesta. Para desgracia de M¨¦xico, el sexenio de Pe?a Nieto ha quedado retratado. La gran oportunidad ahora es dar luz a esa nueva generaci¨®n, no de edad sino de comprensi¨®n, que empuje la necesidad de cambiar el sistema pol¨ªtico de nuestros pa¨ªses. Cada d¨ªa se ve de forma m¨¢s evidente que ha fallado la intermediaci¨®n entre el ciudadano y las instituciones. Diputados, presidentes municipales, secretarios, delegados¡ est¨¢n frenando la toma de decisiones. En el mundo actual, para hacer una transferencia en el banco no necesitas al se?or de la ventanilla y para hablar con Dios no necesitas a un cura. Por lo tanto, para hacer pol¨ªtica, ya no vale la intermediaci¨®n pol¨ªtica tal y como est¨¢ concebida.
P. ?Qu¨¦ impacto tiene en los votantes la aparici¨®n de videos como estos? ?Que ya lo sab¨ªamos, que todos son iguales?
R. No podemos acostumbrarnos a la aparici¨®n de videos que ponen rostro a la corrupci¨®n que uno se imagina. Hay que darle toda la importancia, no solo por el desgaste que suponen para el sistema sino porque esconden el comienzo del fin del viejo modelo y el surgimiento de una nueva forma de hacer pol¨ªtica. Pe?a Nieto o L¨®pez Obrador, como Trump o Bolsonaro, son la transici¨®n entre la vieja pol¨ªtica que se extingue y un nuevo modelo.
P. Usted ha contribuido a hacer presidentes a personas que luego no resultaron lo que promet¨ªan.
R. Hemos creado monstruos de la imagen que terminaron por no responder a la identidad de s¨ª mismos ni de las personas que los votaron. Durante a?os, desde la industria del marketing hemos creado productos basados en la imagen y eso, hoy, es una farsa comunicativa que est¨¢ agotada. Fue ¨²til y sirvi¨® durante a?os para la industria del marketing pol¨ªtico pero hoy es necesario construir una identidad, lo que durante muchos a?os se olvid¨®.
P. ?Lo dice porque se ha hecho mayor o porque ha cambiado el mundo?
R. He cambiado yo pero tambi¨¦n est¨¢ cambiando el mundo que nos rodea. Hoy los pol¨ªticos no se dirigen a un pueblo sino a un p¨²blico, y eso implica apoyarse m¨¢s en la tecnolog¨ªa. Tampoco es suficiente con la inteligencia de un candidato o el hiperliderazgo individual, sino que es necesario apoyarse en lo colectivo. Y, tercero, quien aspira a convencer no puede apelar al ¡®voto popular¡¯ sino al ¡®voto cerebral¡¯. Esas tres cosas condenan a la vieja pol¨ªtica, que se apoya en intermediarios, a su muerte en los pr¨®ximos 20 a?os.
P. ?Es posible ver en lo que se convertir¨¢n despu¨¦s? Pienso en Otto P¨¦rez Molina, expresidente de Guatemala, por ejemplo.
R. Algunas veces se intuye. Los l¨ªderes que llegan al poder lo hacen con su carga de virtudes y de defectos. Los defectos se disimulan durante la campa?a pero una vez en el poder no suele haber control de las bajas pasiones y los aspectos m¨¢s negativos se hacen gigantescos.
P. Todo empieza desde la campa?a.
R. La pol¨ªtica est¨¢ financiada por el mundo de la empresa en cualquier pa¨ªs. El problema es no transparentar todo eso. Detallar cada d¨®lar y definir su origen y cantidad. Porque el poder financiero o las constructoras van a tratan de influir siempre y una buena soluci¨®n es hacer todo eso de forma clara y p¨²blica. Terminar con la corrupci¨®n es imposible en el momento en que aparece el ser humano, pero se trata de meter sus vicios en un margen de tolerancia admitido por una comunidad. Si en una comunidad tienes el alcoholismo o la droga fuera de los l¨ªmites de tolerancia, es que tienes un problema. El modelo estadounidense de financiaci¨®n de campa?as no es el mejor pero es el menos malo.
P. ?Qui¨¦nes son la intermediaci¨®n?
R. La intermediaci¨®n es el pol¨ªtico, la figura que act¨²a entre el voto y la ley. En Espa?a, por ejemplo, el presidente Pedro S¨¢nchez aval¨® durante el confinamiento que las familias pudieran ir con ni?os al supermercado, uno de los lugares con mayor posibilidad de contagio. Despu¨¦s de la presi¨®n social que se gener¨® en las redes, termin¨® dando marcha atr¨¢s. Pod¨ªa haber evitado eso con una consulta digital. Es la pol¨ªtica del refer¨¦ndum llevada al extremo. L¨®pez Obrador, un tipo inteligente, ha propuesto algo parecido con las ¡®consultas ciudadanas¡¯, pero orientado a la manipulaci¨®n.
P. ?C¨®mo ser¨¢ ese nuevo modelo?
R. En los pr¨®ximos 20 a?os van a pasar varias cosas. La democracia actual va a mutar a una democracia digital m¨¢s directa. Se acent¨²a una nueva relaci¨®n entre pa¨ªses porque nadie puede solo. Cada d¨ªa los m¨¢rgenes financieros son menores y se comparte m¨¢s tecnolog¨ªa a coste cero. Estoy convencido que surgir¨¢ una econom¨ªa m¨¢s solidaria y colaborativa. Los protagonistas de este nuevo modelo son una generaci¨®n que hoy tiene entre 0 y 15 a?os, que ha incorporado un cuarto nivel cerebral, donde la tecnolog¨ªa es 100% parte de sus vidas y que incorpora una visi¨®n global que entiende el planeta como algo propio m¨¢s importante que su pa¨ªs. Paralelamente vamos a ver la supremac¨ªa del liderazgo femenino. Cada d¨ªa habr¨¢ m¨¢s mujeres gobernando porque las sociedades demandan valores que est¨¢n asociados a lo femenino. El recambio pol¨ªtico en los pr¨®ximos a?os ser¨¢ el surgimiento de liderazgos resilientes.
P. Usted habla de una nueva democracia m¨¢s tecnol¨®gica, pero ni siquiera la urna digital ha sido capaz de prosperar
R. Es la misma raz¨®n por la que no prosperan a la velocidad que deber¨ªan los coches el¨¦ctricos o por la que seguimos abusando del petr¨®leo. ?Por qu¨¦ la clase pol¨ªtica no impulsa la urna electr¨®nica? Porque se cubren entre ellos. No es normal que para votar en el extranjero se tenga que recibir la papeleta electoral y despu¨¦s acudir a una embajada. Se trata de algo que puedo hacer con un celular. No hay voluntad pol¨ªtica de impulsar estos cambios.
P. La lucha contra la corrupci¨®n requiere de una justicia que est¨¦ a la altura.
R. La justicia est¨¢ comprada en la mayor¨ªa de nuestros pa¨ªses, est¨¦n desarrollados o no. Est¨¢ mediatizada y es la asignatura pendiente.
P. ?C¨®mo es posible que una sola empresa como Odebrecht haya comprado 11 Gobiernos y m¨¢s de 1.000 funcionarios en Am¨¦rica Latina. ?Es la United Fruit Company del siglo XXI?
R. Hay un problema de ra¨ªz en los valores y en la educaci¨®n que recibimos. No podemos seguir recibiendo el mismo modelo en el que fueron educados nuestros padres y nuestros abuelos. No se trata de memorizar los r¨ªos, las capitales del mundo o de aprender a hacer ra¨ªces cuadradas. Nadie ense?a en las escuelas a manejar el poder o la relaci¨®n con lo p¨²blico. O c¨®mo ejercer la solidaridad.
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