EE UU pone otra vez bajo la lupa los nexos de las autoridades mexicanas con el narcotr¨¢fico
El arresto del general Cienfuegos se suma a nombres como Genaro Garc¨ªa Luna y otros funcionarios llevados ante la justicia a 3.000 kil¨®metros de la frontera
La justicia de Estados Unidos ha incluido a otra figura clave de la guerra de M¨¦xico contra el narcotr¨¢fico en su lista de pendientes. La detenci¨®n del general Salvador Cienfuegos, secretario de Defensa en la Administraci¨®n de Enrique Pe?a Nieto (2012-2018), es el ¨²ltimo golpe a un mando gubernamental de alto perfil y ha vuelto a poner en la mira las sospechas de los v¨ªnculos que las autoridades mexicanas han tenido con grupos criminales. El nombre de Cienfuegos se suma al de Genaro Garc¨ªa Luna, zar antidroga del expresidente Felipe Calder¨®n (2006-2012), y los de dos de sus subalternos: Luis C¨¢rdenas Palomino y Ram¨®n Peque?o. Mientras los esc¨¢ndalos se multiplican en el pa¨ªs, los acusados no responden en los tribunales mexicanos, sino en la Corte del Distrito Este de Nueva York, a 3.000 kil¨®metros de la frontera.
¡°Es un asunto grave, sin duda, porque la acusaci¨®n, de probarse, va a significar que no hab¨ªa un Gobierno independiente, sino que hab¨ªa, si no un narco-Estado, un narco-Gobierno, eso es grav¨ªsimo¡±, declar¨® L¨®pez Obrador el pasado 23 de septiembre en su conferencia matutina. El presidente de M¨¦xico ha capitalizado el juicio a Garc¨ªa Luna, quien se declar¨® inocente la semana pasada, como un arma pol¨ªtica contra Calder¨®n, su principal antagonista. ¡°Son instituciones fundamentales para el desarrollo de nuestro pa¨ªs, pilares del Estado y son tan fuertes que ni asuntos como la involucraci¨®n de un secretario de Defensa en casos de narcotr¨¢fico los debilitan¡±, ha dicho este viernes sobre la captura de Cienfuegos y ha aprovechado para defender la consulta popular sobre enjuiciar o no a sus cinco predecesores: ¡°No podemos seguir con un r¨¦gimen corrupto, imag¨ªnense la verg¨¹enza de que se detenga al que fue jefe de la Polic¨ªa con Calder¨®n y ahora al secretario de Defensa del pasado Gobierno¡±.
Los ¨²ltimos casos demuestran que los esc¨¢ndalos pol¨ªticos se cocinan en M¨¦xico y el trabajo judicial se concreta en Estados Unidos. La Corte Este de Nueva York no solo ha sentado en el banquillo de los acusados a Garc¨ªa Luna, tambi¨¦n sentenci¨® a Joaqu¨ªn El Chapo Guzm¨¢n. Fue en el juicio contra el l¨ªder del cartel de Sinaloa que los primeros detalles escabrosos sobre los sobornos, los pactos para hacer la vista gorda y el tr¨¢fico consentido de drogas sacudieron M¨¦xico.
Las revelaciones, sin embargo, no quedaron en an¨¦cdotas. Se baraja que varios testigos clave en el juicio de El Chapo vuelvan a colaborar para poner tras las rejas al exsecretario de Seguridad de Calder¨®n, en un juicio que amenaza con salpicar al exmandatario. El hermano de Ismael El Mayo Zambada, Jes¨²s El Rey Zambada, socio de Guzm¨¢n en Sinaloa, declar¨® que la organizaci¨®n le hab¨ªa pagado millones de d¨®lares.
El expresidente se deslind¨® al asegurar que no ten¨ªa conocimiento de los cr¨ªmenes por los que se acusaba a uno de sus hombres de m¨¢xima confianza. Adem¨¢s, las pesquisas arrojaron los nombres de C¨¢rdenas Palomino y Peque?o, que han ocupado posiciones de poder en pr¨¢cticamente todas las oficinas de seguridad federales, sobre todo durante los Gobiernos del conservador Partido Acci¨®n Nacional, primero con Vicente Fox (2000-2006) y luego con Calder¨®n.
El caso de Cienfuegos sienta un precedente, incluso, m¨¢s grave. M¨¦xico no recuerda a otro militar de un rango similar enjuiciado en Estados Unidos. Se trata del golpe m¨¢s importante al Ej¨¦rcito mexicano desde la detenci¨®n de Jes¨²s Guti¨¦rrez Rebollo en 1997, considerado el zar antidrogas del Gobierno de Ernesto Zedillo (1994-2000), condenado en 2007 a 40 a?os de prisi¨®n por v¨ªnculos con el crimen organizado. Rebollo fue se?alado por proteger al cartel de Ju¨¢rez, pionero en el tr¨¢fico de drogas a Estados Unidos y uno de los grupos criminales m¨¢s poderosos en los a?os ochenta y noventa.
Las acusaciones por narcotr¨¢fico han alcanzado ahora a Cienfuegos, detenido a petici¨®n de la DEA. Las sospechas de pactos y grupos criminales protegidos ya hab¨ªan estado presentes en los casi 15 a?os de guerra contra el narcotr¨¢fico, pero la imagen de que algunos actores eran intocables tambi¨¦n. EE UU, que detuvo por sorpresa a Cienfuegos en un aeropuerto seg¨²n las primeras versiones, espera que esa fotograf¨ªa se haga a?icos.
¡°Siempre hubo sospechas de corrupci¨®n, pero nada a lo que pudi¨¦ramos hincarle el diente. Era un poco ins¨®lito porque M¨¦xico siempre ha puesto a los militares en un pedestal¡±, ha declarado Mike Vigil, antiguo jefe de operaciones internacionales de la agencia antidrogas, a Associated Press. Ese pedestal ha crecido durante el Gobierno de L¨®pez Obrador, que ha aumentado el poder del ej¨¦rcito con concesiones y protagonismo en tareas como la construcci¨®n de un nuevo aeropuerto en Santa Luc¨ªa, a las afueras de Ciudad de M¨¦xico, y la conformaci¨®n de la Guardia Nacional, de corte castrense.
Esta misma semana una investigaci¨®n revel¨® que mientras el bloque gobernante decretaba la extinci¨®n de 109 fideicomisos, el Gobierno realiz¨® un incremento hist¨®rico a los fondos militares a trav¨¦s de otros cuatro fideicomisos. ¡°Reconozco en ¨¦l su lealtad a la patria. Agradezco la colaboraci¨®n del general secretario Salvador Cienfuegos¡±, escribi¨® L¨®pez Obrador en Twitter tras anunciar la designaci¨®n como nuevo secretario de Defensa de Luis Crescencio Sandoval, quien hab¨ªa sido ascendido en 2017 como comandante de la cuarta regi¨®n militar por Cienfuegos.
De conformidad con la Constituci¨®n y las leyes, he decidido invitar al Gral. Luis C. Sandoval para ser secretario de la Defensa Nacional. https://t.co/9owsx9yoo9
— Andr¨¦s Manuel (@lopezobrador_) October 22, 2018
Reconozco en ¨¦l su lealtad a la patria. Agradezco la colaboraci¨®n del actual Gral. secretario Salvador Cienfuegos.
En poco m¨¢s de dos d¨¦cadas, 12 generales mexicanos han sido detenidos, casi todos por sospechas de v¨ªnculos con el narcotr¨¢fico y corrupci¨®n, seg¨²n adelant¨® el semanario Zeta. Vigil, por ejemplo, asegur¨® que ya hab¨ªa o¨ªdo rumores desde 2012 sobre Cienfuegos. La desconfianza de la Casa Blanca hacia varias corporaciones mexicanas es un hecho patente, una criba que apenas logra superar la Marina, y que ha sido retratada, incluso, en varias series y pel¨ªculas sobre narcotraficantes mexicanos. Durante el llamado Culiacanazo, el operativo fallido para detener el a?o pasado a Ovidio Guzm¨¢n, hijo de El Chapo, revivi¨® la discusi¨®n sobre las filtraciones que el ej¨¦rcito hace a los carteles, una acusaci¨®n que no ha sido demostrada en los tribunales mexicanos, pero que puede tener nuevas revelaciones en EE UU.
No es un problema solo de la milicia. Por los corredores de los tribunales estadounidenses han pasado exgobernadores, narcotraficantes, empresarios, exfiscales y l¨ªderes de sectas que se hab¨ªan escondido en M¨¦xico. La fragilidad del sistema judicial del pa¨ªs, donde la probabilidad de que un delito se resuelva ronda solo el 1%, seg¨²n la organizaci¨®n Impunidad Cero, ahonda la brecha de la impunidad y de la falta de confianza de los denunciantes en las instituciones.
En el juego de las delaciones a cambio de sentencias reducidas, la inc¨®gnita es la cadena de traiciones que llevaron a la captura del exsecretario de Defensa y los indicios que tienen los agentes de EE UU para llevarlo a la justicia, sobre todo al tratarse de una figura en la primera l¨ªnea del escalaf¨®n militar. Al sur de la frontera, la mira est¨¢ puesta en las elecciones de 2021, un plebiscito masivo en torno a la figura presidencial, y en un Gobierno que ha optado por facilitar el trabajo de sus hom¨®logos estadounidenses. ¡°Hay una colaboraci¨®n estrecha del Departamento de Justicia y otras agencias con la Fiscal¨ªa General de la Rep¨²blica¡±, dijo L¨®pez Obrador la semana pasada sobre el caso Garc¨ªa Luna.
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