M¨¦xico condena a 80 a?os de c¨¢rcel a dos miembros de la banda que secuestr¨® y asesin¨® a Mar¨ªa Villar

La Justicia mexicana ha condenado esta semana a 80 a?os de c¨¢rcel a dos miembros de la banda de secuestradores que rapt¨®, tortur¨® y asesin¨® a Mar¨ªa Villar hace cuatro a?os. La ejecutiva espa?ola, que en ese momento ten¨ªa 39 a?os, era sobrina del expresidente de la Federaci¨®n Espa?ola de F¨²tbol, Miguel ?ngel Villar, y su caso conmocion¨® a la comunidad espa?ola residente en M¨¦xico pero tambi¨¦n a Espa?a, que observaba at¨®nita hacia un pa¨ªs y una capital que parec¨ªa haberse sacudido la tragedia de los secuestros diarios de los noventa. M¨¦xico para muchos fuera de sus fronteras se convirti¨® de nuevo en el centro del horror de la violencia.

Esta semana, cuatro a?os despu¨¦s de lo sucedido, un tribunal federal fall¨® con una de las penas m¨¢s altas de prisi¨®n por secuestro agravado, relacionado con la delincuencia organizada, contra ?scar Sa¨²l Rold¨¢n Rodr¨ªguez ¡ªquien retir¨® dinero de la cuenta de la v¨ªctima y realiz¨® llamadas de negociaci¨®n¡ª, y de Mois¨¦s Esta?¨®n N¨¢jera, quien manej¨® el veh¨ªculo en que privaron de la libertad a v¨ªctima. Los dos criminales fueron detenidos poco despu¨¦s de la aparici¨®n del cuerpo, tras el esc¨¢ndalo internacional que hab¨ªa provocado su secuestro. ¡°Esta sentencia significa dar un paso m¨¢s en la b¨²squeda de justicia¡±, declar¨® a la agencia Efe su viudo el brasile?o Cristiano do Vale, que asisti¨® como testigo en el juicio con el resto de la familia siguiendo la audiencia desde Espa?a, por las restricciones de viaje que impone la pandemia.

Do Vale lament¨® la tardanza del proceso judicial y los obst¨¢culos que afront¨® para encontrar justicia. Aunque en M¨¦xico, esta sentencia despu¨¦s de cuatro a?os es casi un hito. La impunidad roza el 90% de los casos, seg¨²n cifras oficiales, y las c¨¢rceles est¨¢n llenas de presos que cumplen prisiones preventivas sin sentencia condenatoria por d¨¦cadas. ¡°Durante este camino fueron muchos mexicanos, muchos extranjeros, que me dec¨ªan que lo dejara, que desistiera, que eso no iba a ir a alg¨²n lado¡±, relat¨®. ¡°Hoy la verdad que me llena de satisfacci¨®n ver que, a pesar de todo lo que se dice del pa¨ªs, del cual nos enamoramos y elegimos para vivir hace unos a?os, tiene un sistema judicial en el cual conf¨ªo¡±, a?adi¨® a la agencia espa?ola Do Vale.

De acuerdo con la reconstrucci¨®n policial del secuestro, la ejecutiva espa?ola de IBM sali¨® el 13 de septiembre de 2016 a las nueve y veinte de la noche de un centro comercial en Santa Fe, una zona de negocios a las afueras de Ciudad de M¨¦xico, y abord¨® un taxi trampa de camino a su casa. El coche simulaba formar parte de una parada de taxis. Villar, residente en la capital mexicana desde hac¨ªa tres a?os, lleg¨® a llamar a su marido para decirle que iba de camino a su vivienda, en el adinerado barrio de Polanco, pero en cuanto colg¨® se abri¨® una puerta del taxi y por ella entr¨® la pesadilla que acabar¨ªa en el peor de los finales posibles.

Un compinche del conductor subi¨® y Villar, al darse cuenta de que la estaban raptando, forceje¨® con ¨¦l para intentar escapar. No pudo ir m¨¢s all¨¢ del manoteo porque de inmediato la inmovilizaron con descargas de un aparato el¨¦ctrico y una vez la ten¨ªan desnortada le pusieron unas esposas. A partir de ah¨ª condujeron hacia fuera de la ciudad, en direcci¨®n al Estado de M¨¦xico, e hicieron una parada en un cajero para empezar a vaciar sus tarjetas.

Villar fue escondida en una casa de seguridad y al d¨ªa siguiente los secuestradores contactaron con su familia para pedir rescate. Apoyados por especialistas en negociaciones de liberaci¨®n, su marido, el brasile?o Cristiano do Vale, y su primo Gorka Villar llegaron a un acuerdo para hacer un pago que realizaron en un barrio humilde de Ciudad de M¨¦xico. La familia, en algunas entrevistas con medios espa?oles declar¨® entonces haber pagado ¨ªntegro el rescate que se les pidi¨®: 90.000 euros, unos dos millones de pesos. Antes y despu¨¦s del pago los delincuentes dieron pruebas de que Mar¨ªa Villar estaba viva.

A partir de ah¨ª se detect¨® un nuevo retiro de dinero en un cajero y nada m¨¢s. Los criminales dejaron de comunicarse con la familia y la polic¨ªa no logr¨® recuperar contacto con ellos. Un d¨ªa despu¨¦s, 15 de septiembre, dos despu¨¦s del secuestro, se hall¨® el cad¨¢ver de Villar. La hab¨ªan maniatado y ten¨ªa la cabeza cubierta con una bolsa. Su cuerpo hab¨ªa sido arrojado junto a un arroyo.

La conmoci¨®n espa?ola por el crimen alcanz¨® al aparato judicial espa?ol. Y unos d¨ªas despu¨¦s de lo sucedido, un fiscal jefe de la Audiencia Nacional, ¨®rgano dedicado a la instrucci¨®n de delitos mayores como los de crimen organizado o narcotrafico, abri¨® una investigaci¨®n sobre el secuestro y muerte de la expatriada espa?ola a manos de sus captores. La Audiencia solicit¨® informaci¨®n a la Fiscal¨ªa mexicana, que aceler¨® sus pesquisas como no suced¨ªa con otros cr¨ªmenes nacionales y detuvo a los dos sospechosos que a partir de ahora, si un amparo a su favor no lo impide, pasar¨¢n el resto de sus d¨ªas en prisi¨®n y el crimen de Villar habr¨¢ encontrado un hueco en la justicia mexicana.