La digitalizaci¨®n de los archivos de la Fonoteca Nacional, en riesgo por los recortes presupuestales y la pandemia
Miles de archivos de la tambi¨¦n llamada Casa de los Sonidos de M¨¦xico est¨¢n en peligro ante la lenta digitalizaci¨®n de los formatos, los recortes presupuestales y la precarizaci¨®n de los trabajadores
El patrimonio sonoro de M¨¦xico est¨¢ en riesgo. Miles de documentos sonoros de la Fonoteca Nacional como las grabaciones originales de la m¨²sica compuesta para el cine mexicano, un amplio acervo de m¨²sica tradicional o hist¨®ricas series radiof¨®nicas corren un serio peligro de extinci¨®n. No solo porque las grabaciones est¨¢n conservadas en obsoletas cintas magn¨¦ticas, sino porque los recortes presupuestales y la recontrataci¨®n del personal, con la mitad del sueldo y a la mitad de la capacidad, amenazan con menguar los proyectos de la instituci¨®n encargada de la investigaci¨®n, el registro, la conservaci¨®n y difusi¨®n del patrimonio sonoro del pa¨ªs.
El acervo de la Fonoteca consta de 238 fondos y colecciones que contienen 579.000 documentos sonoros. Algo m¨¢s de 300.000, m¨¢s de la mitad del total, son cintas de carrete abierto, casetes y otros formatos anal¨®gicos seg¨²n datos de la encuesta elaborada por la ONU y la Asociaci¨®n Internacional de Archivos Sonoros y Audiovisuales (IASA, por sus siglas en ingl¨¦s). La Unesco lanz¨®, a mediados de 2019, una alerta mundial sobre la urgencia de digitalizar la diversidad cultural y ling¨¹¨ªstica de la humanidad grabada en cintas magn¨¦ticas ¡ª unos de los soportes m¨¢s fr¨¢giles, que las condiciones clim¨¢ticas y el tiempo vulneran con mayor facilidad ¡ª. De acuerdo con los trabajadores de la Fonoteca y el propio director de la instituci¨®n, desde hace un a?o, por la pandemia del coronavirus, no se digitalizan estas cintas. Y es muy probable que el ritmo de transferencia a archivos digitales disminuya en los pr¨®ximos meses.
¡°Tenemos una capacidad limitada de digitalizaci¨®n¡±, admite P¨¢vel Granados Chaparro, director de la Fonoteca Nacional, en entrevista con EL PA?S. ¡°Cuando llegamos en 2018 nos preguntaron que cu¨¢nto tiempo nos iba a costar poder digitalizar esos sonidos. Necesitar¨ªamos unos 80 a?os contando con que no crezca m¨¢s el acervo. Necesitamos apurarnos, pues por ahora no se har¨¢ digitalizaci¨®n. Y no sabemos hasta cu¨¢ndo¡±. La Unesco advierte de la progresiva desaparici¨®n de los equipos de reproducci¨®n anal¨®gicos, que calcula que sea definitiva para 2025. ¡°La ¨²nica forma de preservar estos sonidos e im¨¢genes a largo plazo y mantenerlos accesibles para las generaciones futuras, es su digitalizaci¨®n y transferencia a repositorios digitales seguros¡±, advierte el organismo para la Educaci¨®n, la Ciencia y la Cultura.
Desde su fundaci¨®n, en diciembre de 2008, la Fonoteca corr¨ªa ya una carrera contra el tiempo, no solo para conservar los archivos sonoros que ya guarda en sus b¨®vedas, sino para rescatar materiales de colecciones particulares o p¨²blicas, que est¨¢n fuera del acervo, desperdigados o guardados en bodegas sin las condiciones ¨®ptimas para su conservaci¨®n, a lo que se suma la creciente escasez en el mercado de equipos para la reproducci¨®n de soportes magn¨¦ticos y anal¨®gicos (cintas y discos), cilindros de cera, hilos magn¨¦ticos y rollos de pianola.
Ahora se enfrenta, adem¨¢s, a recortes presupuestales y de recursos humanos, su ¨²ltimo infortunio. Tras numerosas negociaciones, los trabajadores aut¨®nomos de Fonoteca 3000 ¡ª contratados por honorarios ¡ª frenaron el despido de m¨¢s del 70% del personal, pero con sueldos recortados hasta en un 50% y menor plazo de contrataci¨®n. Los colaboradores del colectivo firmaron bajo protesta a principios de febrero la oferta de la Secretar¨ªa de Cultura con menor remuneraci¨®n y por un periodo de tiempo m¨¢s corto (de un a?o a nueve meses). Los trabajadores justifican el acuerdo en el importante ¡°compromiso con la Fonoteca Nacional y con los coleccionistas¡± y tambi¨¦n porque ¡°la alternativa de conseguir empleo es pr¨¢cticamente nula¡±. En diciembre pasado ya hab¨ªa denunciado en una carta p¨²blica un recorte en el presupuesto de un 80%, lo que imposibilitaba la contrataci¨®n de colaboradores adscritos al Cap¨ªtulo 3000, un colectivo de trabajadores especialmente afectado por los ajustes en los presupuestos culturales.
Los recortes en la instituci¨®n cultural no son nuevos. En los ¨²ltimos cinco a?os ha sufrido una rebaja del 50%. Seg¨²n datos del Presupuesto de Egresos, en la Fonoteca Nacional el presupuesto cay¨® de los cerca de 16 millones de pesos -unos 763.700 d¨®lares- en 2017 hasta los 8 millones -unos 384.000 d¨®lares- en 2021. Aunque la Secretar¨ªa de Cultura inform¨® a este diario que el presupuesto ejercido fue mucho mayor al que dicen las cifras oficiales, al menos en 2019 dicen que fue de 23.886.923 millones de pesos y de 20.449. 736, en 2020. La amenaza del despido o ¡°no recontrataci¨®n¡± de tres cuartas partes del personal, anunciada a los colaboradores el 23 de diciembre de 2020, supon¨ªa, seg¨²n los afectados, la entrada en coma de la Casa de Sonidos de M¨¦xico.
La rebaja de los salarios aceptada para evitar los despidos supone una reducci¨®n de sus salarios de entre un 30% y un 50%. Los sueldos pasaron de entre 8.000 y 20.000 pesos, a entre 6.000 y 15.000 pesos, seg¨²n los propios trabajadores entrevistados por este diario. En los ¨²ltimos meses se han recabado m¨¢s de 500 firmas en apoyo a los trabajadores, donde destacan personalidades en el ¨¢mbito acad¨¦mico y cultural. Entre otros, la fot¨®grafa Graciela Iturbide; Eugenia Revueltas, hija de Silvestre Revueltas; Tre Berney, presidente de la IASA; el cr¨ªtico y promotor musical Gerardo Kleinburg; o el exdirector de la Fonoteca Ernesto Vel¨¢zquez Brise?o.
Semanas atr¨¢s hicimos p¨²blica una carta para pedir firmas en apoyo de los trabajadores Cap.3000 de la FN y el acervo que resguardan. En un primer corte llegamos a m¨¢s de 400, ahora sumamos cerca de 100 m¨¢s. Infinitas gracias, la convocatoria sigue abierta. #FonotecaResiste pic.twitter.com/b1YoNpEx0v
— Fonoteca3000 (@fonoteca3000) January 26, 2021
Los trabajadores que reclaman mejores condiciones de trabajo son un equipo de especialistas que se ha encargado de preservar siete proyectos insertados en el Programa Memoria del Mundo de la Unesco, entre los que destacan las grabaciones originales de la m¨²sica compuesta para el cine mexicano entre 1958 y 1975, la Colecci¨®n de Thomas Stanford (el m¨¢s prol¨ªfico de los recopiladores de la m¨²sica tradicional de M¨¦xico), la serie radiof¨®nica de Radio UNAM Foro de la Mujer (primer programa de la radio mexicana con contenido feminista) y las grabaciones de campo de Henrietta Yurchenco (pionera de la investigaci¨®n y grabaci¨®n etnomusicol¨®gicas) o documentos sonoros de Ra¨²l Hellmer. Para este 2021, el departamento de Restauraci¨®n Digital de Audio contaba con la aprobaci¨®n para ocuparse de documentos sonoros como: conferencias de Salvador Novo, Octavio Paz, Rufino Tamayo y Salvador Elizondo; m¨²sica grabada en el Porfiriato y de orquestas t¨ªpicas.
¡°Nosotros como colectivo reconocemos que todo este esfuerzo y los logros que se han hecho hasta ahora no habr¨ªan sido posibles sin la participaci¨®n ciudadana y la confianza de grandes personalidades, que se han sumado a nuestra lucha. La sociedad est¨¢ consciente de su patrimonio y de la importancia de preservar la memoria sonora¡±, cuenta a EL PA?S Julio Delgado Revueltas, jefe del departamento de Restauraci¨®n Digital de Audio de la Fonoteca Nacional y miembro del colectivo Fonoteca 3000, que subraya que ¡°esta lucha es por las condiciones laborales y la preservaci¨®n del patrimonio no tiene nada que ver con ninguna asociaci¨®n o un partido pol¨ªtico¡±.
La Fonoteca Nacional es punta de lanza en Am¨¦rica Latina en materia de preservaci¨®n de documentos sonoros. La instituci¨®n cuenta, por ejemplo, con un Manual de Procedimiento y un Protocolo de Restauraci¨®n ¨²nicos en su tipo en la regi¨®n. Los trabajadores reclaman la importancia de contar con personal capacitado en el rescate de miles de documentos sonoros que siguen olvidados o que se encuentran en riesgo inminente de p¨¦rdida. Coleccionistas que hab¨ªan depositado sus acervos sonoros bajo la custodia de la Fonoteca expresaron su preocupaci¨®n, como Mario Lavista o los herederos del director de orquesta y compositor Eduardo Mata. La Fonoteca, en todo caso, ha hecho llamados a la tranquilidad de los coleccionistas. ¡°Si alguno quiere visitar la Fonoteca, estamos dispuestos a mostrarles que el cuidado del patrimonio contin¨²a. Estamos monitoreando la b¨®veda, el sistema de almacenamiento masivo, las conexiones virtuales de la Fonoteca¡±, asegura el director P¨¢vel Granados.
La instituci¨®n ha anunciado que adem¨¢s ahora trabajar¨¢n con audios que nacieron digitales y a otro ritmo. ¡°Va a cambiar la direcci¨®n del trabajo. Nos vamos a concentrar en los audios nativos digitales. Fundamentalmente la radio. Los conservadores f¨ªsicos, que llevaban trabajo de conservaci¨®n sobre disco, sobre cintas, ahora van a hacer trabajo de conservaci¨®n digital, que tambi¨¦n necesita un tratamiento antes de ser infestados a nuestro acervo digital¡±, explica Granados.
Sobre la digitalizaci¨®n del archivo, el director de la Fonoteca Nacional, asegur¨® a este diario que en cuando vuelvan a un esquema de trabajo presencial ¡°se comenzar¨¢ a regularizar el trabajo de digitalizaci¨®n de soportes f¨ªsicos, priorizando las cintas magn¨¦ticas¡±. Y aclar¨® que esta empresa ¡°nunca termina y se est¨¢ haciendo¡±. ¡°Ahorita estaremos trabajando en la conservaci¨®n, catalogaci¨®n e ingesta de objetos digitales, por causa de la contingencia sanitaria¡±.
La historia de los trabajadores de la Fonoteca Nacional se repite con otras dependencias de la Secretar¨ªa de Cultura, una de las instituciones m¨¢s se?aladas por la Auditor¨ªa Superior de la Federaci¨®n (ASF). En su ¨²ltimo informe, los auditores identificaron irregularidades por 1.707 millones de pesos, unos 85 millones de d¨®lares. Uno de las principales es el pago de 727 millones por supuestas deudas de a?os anteriores al 2019, ¡°sin contar con la autorizaci¨®n correspondiente¡± y sin ¡°proporcionar documentaci¨®n que acredite que los bienes y servicios fueron recibidos a satisfacci¨®n¡±.
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