Ricardo Z¨²?iga, el hombre de Biden para el problema centroamericano

Diplom¨¢tico de carrera y hondure?o de nacimiento, Ricardo Z¨²?iga, de 52 a?os, es desde este lunes el nuevo ¡®hombre fuerte¡¯ del presidente Joseph Biden para el tri¨¢ngulo norte de Centroam¨¦rica, que comprende Honduras, Guatemala y El Salvador. Ricardo Z¨²?iga ser¨¢ el encargado de frenar el ¨¦xodo diario de decenas de centroamericanos que aspiran a entrar en Estados Unidos y de distribuir el plan de ayuda a la regi¨®n anunciado por Biden.

Afable, conocedor de la regi¨®n y sensible a la crisis de Derechos Humanos en Centroam¨¦rica, el principal ¨¦xito diplom¨¢tico de Z¨²?iga fue formar parte del equipo que prepar¨® en 2014 durante muchos meses el cambio en la pol¨ªtica de Estados Unidos hacia Cuba, y que se consum¨® con el hist¨®rico encuentro entre Obama y Ra¨²l Castro en la Habana en 2016. Z¨²?iga forma parte del equipo encabezado por la coordinadora para la frontera sur, Roberta Jacobson, que visita M¨¦xico y Guatemala desde este lunes hasta el jueves.

Seg¨²n el Departamento de Estado, Z¨²?iga dirigir¨¢ sus esfuerzos en ¡°detener la migraci¨®n irregular¡± y buscar¨¢ responsabilizar a los socios regionales para ¡°abordar las causas fundamentales de la migraci¨®n y el aumento de las llegadas de ni?os no acompa?ados a la frontera sur de los Estados Unidos¡±, se?al¨® en un comunicado. ¡°Tambi¨¦n tendr¨¢ la funci¨®n de implementar la pol¨ªtica del presidente Biden que implica 4.000 millones de d¨®lares para abordar las causas de la inmigraci¨®n¡±. El Departamento de Estado indic¨® que parte de su trabajo ser¨¢ involucrar a la sociedad civil y al sector privado en la b¨²squeda de soluciones.

Hijo de una funcionaria de la embajada de Estados Unidos y un agregado militar, la familia paterna de Zu?iga est¨¢ vinculada al Partido Nacional de Honduras, el mismo del actual presidente Juan Orlando Hern¨¢ndez, y uno de los partidos que se han repartido tradicionalmente el poder. Z¨²?iga es nieto del pol¨ªtico y excandidato presidencial Ricardo Z¨²?iga Agustinus y sobrino de una ministra de Inversi¨®n Social durante el Gobierno de Ricardo Maduro (2002-2006).

Tras finalizar sus estudios en la Universidad de Virginia, el enviado especial fue destinado en 1993 al consulado de EE UU en Matamoros, en la frontera entre M¨¦xico y Estados Unidos y a partir de ah¨ª ha pasado por las embajadas de pa¨ªses como Espa?a, Brasil o Ghana. Fue oficial de Derechos Humanos en la Secci¨®n de Intereses en La Habana y en 2012 fue nombrado director senior de Asuntos del Hemisferio Occidental en el Consejo de Seguridad Nacional.

Seg¨²n The Washington Post, durante su gesti¨®n para lograr la normalizaci¨®n de las relaciones con Cuba, Z¨²?iga estuvo encargado del di¨¢logo con la sociedad civil y el establecimiento de la libertad de expresi¨®n en Cuba para plantear avances en esa direcci¨®n al r¨¦gimen cubano. ¡°Ten¨ªa serios problemas con la situaci¨®n de los derechos humanos en Cuba y todav¨ªa los tiene¡±, coment¨® un funcionario citado por el Post.

El enviado especial tiene frente a ¨¦l una misi¨®n llena de retos, pero entre los que sobresale un problema: Honduras. El pa¨ªs centroamericano es el principal expulsor de migrantes hacia la frontera con Estados Unidos y nada hace pensar que la tendencia pueda cambiar. Al caos econ¨®mico provocado por los huracanes Eta e Iota en noviembre, que destrozaron el norte del pa¨ªs y el sector industrial del Valle de Sula dejando a cientos de miles de personas en indigencia de un d¨ªa para otro, se suma la tensi¨®n pol¨ªtica. Honduras encara un a?o electoral marcado por las acusaciones de v¨ªnculos de Juan Orlando Hern¨¢ndez con el crimen organizado lo que podr¨ªa complicar la estabilidad pol¨ªtica durante sus ¨²ltimos meses. Los 4.000 millones de d¨®lares con los que cuenta en ayudas son claramente insuficientes para revertir esta tendencia y deber¨¢ aliarse con M¨¦xico para poner en marcha un plan Marshall para la regi¨®n que hasta el momento no ha salido de las buenas intenciones del presidente mexicano Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador. Fuentes mexicanas consultadas por este peri¨®dico admiten que el paquete de ayudas para recuperar la regi¨®n deber¨ªa ser cinco veces mayor, de unos 20.000 millones de d¨®lares

Pero el tri¨¢ngulo Norte centroamericano no es un ¨¢rea monol¨ªtica y cada pa¨ªs tiene sus particularidades. La reducci¨®n de la violencia en El Salvador se ha convertido en un argumento importante para que haya descendido la migraci¨®n en los ¨²ltimos meses. Paralelamente Estados Unidos tendr¨¢ que dialogar con el reforzado Gobierno de Nayib Bukele en El Salvador a quien un grupo de senadores han reprochado los tintes autoritarios de su gesti¨®n. Guatemala, por su parte, es el gran expulsor de menores no acompa?ados, con cifras cinco veces superiores a las de sus vecinos, debido a una poblaci¨®n joven, altas tasas de desempleo, las poderosas redes de contrabando en las zonas rurales y el impacto del cambio clim¨¢tico que ha desertificado ¨¢reas que antes eran f¨¦rtiles.

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