El fiscal Gertz encara la peor ola de reproches desde su nombramiento

Cuando a¨²n no se cumple un tercio de su mandato, el fiscal general de la Rep¨²blica, Alejandro Gertz, encara una de sus peores crisis al frente de la dependencia. En pocas semanas, la llovizna de cr¨ªticas aisladas a su quehacer se ha convertido en una verdadera tormenta, sostenida en nubarrones de todo tipo: asuntos personales, posibles conflictos de inter¨¦s, persecuciones cuestionables y reproches de personalidades cercanas al presidente, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, caso por ejemplo de la jefa de Gobierno de Ciudad de M¨¦xico, Claudia Sheinbaum.

La investigaci¨®n contra una treintena de integrantes de la comunidad cient¨ªfica, que la Fiscal¨ªa busca detener por delitos reservados habitualmente para hampones vinculados a cr¨ªmenes de sangre, ha condensado y unificado a los cr¨ªticos, existentes pero dispersos hasta ahora. Primer fiscal aut¨®nomo tras la reforma que deber¨ªa separar la procuraci¨®n de justicia del poder pol¨ªtico en M¨¦xico, Gertz ha puesto de acuerdo a todos sus enemigos, que se?alan su car¨¢cter punitivo y desquitado. Su mandato vence en 2028.

Es dif¨ªcil se?alar el origen de las cr¨ªticas, aunque probablemente haya que apuntar al proceso de su nombramiento como fiscal, en enero de 2019. Hasta entonces, la designaci¨®n del procurador corr¨ªa a cuenta del presidente en turno. Con la reforma, iniciada en 2014 y concluida en 2018, y la aprobaci¨®n de la ley org¨¢nica de la dependencia, el Senado se encargar¨ªa de nombrar al fiscal, previa terna enviada desde el poder Ejecutivo.

Cosa habitual en la pol¨ªtica mexicana, la norma se estir¨® de manera que el proceso de selecci¨®n acab¨® recordando a las viejas designaciones a dedo, dirigido desde Palacio Nacional, barnizado por el Congreso, criticado por organizaciones que monitorean la procuraci¨®n de justicia y el debido proceso. Ana Lorena Delgadillo, directora de la Fundaci¨®n para la Justicia, explica: ¡°Frente a la realidad violenta que enfrenta el pa¨ªs se requer¨ªa un perfil de alguien actualizado en nuevas t¨¦cnicas de investigaci¨®n, en macrocriminalidad, que supiera c¨®mo funciona el nuevo sistema de justicia penal, una persona en contacto con la ciudadan¨ªa, con las v¨ªctimas, que est¨¦ abierta a la participaci¨®n ciudadana y la rendici¨®n de cuentas. Y Gertz no cumple ninguna de estas caracter¨ªsticas¡±.

Delgadillo sigui¨® el proceso de selecci¨®n del fiscal e impuls¨® el colectivo #Fiscal¨ªaquesirva. En 2020 y 2021, ha coordinado informes sobre la autonom¨ªa y los resultados de la Fiscal¨ªa General de la Rep¨²blica, FGR. ¡°En su informe de sus primeros 100 d¨ªas, Gertz denunci¨® que hab¨ªa encontrado una instituci¨®n que era verdugo de enemigos pol¨ªticos, que encubr¨ªa a c¨®mplices del poder. Y eso no ha cambiado. Seguimos investigando caso a caso. La corrupci¨®n, las desapariciones y los homicidios, siguen sin ser temas prioritarios para la FGR¡±, argumenta.

Si las cr¨ªticas a Gertz nacieron de su designaci¨®n, sus intentos por reformar la ley de a fiscal¨ªa las alimentaron. Alfredo Lecona, integrante del colectivo #Fiscal¨ªaquesirva, explica que a principios de este a?o empez¨® a circular ¡°un documento de reformas al sistema penal bastante regresivas¡±. Lecona, que ha trabajado de asesor parlamentario y conoce las ca?er¨ªas del Congreso, dice que el documento era como un globo sonda, para ver c¨®mo se recib¨ªan las propuestas. ¡°El texto propon¨ªa, por ejemplo, que las pruebas obtenidas mediante tortura tuvieran validez judicial o consideraba la presunci¨®n de responsabilidad, contraria a la presunci¨®n de inocencia¡±, recuerda.

Lecona se?ala que tanto Ricardo Monreal, coordinador en el Senado de Morena, el partido de L¨®pez Obrador, como Julio Scherer, entonces consejero jur¨ªdico de presidencia, estuvieron detr¨¢s de la difusi¨®n de ese texto, propuesta que luego, ante las cr¨ªticas, abandonaron. Gertz y su equipo insistieron en la reforma, rechazada tambi¨¦n por colectivos de v¨ªctimas de todo el pa¨ªs, porque eliminaba la responsabilidad de la FGR en la investigaci¨®n de casos de personas desaparecidas, que se cuentan por decenas de miles en el pa¨ªs. Aunque algo rebajada, la reforma de la ley se aprob¨® finalmente en abril de este a?o.

Por entonces, Delgadillo y su equipo ya hab¨ªan presentado su segundo informe sobre el desempe?o de la nueva fiscal¨ªa. En las conclusiones, escrib¨ªan: ¡°La apuesta principal del Fiscal General ha sido cambiar el marco normativo para acomodar las instituciones a su visi¨®n, en los que ha dado la espalda a la sociedad y ha convertido a la FGR en una instituci¨®n m¨¢s opaca de lo que era¡±. Al mismo tiempo, M¨¦xico Eval¨²a public¨® los resultados de su ¡°Observatorio de la Transici¨®n¡±, que reflejaba una continuidad en la incapacidad de la dependencia para hacer justicia. Seg¨²n la organizaci¨®n, m¨¢s del 95% de los delitos federales en el pa¨ªs, caso por ejemplo de narcotr¨¢fico, delincuencia organizada o lavado de dinero, siguen quedando impunes.

De la instituci¨®n al hombre

Mientras Gertz y su equipo insist¨ªan en la reforma de ley de la fiscal¨ªa, los detalles del proceso judicial que ¨¦l mismo hab¨ªa impulsado contra su familia pol¨ªtica salieron a la luz. A finales de marzo, EL PA?S public¨® una serie de reportajes que detallaba los pormenores de la denuncia del fiscal contra quien hab¨ªa sido la pareja de su hermano. Federico Gertz hab¨ªa muerto en el hospital en septiembre de 2015. Alejandro Gertz, entonces rector de la Universidad de la Am¨¦ricas Ciudad de M¨¦xico, denunci¨® a su pareja, Laura Mor¨¢n, y a sus hijas, por su homicidio. A su entender, las mujeres no hab¨ªan cuidado debidamente de su hermano, provoc¨¢ndole la muerte.

Durante los primeros a?os, la denuncia no avanz¨®. En 2016, la fiscal¨ªa de Ciudad de M¨¦xico archiv¨® el caso, pero ya con Gertz al frente de la FGR, en 2020, la dependencia local reactiv¨® la denuncia, present¨¢ndola ante una jueza, ordenando ¨¦sta la detenci¨®n de Mor¨¢n, de 94 a?os, y de una de sus dos hijas, Alejandra Cuevas. La fiscal¨ªa de Ciudad de M¨¦xico detuvo a Cuevas en octubre del a?o pasado.

Los hijos de Cuevas han denunciado que Gertz ha usado su poder de manera facciosa y que incluso les embarc¨® en una negociaci¨®n por la liberaci¨®n de su madre, que pasaba por la entrega de varios millones de pesos en dinero, obras de arte y otros objetos de valor que, a juicio del fiscal, le pertenec¨ªan como parte de la herencia de su hermano. Gertz ha negado que haya existido ninguna negociaci¨®n, pero no que recibiera el dinero, las obras de arte y el resto de objetos.

En el segundo semestre del a?o, una nueva pol¨¦mica envolv¨ªa al fiscal. Despu¨¦s de diez a?os y vario rechazos a cuestas, Gertz consigui¨® acceder finalmente al m¨¢ximo nivel del Sistema Nacional de Investigadores, medio para financiar el trabajo de cient¨ªficos destacados en el pa¨ªs. Acad¨¦micos independientes criticaron su inclusi¨®n, que Gertz hab¨ªa batallado en tribunales durante a?os, acudiendo incluso al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminaci¨®n, Conapred.

La estrategia del fiscal en este ¨²ltimo caso refleja la que hab¨ªa seguido en el proceso por la muerte de su hermano: aferrarse a recursos y amparos en los tribunales hasta conseguir un resultado positivo. En medio de ambas marejadas, que el fiscal naveg¨® sin excesivos problemas, la opini¨®n p¨²blica ve¨ªa las dificultades de la FGR para concretar acusaciones en el marco del caso Odebrecht, la pata mexicana del esc¨¢ndalo de sobornos a gran escala orquestado por la constructora brasile?a, conectada a altos funcionarios del Gobierno de Enrique Pe?a Nieto (2012-2018).

La llegada a M¨¦xico a mediados de 2020 de uno de los personajes clave en la presunta red de sobornos, Emilio Lozoya, exdirector de Pemex, hac¨ªa presumir de un feliz desenlace para el fiscal, enfrentado a d¨¦cadas de impunidad de la clase pol¨ªtica. Un a?o m¨¢s tarde, los nombres de decenas de pol¨ªticos y altos cargos de la administraci¨®n anterior han bailado en otros tantos titulares, pero las acusaciones siguen sin concretarse.

Cienfuegos y los cient¨ªficos

El atasco en el caso Odebrecht se ha solapado con otros procesos pol¨¦micos que implican a la fiscal¨ªa, pocos tan extra?os como el de Salvador Cienfuegos. En octubre de 2020, las autoridades de Estados Unidos detuvieron en Los ?ngeles al secretario de la Defensa de Pe?a Nieto, el general Salvador Cienfuegos, por facilitar supuestamente el tr¨¢fico de drogas a un grupo criminal del Pac¨ªfico mexicano. Despu¨¦s de una operaci¨®n diplom¨¢tica raras veces vista en M¨¦xico, el Gobierno de L¨®pez Obrador consigui¨® que la administraci¨®n de justicia del pa¨ªs vecino retirara los cargos y mandara al general de vuelta a M¨¦xico. La FGR abri¨® entonces una investigaci¨®n, pero solo a partir de las pruebas que recibi¨® de EE UU. A las pocas semanas, la agencia investigadora archiv¨® las pesquisas.

Delgadillo opina que el caso Cienfuegos es paradigm¨¢tico de la forma de actuar del fiscal. ¡°Es incre¨ªble por ejemplo que ¨¦l dijera que no pod¨ªa iniciar por su propia cuenta una investigaci¨®n por el caso Cienfuegos. Eso denota desconocimiento del sistema: no hizo nada por este caso¡±, defiende. Delgadillo se refiere a la estrechez de miras de la FGR, que evit¨® aprovechar las acusaciones contra el general para hacer una investigaci¨®n de contexto, del actuar del militar durante sus a?os al frente del Ej¨¦rcito. ¡°Igual que en el caso Lozoya, vemos que ¨¦l tiene todos los beneficios y en cambio a los cient¨ªficos les pide prisi¨®n preventiva oficiosa¡±, critica, en referencia a los investigadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnolog¨ªa, Conacyt, acusados de delincuencia organizada hace unas semanas. ¡°En el caso de los cient¨ªficos, vemos que s¨ª usa toda la fuerza del sistema penal en su contra, de manera irracional, il¨®gica y excesiva. Vemos que hace uso del sistema penal contra los que considera enemigos del estado, cuesti¨®n totalmente subjetiva, poco acorde a la realidad violenta del pa¨ªs¡±.

El caso de los cient¨ªficos ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de muchos que hasta ahora hab¨ªan callado. La jefa de Gobierno de Ciudad de M¨¦xico, Claudia Sheinbaum, calific¨® el proceso de ¡°excesivo¡±. En los mismos t¨¦rminos se han expresado otras personalidades del mundo de la pol¨ªtica y la justicia, caso por ejemplo del exministro de la Suprema Corte, Jos¨¦ Ram¨®n Coss¨ªo, que tild¨® el proceso contra los cient¨ªficos de perverso. De momento, L¨®pez Obrador ha evitado pronunciarse sobre el actuar de Gertz y la fiscal¨ªa. En su mano queda el futuro del fiscal. Una posible destituci¨®n tendr¨ªa que poner de acuerdo al titular del Ejecutivo y a la mayor¨ªa en el Senado, c¨¢mara en quien reside la responsabilidad de controlar al fiscal.

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