Poder Prieto: la revoluci¨®n de tez morena toma el control de los escenarios
El movimiento surgi¨® a mediados de a?o para combatir el racismo imperante en medios de comunicaci¨®n
¡°Lleg¨® la bonita ¨¦poca del a?o en que los prietos seremos seguidos en todos los centros comerciales¡±, sentenci¨® el actor Tenoch Huerta en Twitter hace un par de semanas. Su declaraci¨®n cay¨® como una bomba en las redes y deton¨® el debate sobre el racismo y la estigmatizaci¨®n sobre el tono de piel. Huerta, junto con otro grupo de actores, escritores y miembros de la industria audiovisual formaron en mayo de este a?o la iniciativa Poder Prieto para visibilizar el racismo y la discriminaci¨®n desde los escenarios, una realidad muy normalizada en esta industria.
Aketzaly Ver¨¢stegui (Valle de Galeana, Guerrero, 1995) recuerda muy bien una de tantas veces que su color de piel la puso en desventaja. ¡°He hecho castings para publicidad que piden el perfil ¡®latino internacional¡¯ pero al parecer no encajaba por ser suficientemente blanca o de ese tono moreno aspiracional, esas son las barreras con las que me he topado¡±, recuerda la actriz, en entrevista. Los perfiles a los que se le designaba, si bien dignos, como vendedora de tortillas o trabajadora del hogar, pod¨ªan ser los ¨²nicos a los que aspiraba, como otros actores son relegados al papel de narcotraficantes o ladrones, simplemente por el hecho de ser morenos. ¡°Todo eso tiene un efecto en la sociedad, porque si bien podemos desempe?ar esos papeles no es posible reducirlo a solo ese espectro¡±, comenta.
Los estereotipos de pobreza, delincuencia y violencia han sido, hist¨®ricamente, perpetradores de un racismo que se sigue extendiendo en la industria del espect¨¢culo. ¡°No es que las televisoras o las producciones sean malos, sino que es resultado de nuestra educaci¨®n, de 500 a?os de historia donde se forma este sistema que excluye a las personas por su color de piel¡±, dice la actriz Maya Zapata (Ciudad de M¨¦xico, 1980), tambi¨¦n integrante de Poder Prieto.
Es por eso que las declaraciones de Huerta o el comentario que hizo Salma Hayek al ver ¡°su cara morena¡± en la pantalla grande como una superhero¨ªna tienen tanto peso para la industria. Por ello, uno de los centros de debate de esta iniciativa en redes sociales es dejar de lado los perfiles ¡°blanqueados¡±. ¡°La lucha es contra la blanquitud de la mente, que alimenta y perpet¨²a el racismo sist¨¦mico, y no contra la gente de piel blanca¡±, indica una de las premisas de este movimiento.
No es de extra?arse que una de las historias t¨ªpicas de M¨¦xico, Maria Isabel, sobre una mujer ind¨ªgena que llega a la ciudad que salta r¨¢pidamente de la pobreza a ser rica, siempre haya sido interpretada por actrices no ind¨ªgenas y con un tono de piel primordialmente claro. ¡°Si puedes pasar por blanca te puedes casar con un hombre blanco que te d¨¦ estatus, esa es la narrativa que hay que modificar¡±, dice Zapata.
El complejo racismo de M¨¦xico
En nuestro pa¨ªs no solo se trata del color de piel, sino de un complejo esquema de caracter¨ªsticas que descalifican a las personas. ¡°Tiene que ver con c¨®mo se leen los cuerpos: hay pieles m¨¢s claras con rasgos que no se asocian con lo refinado o lo bello y las personas que son blancas tambi¨¦n son atravesadas por la clase, esa es la cosa complicada de nuestro racismo¡±, refiere Zapata. En su momento, esta actriz fue considerada una prieta cualquiera en un universo blanco, pero en otros momentos ha sido considerada blanca y privilegiada.
Sin embargo, algo que el racismo hace es despojar a las personas. Ver¨¢stegui, originaria de Tierra Caliente (Guerrero), cree que este tipo de discriminaci¨®n niega la historia y las ra¨ªces. ¡°Este sistema nos ha despojado de poder estar en nuestra tierra, mi abuela, hablante de n¨¢huatl ya no lo habla mucho, mi madre y yo fuimos despojadas del derecho de hablar de nuestras ra¨ªces, as¨ª es como act¨²a el racismo¡±, comenta.
La apariencia f¨ªsica es la principal causa de discriminaci¨®n en M¨¦xico y m¨¢s de la mitad de la poblaci¨®n ind¨ªgena y afrodescendiente considera que sus derechos se respetan poco o nada, de acuerdo con la ¨²ltima Encuesta Nacional sobre Discriminaci¨®n (Enadis). ¡°Alguien ten¨ªa que hablar de esto porque desgraciadamente cobra vidas y no hay vidas que valgan menos¡±, finaliza Zapata.
Ambas actrices coinciden en que el debate no debe de desaparecer, sobre todo por los miles de comentarios que se vierten en torno al tema. ¡°Resentidos¡±, ¡°traumados¡±, ¡°parecen vagos¡±, son solo algunos de los comentarios que le valieron a Huerta por escribir ese mensaje. ¡°Tenemos que seguir hablando de esto, y hay que hablar de poder y reivindicar la palabra prieto¡±, finaliza Ver¨¢stegui.
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