L¨®pez Obrador tensa la cuerda con el PRI y marca distancias con Ebrard con los nuevos nombramientos
El presidente de M¨¦xico defiende las designaciones a pesar de las pol¨¦micas: ¡°El Gobierno no puede representar a un solo partido¡±
La nueva hornada de embajadores decidida esta semana por Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador ha vuelto a levantar una fuerte polvareda en distintas direcciones. La designaci¨®n del cuerpo diplom¨¢tico es una facultad discrecional del presidente y L¨®pez Obrador ha aprovechado para mandar dos mensajes con el ¨²ltimo movimiento. El primero, al PRI. Los dos nuevos exgobernadores del partido tricolor que, a falta de la confirmaci¨®n definitiva en el Senado, se sumar¨¢n al barco del obradorismo suponen un nuevo golpe en v¨ªsperas de la negociaci¨®n por la reforma el¨¦ctrica, un evento que medir¨¢ la fuerza de la oposici¨®n para el resto del sexenio. Y el segundo mensaje va dirigido al coraz¨®n de la Canciller¨ªa. La mitad de los nuevos cargos carece de trayectoria diplom¨¢tica alguna, anteponiendo nombres de confianza a los profesionales de carrera y marcando distancia con el canciller, Marcelo Ebrard, uno de los candidatos en la terna a la sucesi¨®n presidencial. El secretario de Relaciones Exteriores no se ha pronunciado sobre las designaciones y desde la Canciller¨ªa se remiten a lo expresado por el presidente.
Las redes lanzadas hacia cuadros de la oposici¨®n comenz¨® el verano pasado tras las elecciones intermedias. La invitaci¨®n a varios exgobernadores del PRI y del PAN a integrarse en el Gobierno fue defendida como un mensaje de apertura que marcara distancias con sus antecesores, una de las obsesiones de L¨®pez Obrador. El mismo argumento desplegado este martes durante su rueda de prensa matutina: ¡°El Gobierno no debe de ser faccioso, no puede representar, como era antes, a un partido. El Gobierno es de todos. Queremos que M¨¦xico se exprese en el mundo como es, plural¡±.
El anuncio entonces de dos inesperados fichajes, los exgobernadores de Sinaloa y Nayarit, Quirino Ordaz y Antonio Echevarr¨ªa Garc¨ªa, un veterano priista y un panista con linaje, ambos reci¨¦n derrotados por Morena en las elecciones de junio, supusieron un severo golpe. El presidente volv¨ªa a tomar la iniciativa y profundizaba en la divisi¨®n y la fragilidad de una oposici¨®n que, pese a la mejora en esca?os tras las elecciones de junio, no consigue enderezar el rumbo ni perfilar liderazgos fuertes ante la omnipresencia de Morena.
Desde el PRI amenazaron incluso con expulsar del partido a Ordaz, que permanece de momento pendiente del pl¨¢cet por parte del Gobierno espa?ol. La direcci¨®n del hist¨®rico partido mexicano ha vuelto a amagar este martes con la expulsi¨®n de los exgobernadores de Sonora y Campeche, Claudia Pavlovich y Carlos Miguel Aysa. La incorporaci¨®n al Gobierno de dos nuevos veteranos priistas derrotados por Morena en verano y sigue abriendo la herida del PRI, cada vez m¨¢s debilitado y sumido en su en¨¦sima crisis de identidad, y eleva la presi¨®n ante la crucial negociaci¨®n por la reforma el¨¦ctrica.
Las elecciones de junio otorgaron al hist¨®rico partido mexicano el papel de bisagra de cara a la mayor¨ªa necesaria para abrir las puertas de las reformas constitucionales que tanto anhela el presidente. Los cambios a fondo del mapa el¨¦ctrico son los primeros en la agenda del Gobierno. La idea original era desbloquear esta primera reforma antes de que acabara noviembre. Pero tras meses de encontronazos, la fecha se pospuso a primavera de este a?o. La direcci¨®n del PRI jug¨® primero la carta del acercamiento, para cerrarse en banda despu¨¦s aduciendo como argumento los ¡°ataques de Morena¡±, ejemplificados por la aprobaci¨®n por rodillo de los presupuestos o los fichajes de cuadros priistas. Los nuevos nombramientos vuelven a subir el oleaje anticipando un largo tira y afloja que medir¨¢ la fuerza no solo del PRI sino de toda oposici¨®n para el resto del sexenio.
Adem¨¢s de cuadros priistas, entre los ocho nuevos cargos designados ¡ªde un total de 16¡ª destacan perfiles de intelectuales y funcionarios afines a L¨®pez Obrador, que defendi¨® su decisi¨®n apuntando a la independencia del cuerpo diplom¨¢tico. ¡°?Ustedes creen que en el Servicio Exterior Mexicano todos son de Morena? Les puedo garantizar que son la minor¨ªa y, sin embargo, se ha respetado a quienes tienen militancia en otros partidos. Trabajan en el Servicio Exterior porque han cumplido, no importa de qu¨¦ partido son¡±.
Pese la discrecionalidad otorgada al presidente, la legislaci¨®n tambi¨¦n establece que habr¨¢n de tener preferencia ¡°funcionarios de carrera de mayor competencia, categor¨ªa y antig¨¹edad en la rama diplom¨¢tico-consular¡±. El responsable de la Canciller¨ªa, Marcelo Ebrard, queda particularmente se?alado con el caso del futuro embajador de Nicaragua. El escritor Guillermo Zamora aterrizar¨¢ como representante de M¨¦xico en la Nicaragua de Daniel Ortega en un contexto pol¨ªtico tenso por su casi nulo reconocimiento en el exterior y por las fricciones que han aflorado en el gabinete mexicano.
Hace solo una semana, L¨®pez Obrador exhibi¨® sus diferencias con la Secretar¨ªa de Exteriores al conocer la noticia de que ning¨²n funcionario de su Gobierno iba a acudir a la toma de protesta de Ortega, reelegido por cuarta vez en noviembre tras encarcelar a los candidatos opositores. El presidente anunci¨® que s¨ª se enviar¨ªa a alguien, desautorizando p¨²blicamente a la instituci¨®n que lidera el secretario Marcelo Ebrard, y ofreciendo un espaldarazo a Ortega y a una elecci¨®n celebrada entre acusaciones de fraude masivo y condenas internacionales.
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