Las protestas feministas est¨¢n llenas de imaginaci¨®n pol¨ªtica
Las marchas feministas son la extensi¨®n de la imaginaci¨®n pol¨ªtica en una sociedad violenta contra las mujeres. Una en la que si desde un d¨ªa antes levantan vallas y muros, se sube al cielo para decir: ¡°Ninguna en el olvido¡±
La imaginaci¨®n pol¨ªtica ha sido la fuerza de los feminismos en las calles: protestar sin armas para exigir a las autoridades un alto a la violencia de g¨¦nero. Urgir la despenalizaci¨®n del aborto en Am¨¦rica Latina con pa?uelos verdes. Generar un debate p¨²blico y global con un performance. Las acciones feministas se tejen en peque?os grupos. ?C¨®mo se arman estas protestas sin armas que son de una gran imaginaci¨®n pol¨ªtica? Imaginemos. Tal vez se intercambian ideas, se tienen conversaciones en Whatsapp, se mandan stickers, hay acuerdos, desacuerdos, se organizan finalmente en un peque?o grupo y se sale a la calle a llevar a cabo la acci¨®n.
La imaginaci¨®n pol¨ªtica en las protestas tiene muchas escalas, desde un cartel en una marcha hasta las acciones que se hacen virales y le dan la vuelta al mundo. Lo peque?o y lo grande, en este caso, son capaces de tener el mismo impacto. Desde lo peque?o como pensar en lo que se va a rimar, tal vez hacer una serie de carteles en grupo, organizarse para salir marchar vestidas de alguna forma, pasando por quienes han hecho las consignas m¨¢s pegajosas que se corean y repiten a lo largo de las marchas, o quienes han ingeniado las consignas que adem¨¢s de protestar tienen un gran sentido del humor.
Las canciones que se cantan en las calles hasta el performance Un violador en tu camino de Las Tesis en Chile que rompi¨® el internet y en unos cuantos d¨ªas se replic¨® en varios idiomas, masivamente en varias partes del mundo, es un gran ejemplo de imaginaci¨®n pol¨ªtica. El tema de las escalas ¨Dde chico a lo m¨¢s grande¨D, comparte el mismo mecanismo cuando se trata de la imaginaci¨®n pol¨ªtica para protestar. Como vivimos en una regi¨®n tremendamente violenta en contra de las mujeres, con unos niveles extremos de transodio, hay una cantidad de ejemplos de protestas muy poderosas. Por ejemplo: la hermosa imagen de la diamantina rosa suspendida en el aire, con todos sus brillos a la luz del sol, deslumbrantes, antes de caer en la cara del jefe de la polic¨ªa afuera de la Secretar¨ªa de Seguridad P¨²blica el 12 de agosto de 2019. La diamantina, antes relacionada con la fiesta, con las manualidades preescolares, una cosa de papeler¨ªa, de pronto, all¨ª suspendida en el aire, ese pu?ado de diamantina con todos sus destellos luminosos se convirti¨® en un s¨ªmbolo de resistencia y el llamado a la marcha hist¨®rica unos d¨ªas despu¨¦s. Dejemos que caiga la diamantina rosa a donde estaba dirigida.
No me gustar¨ªa llamarlas protestas pac¨ªficas, prefiero llamarlas protestas sin armas porque no necesariamente tienen que ser pac¨ªficas, m¨¢s cuando surgen del encabronamiento. La diamantina explot¨® en m¨¢s colores con las pintas en El ?ngel. Otro ejemplo de una protesta sin armas: el agua roja en la Fuente de la Diana Cazadora, pint¨¢ndose de a poco hasta pintarse totalmente de rojo como s¨ªmbolo en contra de la sangre derramada de los feminicidios en M¨¦xico. Otra imagen o mejor varias esta vez: desaparecidas, v¨ªctimas de feminicidios, periodistas, poetas, escritoras, mujeres ilustres en una ciudad principalmente con calles con nombres de hombres. Otra protesta nocturna sin violencia: la proyecci¨®n de la frase ¡°Aborto legal ya¡± en Palacio Nacional el 7M del a?o pasado y la frase ¡°M¨¦xico Feminicida¡± en un pa¨ªs en el que hay un promedio de 11 feminicidios al d¨ªa. Y esta acci¨®n, potente, recia que sobrevol¨® la Ciudad de M¨¦xico este 7 de marzo: Un zepel¨ªn enorme sobrevolando puntos emblem¨¢ticos de la Ciudad de M¨¦xico. Vamos a regresarle al video, a volver a verlo sobrevolando, inmenso, el Senado la Rep¨²blica: un zepel¨ªn gris con dos frases en los costados ¡°10 feminicidios diarios¡± y ¡°Ninguna en el olvido¡±, apelando a los sentimientos, poniendo en las alturas un sentir, como esos que tanto disgustan al patriarcado por ¡°femeninos¡±.
A lo largo de la Historia la imaginaci¨®n pol¨ªtica ha sido una salida ante la opresi¨®n, la explotaci¨®n laboral, los abusos y los malos tratos. Desde las f¨¢bricas, las trabajadoras y los trabajadores se han organizado en gestos silenciosos como formas de protesta en contra de la explotaci¨®n laboral, los malos sueldos, la falta de pago. Por ejemplo, unos panaderos italianos en los a?os setenta, como protesta a los malos sueldos, comenzaron a meter colillas de cigarros a las piezas de pan que hac¨ªan. Recientemente, trabajadoras y trabajadores de Zara se organizaron para esconder mensajes en la ropa como protesta a las p¨¦simas condiciones laborales, y escondieron frases en la ropa como ¡°No me han pagado¡± y ¡°No hemos recibido los ¨²ltimos 3 meses de salario¡±. Estas formas de protesta requieren organizaci¨®n en peque?os grupos y suelen hacerse en anonimato para no poner en riesgo el puesto laboral. El anonimato en el caso de las acciones feministas tambi¨¦n parte del mismo principio y, como en las protestas laborales, el anonimato es su mayor fuerza.
Muchas de estas acciones son cercanas a la producci¨®n art¨ªstica. Mejor dicho, el arte tiene una relaci¨®n estrecha con las formas de protesta y estas formas de protesta son cercanas al arte. Por ejemplo, la artista mexicana Tania P¨¦rez C¨®rdova tiene actualmente una pieza exhibida en Par¨ªs que se titula Huelga inspirada en las protestas de los panaderos que met¨ªan colillas de cigarro en los panes. 80 artistas visuales en Estados Unidos escribieron en el cielo con avionetas como una forma de protesta en contra de los abusos migratorios en los centros de detenci¨®n; o su antecesor, el genial poeta chileno Ra¨²l Zurita escribi¨® en el cielo, tambi¨¦n con letras de humo en el cielo. El artista brasile?o Cildo Meireles hizo una pieza llamada Inser??es em circuitos ideol¨®gicos, Projeto Coca-Cola (1970), una serie de botellas de Coca-Cola con mensajes que el artista imprim¨ªa en las botellas de vidrio retornables y al regresarlas a la f¨¢brica volv¨ªan a circular en masa en Brasil con frases de protesta como ¡°Yankees go home!¡±, adem¨¢s de circular algunas instrucciones sobre c¨®mo la gente pod¨ªa insertar sus propias opiniones cr¨ªticas.
En esta misma l¨ªnea, la artista brasile?a Maril¨¢ Dardot junto con la colectiva #novoysola y el Colectivo amasijo para la ¡°Tort(guerra)illa¡± buscaron frases en las revistas feministas que circularon en M¨¦xico entre los a?os 70 y 2000, en el Centro de Investigaciones y Estudios de G¨¦nero de la UNAM, y en papel estraza para envolver tortillas imprimieron frases como ¡°Nuestra vida, nuestros cuerpos¡± o ¡°Por la vida y la libertad de las mujeres. Fin al feminicidio¡±, entre otras. El papel estraza se distribuye en diferentes tortiller¨ªas en las alcald¨ªas para envolver tortillas y estas frases feministas se difunden en espacios dom¨¦sticos a los que antes no llegaban.
Pareciera que entre m¨¢s sordas son las autoridades en temas de violencia de g¨¦nero m¨¢s lejos llega la imaginaci¨®n pol¨ªtica. Dec¨ªa Borges que el telescopio es la extensi¨®n de la mirada, los libros la extensi¨®n de la imaginaci¨®n y, tal vez podr¨ªamos sumar, las marchas feministas son la extensi¨®n de la imaginaci¨®n pol¨ªtica en una sociedad violenta contra las mujeres. Una en la que si desde un d¨ªa antes levantan vallas y muros, una acci¨®n sube al cielo para decir: ¡°Ninguna en el olvido¡±. En lo alto, donde no hay l¨ªmites, como tampoco tiene l¨ªmites la imaginaci¨®n pol¨ªtica.
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