M¨¦xico y Texas enfrentan posibles apagones por sistemas (radicalmente) opuestos

M¨¦xico y el Estado de Texas en Estados Unidos comparten este verano una misma amenaza: apagones. Sequ¨ªas y temperaturas r¨¦cord han impulsado la demanda el¨¦ctrica, poniendo a prueba la capacidad de sus respectivas redes. Los temidos cortes, sin embargo, parecen originarse por causas diametralmente opuestas: en Texas se ha dejado el sistema en manos de privados, mientras, en M¨¦xico, se les ha excluido.

La red el¨¦ctrica de Texas es conocida por ser independiente del resto de EE UU, una decisi¨®n muy apropiada para un Estado con una fuerte identidad separatista. En un territorio m¨¢s grande que Francia y una econom¨ªa del tama?o de la rusa, la red es comparable con la de pa¨ªses enteros y, actualmente, est¨¢ fallando. Una primera crisis se dio en febrero del a?o pasado, cuando temperaturas extremadamente bajas congelaron parte de la infraestructura que permite convertir gas natural en electricidad. Ahora, autoridades urgen a los tejanos, tanto en hogares como en la industria, reducir su consumo el¨¦ctrico para evitar apagones, ya que su capacidad de transmisi¨®n es insuficiente.

Por su parte, en M¨¦xico, el Centro Nacional de Control de Energ¨ªa (Cenace) ha dicho que la falta de inversi¨®n en la red nacional de transmisi¨®n puede generar apagones, algo que empresarios y analistas del sector han advertido desde que el Gobierno federal comenz¨® a bloquear la participaci¨®n de empresas privadas. La Comisi¨®n Federal de Electricidad (CFE), incluso, compra m¨¢s gas natural de lo que puede utilizar para generar electricidad, en parte debido a que se paraliz¨® la inversi¨®n privada que se esperaba construyera los ductos para aprovechar el gas.

Teletrabajo y criptomonedas

Por muchas razones, este ha sido un verano con una demanda de electricidad particularmente alta, explica Morris Greenberg, analista de mercados de electricidad en S&P Global Platts Analytics. El teletrabajo habilitado por la pandemia gener¨® una migraci¨®n a ciudades tejanas en donde los impuestos y los alquileres son m¨¢s bajos, por lo que la poblaci¨®n creci¨®. Adem¨¢s, el Estado ha atra¨ªdo a un gran n¨²mero de mineros de criptomonedas, un proceso que consume altas cantidades de electricidad.

¡°M¨¢s all¨¢ de eso, Texas ha tenido niveles muy bajos de precipitaci¨®n por un largo periodo de tiempo, lo que impulsa las temperaturas y la necesidad de utilizar el aire acondicionado¡±, agrega Greenberg. El Consejo de Fiabilidad El¨¦ctrica de Texas (ERCOT) dijo esta semana que no hab¨ªa ¡°soluci¨®n de mercado disponible¡± en un sistema en que se ha permitido que las empresas privadas se auto regulen. En febrero de 2021, cuando los apagones por falta de acceso a gas natural causaron 32 muertes en el Estado, Greenberg abog¨® por un mercado con mayor regulaci¨®n.

¡°Desde entonces s¨ª se ha mejorado la regulaci¨®n, pero no se ha ido tan lejos como para crear un mercado de capacidad a plazo, como lo tienen otros operadores regionales¡±, dice Greenberg. Un mercado de capacidad, o forward, es un mercado mayorista de electricidad dise?ado para promover la inversi¨®n econ¨®mica en recursos a largo plazo en donde m¨¢s se necesitan para garantizar el funcionamiento. Para que exista, el Gobierno debe escribir las reglas.

¡°Debe haber tambi¨¦n mejor planeaci¨®n para evitar lo que est¨¢ sucediendo ahora¡±, opina Greenberg, ¡°planear para lo que parecen ser temperaturas extremas ya consistentes las cuales, algunos dir¨ªan, se deben al cambio clim¨¢tico¡±.

Recortes de agua y posibles apagones

A tres horas de la frontera tejana est¨¢ Monterrey, capital del Estado de Nuevo Le¨®n. Los habitantes ah¨ª llevan seis semanas con recortes de agua en los que, en algunas colonias, solo tienen acceso durante un par de horas. Mientras tanto, autoridades federales declararon emergencia por sequ¨ªa en el pa¨ªs, ya que casi siete de cada diez municipios no cuentan con la cantidad de agua que necesitan, de acuerdo con la Comisi¨®n Nacional del Agua (Conagua). Las temperaturas en el norte del pa¨ªs no paran de subir, impulsando el consumo de electricidad.

En mayo, de acuerdo con informaci¨®n recuperada por el diario Reforma, el director general de Cenace, Ricardo Mota, dijo en un foro que el pa¨ªs pudiera sufrir apagones debido al ¡°rezago¡± en la expansi¨®n de la red nacional de transmisi¨®n. El Gobierno del presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador ha pedido, desde 2019, que los reguladores del sector dejen de emitir permisos de operaci¨®n a empresas privadas, lo cual ha limitado la inversi¨®n en la infraestructura. El Gobierno tambi¨¦n ha pasado legislaci¨®n para privilegiar la entrada de las centrales de CFE, en detrimento de las privadas.

El sector m¨¢s afectado en M¨¦xico ha sido el de energ¨ªas renovables, mismas que, ir¨®nicamente, han salvado a Texas de sufrir apagones en lo que va del verano. De acuerdo con un reporte de la revista Texas Monthly, la generaci¨®n de electricidad por paneles solares se duplic¨® este verano en comparaci¨®n con el mismo periodo el a?o pasado, lo que ha llenado los vac¨ªos de la generaci¨®n por gas natural. Este ha sido, a todas luces, el beneficio m¨¢s grande de permitir que los privados instalen su propia tecnolog¨ªa. Esta semana, la agencia Bloomberg report¨® que empresas como Engie, Enel y Acciona Energ¨ªa han sido bloqueadas por reguladores mexicanos e imposibilitadas de operar plantas solares y parques e¨®licos.

CFE busca hacer de la electricidad un mercado cautivo en la que la empresa tiene el monopolio, obligando a todos los consumidores a comprar a la empresa del estado. Pero CFE no puede pagar la cantidad de inversi¨®n que la red de transmisi¨®n requiere para garantizar el suministro.

M¨¦xico produce el 28% del gas natural que consume para producir electricidad. El resto lo importa, mayoritariamente, de Texas, principal productor del combustible en EE UU. Durante la Administraci¨®n federal anterior, M¨¦xico se comprometi¨® a comprar m¨¢s gas natural de lo que puede transportar y utilizar. La idea era que tales contratos ¡°anclaran¡± grandes inversiones privadas de gasoductos, explica Francisco Barn¨¦s, consultor en energ¨ªa, ex funcionario de la Comisi¨®n Reguladora de Energ¨ªa (CRE) y ex rector de la Universidad Aut¨®noma de M¨¦xico (UNAM).

¡°Esta fue la estrategia que se sigui¨® para licitar los ductos que se requieren para traer gas al pa¨ªs y se requiere licitarlos para que tengan la capacidad, no que se requiera a corto plazo, sino la que se requiere por varios a?os por delante¡±, dice Barn¨¦s. Pero el Gobierno de L¨®pez Obrador paraliz¨® las licitaciones y ahora, de acuerdo a un oficio que la Secretar¨ªa de Energ¨ªa (Sener) envi¨® a la CRE y a Cenagas, pretende obligar a las empresas privadas en M¨¦xico a comprar el gas natural que le sobra a CFE y a Pemex.

Esto no es necesario, apunta Barn¨¦s. ¡°Si tienen excedentes de gas comprado en el mercado estadounidense, ese un mercado muy l¨ªquido, los excedentes de gas que adquiri¨® la CFE los puede colocar y vender en los Estados Unidos¡±, explica el especialista, quien tambi¨¦n fue funcionario en Sener.

Inversi¨®n p¨²blica o privada

Tanto Greenberg como Barn¨¦s coinciden en que un sistema el¨¦ctrico que garantiza el suministro solo se puede lograr con una mezcla de participaci¨®n privada y regulaci¨®n. ¡°Siempre los eventos extraordinarios no esperados generan problemas, independientemente de qui¨¦n es el actor con la responsabilidad de responder ante ellos y simplemente no se tiene los elementos suficientes para prever que va a ser un verano extraordinariamente caliente y que requiere una demanda adicional de gas natural¡±, dice Barn¨¦s. La inversi¨®n privada, asegura, suele responder mejor a las necesidades inmediatas, mientras la p¨²blica suele hacer planeaci¨®n de m¨¢s largo plazo.

¡°La mejor opci¨®n es una participaci¨®n de una empresa estatal que tenga una buena planeaci¨®n y financiamiento para instalar oportunamente las grandes centrales del Estado mexicano, que es el que puede asumir esos riesgos de mejor forma ante una planeaci¨®n para el suministro b¨¢sico que representa un porcentaje importante del consumo nacional y por lo tanto est¨¢ a manos de CFE¡±, dice Barn¨¦s. ¡°Y dejar, como se pretend¨ªa, hacer una participaci¨®n creciente de la inversi¨®n privada y que vaya tomando parte del mercado de los grandes consumidores que est¨¢n dispuestos a asumir otros riesgos y otras oportunidades¡±.

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