La reuni¨®n secreta de Caro Quintero para hacerse con el poder en la sierra de Sinaloa

Cinco a?os antes de ser detenido por las fuerzas del Estado mexicano a petici¨®n de la justicia estadounidense, Rafael Caro Quintero cerraba importantes acuerdos en la sierra de Sinaloa para apuntalar su poder. Un documento del Ej¨¦rcito, que figura entre los millones de correos filtrados de la Secretar¨ªa de Defensa a los que ha tenido acceso EL PA?S, revela que mientras el Narco de Narcos estaba pr¨®fugo, la instituci¨®n tuvo constancia de una reuni¨®n clave donde el capo ¡°asumi¨® el control¡± de una organizaci¨®n rival y se hizo due?o y se?or de la codiciada sierra norte. El Ej¨¦rcito registr¨® este y otros movimientos del narco durante los a?os previos a su captura, en julio de este a?o.

En el archivo llamado Reuni¨®n de Caro Quintero en Sinaloa de Leyva y Guasave ¡ªdos municipios de la sierra¡ª se menciona de manera escueta c¨®mo el que fuera uno de los fundadores del grupo de Sinaloa en los ochenta y jefe de Joaqu¨ªn El Chapo Guzm¨¢n, hab¨ªa retomado el poder despu¨¦s de haber quedado libre en 2013 por una escandalosa decisi¨®n judicial. Pese a las dudas de que el viejo narco hab¨ªa esquivado los 12 a?os que le quedaban de condena por el asesinato de un agente de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos para retirarse del negocio criminal, el Ej¨¦rcito ten¨ªa pruebas s¨®lidas de c¨®mo fue aumentando el dominio en su tierra.

En 2017, en un hotel de Bacurato, en el municipio de Sinaloa de Leyva, Caro Quintero ¡°asumi¨® el control de la organizaci¨®n Beltr¨¢n Leyva¡±, se?ala el documento. La alianza del narco con unos de sus rivales hist¨®ricos se produjo en un contexto de luchas de poder tras la extradici¨®n del exl¨ªder del cartel de Sinaloa, El Chapo Guzm¨¢n, donde sus hijos y antiguos colaboradores se disputaban el control del imperio de la droga m¨¢s poderoso del pa¨ªs.

Seg¨²n el informe de la Secretar¨ªa de la Defensa (Sedena), Caro Quintero estableci¨® una alianza con Fausto Isidro Meza Flores, m¨¢s conocido como El Chapo Isidro, el l¨ªder de los Beltr¨¢n Leyva y enemigo ac¨¦rrimo de los de Sinaloa. El Narco de Narcos traicion¨® los acuerdos del cartel que ¨¦l y sus socios fundaron en los ochenta para lograr ampliar su dominio en la zona serrana que colinda con el Estado fronterizo de Chihuahua, una ubicaci¨®n estrat¨¦gica para la siembra de marihuana, amapola, la instalaci¨®n de narcolaboratorios de fentanilo y metanfetamina y el trasiego hacia el norte.

El archivo muestra un organigrama de los dos grupos criminales. Como l¨ªderes del cartel de Sinaloa (o del Pac¨ªfico, como se menciona de forma oficial) aparece la familia Guzm¨¢n ¡ªel hijo, Iv¨¢n Archivaldo, y el hermano de El Chapo, Aureliano, alias El Guano¡ª y el hist¨®rico l¨ªder del grupo que jam¨¢s ha sido detenido, Ismael El Mayo Zambada. En medio, Caro Quintero, que se asoci¨® en esa reuni¨®n con los herederos de los Beltr¨¢n Leyva, donde figuran como l¨ªderes, adem¨¢s de El Chapo Isidro, ?varo Guadalupe Carrillo Fuentes, alias La Lapa; Jes¨²s Gonz¨¢lez Pe?uelas, alias El Chuy Pe?uelas; Ignacio Gonz¨¢lez Pe?uelas y Mario Alberto Lugo Lara, alias Mario El Calabazas. Estos ¨²ltimos controlaban en 2017 la zona serrana de Sinaloa de Leyva.

Tras la captura de Caro Quintero el 15 de julio se supo que el hist¨®rico capo jam¨¢s dej¨® su tierra y no cambi¨® de oficio. Su poder fue aumentando mientras estuvo pr¨®fugo, seg¨²n registr¨® el Ej¨¦rcito mexicano, aunque no lo hizo p¨²blico y su nombre no figuraba entre los capos m¨¢s buscados ni poderosos del pa¨ªs.

Pese al silencio en torno a su figura, en otros documentos de la Sedena se reconoce que la irrupci¨®n del capo tuvo un papel clave en la violencia desatada en esos a?os en Sonora. Por otra parte, la justicia estadounidense segu¨ªa advirtiendo de la capacidad de fuerza que ten¨ªa el nuevo cartel de Caborca que ¨¦l lideraba, y aun as¨ª, fue la sed de venganza de la DEA por el asesinato en 1985 de uno de sus agentes, Kiki Camarena, lo que lo persigui¨® hasta volver a prisi¨®n.

Estados Unidos jam¨¢s perdon¨® (ni olvid¨®) el crimen y presion¨® a las autoridades mexicanas para su recaptura. Lanz¨® la mayor recompensa para un criminal de la historia, de 20 millones de d¨®lares. Y estos d¨ªas espera en una prisi¨®n mexicana de m¨¢xima seguridad la resoluci¨®n definitiva sobre su posible extradici¨®n.

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