¡°S¨²beme al robot que quiero caminar¡±: llega a M¨¦xico el primer exoesqueleto para ni?os con par¨¢lisis cerebral
El ¡®Atlas 2030¡ä, apoyado por la investigaci¨®n p¨²blica espa?ola, permite levantarse y andar a menores con discapacidades motrices
La primera vez que Ximena Barnard se puso de pie ten¨ªa ocho a?os. Hab¨ªa una cosa que le corr¨ªa prisa despu¨¦s de todo ese tiempo en una silla de ruedas. Se enfund¨® el robot rojo y fue directa a comprobar si su gemela, Paulina, quien naci¨® solo un minuto antes que ella, era m¨¢s alta. Se irgui¨®, se coloc¨® al lado y sonri¨®: eran iguales. Ximena ha sido la primera ni?a en Am¨¦rica Latina en probar y utilizar el exoesqueleto Atlas 2030, un dispositivo rob¨®tico desarrollado por la empresa Marsi Bionics en colaboraci¨®n con el Centro Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC) de Espa?a. El ap...
La primera vez que Ximena Barnard se puso de pie ten¨ªa ocho a?os. Hab¨ªa una cosa que le corr¨ªa prisa despu¨¦s de todo ese tiempo en una silla de ruedas. Se enfund¨® el robot rojo y fue directa a comprobar si su gemela, Paulina, quien naci¨® solo un minuto antes que ella, era m¨¢s alta. Se irgui¨®, se coloc¨® al lado y sonri¨®: eran iguales. Ximena ha sido la primera ni?a en Am¨¦rica Latina en probar y utilizar el exoesqueleto Atlas 2030, un dispositivo rob¨®tico desarrollado por la empresa Marsi Bionics en colaboraci¨®n con el Centro Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC) de Espa?a. El aparato acaba de desembarcar en M¨¦xico, su primer destino fuera de Europa, donde a corto plazo va a estar disponible para al menos 200 menores con par¨¢lisis cerebral. Con su llegada, para muchas familias la esperanza empieza ahora.
En la colonia Doctores, hist¨®ricamente una de las zonas m¨¢s inseguras de Ciudad de M¨¦xico, descansa el ¨²nico robot de Latinoam¨¦rica que ayuda a levantarse y a caminar a ni?os con discapacidades motrices. A la fundaci¨®n APAC (Asociaci¨®n Pro Personas con Par¨¢lisis Cerebral) acuden diariamente 500 menores y adultos, pero no todos van a poder utilizarlo. Se puede adaptar para un m¨¢ximo de 35 kilos y la altura que corresponde de dos a 11 a?os. A¨²n as¨ª solo en esta asociaci¨®n ya son dos centenares de pacientes para un ¨²nico aparato. ¡°Se trata de ni?os que solo hab¨ªan estado erguidos con arneses o con sus madres sujet¨¢ndolos por las axilas y ahora con el exoesqueleto pueden interactuar solos, pueden jugar¡±, apunta Guadalupe Maldonado, directora de APAC, que se?ala que la transformaci¨®n en los que ya lo han probado ha sido ¡°m¨¢gica¡±. Una magia creada por la ciencia.
El funcionamiento rob¨®tico del Atlas es ¡°sencillo¡± en palabras de sus creadores, pero ha costado a?os de investigaciones. Tiene ocho motores, colocados en los tobillos, las rodillas y las caderas. Primero, el ni?o se sienta y se le abrochan una serie de fijaciones en las extremidades y en el pecho. Cuando est¨¢ bien sujeto, en la tableta que el robot lleva anexada para poder dirigirlo, se aprieta un solo bot¨®n. La fuerza del exoesqueleto lo levanta inmediatamente.
El robot cuenta con dos modos: el autom¨¢tico, en el que toda la fuerza est¨¢ realizada por el dispositivo y est¨¢ pensado para los pacientes que no tienen o no van a poder desarrollar fuerza muscular; y el modo de ayuda, donde el robot propone un paso y se queda a la mitad, con la rodilla flexionada, y es el ni?o quien debe terminarlo. ¡°Conseguimos que el ni?o haga fuerza como si fuera a un gimnasio. Esa fuerza es en la cadera, en la rodilla derecha o en la izquierda, seg¨²n c¨®mo lo haya configurado el terapeuta. Eso hace que aprenda a caminar¡±, explica Ignacio Barraqu¨¦, cofundador de Marsi Bionics.
El Atlas 2030 ha llevado a su creadora, la investigadora espa?ola Elena Garc¨ªa Armada, a ganar el prestigioso premio a Inventor Europeo del 2022, concedido por la Organizaci¨®n Europea de Patentes a las creaciones m¨¢s importantes del a?o. Garc¨ªa Armada, que trabaja en el CSIC, empez¨® con este proyecto a petici¨®n de la familia de Daniela, quien tras tener un accidente hab¨ªa dejado de poder caminar. ¡°En esos momentos hab¨ªa exoesqueletos para adultos, pero ninguno de los fabricantes ten¨ªa en sus planes de negocio abordar el sector pedi¨¢trico¡±, explica la investigadora en una videollamada con EL PA?S. Tardaron tres a?os en lograr el primer prototipo.
En el mundo hay 17 millones de ni?os que no pueden caminar. La gran barrera tecnol¨®gica del equipo de Garc¨ªa Armada fue lograr que el robot pudiera adaptarse a la mayor¨ªa de ellos. ¡°Lo que ha supuesto la diferencia entre nuestro exoesqueleto y los dem¨¢s no es el hecho de hacerlo peque?o, sino la adaptabilidad de la tecnolog¨ªa de las articulaciones, con elasticidad inherente para adaptarse a estos ni?os que tienen una sintomatolog¨ªa tan compleja y variable¡±, apunta la doctora, en relaci¨®n a que este dispositivo se pueden utilizar en los dos extremos de la discapacidad motriz: la falta de fuerza muscular de las enfemedades neuromusculares hasta la rigidez, la espaticidad, de las par¨¢lisis cerebrales.
Los pacientes que van a usarlo en M¨¦xico son pr¨¢cticamente todos de esta segunda categor¨ªa. Valeria Baeza lleva seis a?os en silla de ruedas: apenas tiene movilidad en las piernas ni en su brazo derecho. Llega con gafas rosas, mo?o rosa y una sonrisa gigante a saludar a Ximena, montada en el exoesqueleto. A ella le toc¨® probarlo hace dos d¨ªas y se puso a bailar. Hoy deja que Ximena sea quien empuje su silla. ¡°La primera reacci¨®n cuando lo prob¨® fueron unas carcajadas enormes. Estaba fascinada¡±, cuenta su madre, Alejandra Mohedano. ¡°Al d¨ªa siguiente me dec¨ªa: ¡®S¨²beme al robot porque ya quiero caminar¡¯. El hecho de sentir que estaba de pie la motiv¨® por completo¡±, apunta.
Los beneficios cl¨ªnicos del exoesqueleto est¨¢n comprobados: ayuda a mejorar la postura, la respiraci¨®n y el aparato digestivo. Tambi¨¦n permite desarrollar masa muscular y, lo m¨¢s importante, mejorar la neuroplasticidad del cerebro. ¡°La mayor¨ªa de estos ni?os tienen alg¨²n tipo de da?o neurol¨®gico que requiere una rehabilitaci¨®n que va m¨¢s all¨¢ de lo f¨ªsico. Para que estas conexiones cerebrales se produzcan es necesario la movilidad, un movimiento repetido e intenso, pero que tiene que estar conectado con la motivaci¨®n. El paciente tiene que estar poniendo toda su intenci¨®n en lo que est¨¢ haciendo para que consiga realizar cambios en el cerebro¡±, explica con detalle la doctora Garc¨ªa Armada.
El cambio de actitud es la parte que m¨¢s valoran las familias. Violeta Aguilar, madre de Ximena, cuenta que ella es una ni?a retra¨ªda y t¨ªmida, casi siempre recogida sobre su silla de ruedas, y que parece otra al subirse al exoesqueleto. ¡°Hoy ten¨ªa muchas ganas de venir porque me dec¨ªa que le tocaba caminar con el robot¡±, cuenta Aguilar, ¡°esto le ha dado otro enfoque a su vida diaria¡±.
La mayor¨ªa de la responsabilidad de estos pacientes con par¨¢lisis cerebral recae sobre mujeres; madres, hermanas y abuelas que, como Aguilar, se cruzan cada d¨ªa la ciudad en un viaje de casi dos horas de ida y dos de vuelta para llevar a sus hijos a las terapias de APAC, uno de los pocos lugares en M¨¦xico que tiene una atenci¨®n integral a la discapacidad. Hay d¨ªas que no comen porque no tienen tiempo y pasan las horas vigilando en banquitos mientras los m¨¦dicos y enfermeras tratan a sus hijos. ¡°Ahora es un sue?o verla as¨ª, verla caminar, aunque sea con apoyo. Es un triunfo. Levantarte con cansancio, el desvelo, las inclemencias, pero dices: ¡®Todo eso ha valido la pena¡±, dice Aguilar mientras su hija juega con una enorme pelota verde rodeada de fisioterapeutas.
Aunque el escenario es esperanzador, el director de rehabilitaci¨®n de APAC, H¨¦ctor Bola?os, pone los pies en el suelo. Las mejoras de las primeras sesiones est¨¢n garantizadas pero el lugar del exoesqueleto no debe estar en una sala de pruebas. ¡°El ideal es que est¨¦ en la escuela, en su sal¨®n, donde est¨¦n sus amigos, para que ella pueda encontrarle un sentido al uso. Porque sino la euforia va a pasar, en breve. Necesita encontrar m¨¢s retos¡±, razona Bola?os. La investigadora Garc¨ªa Armada reconoce que esas son las pr¨®ximas evoluciones tecnol¨®gicas del aparato. El primer escal¨®n era el entorno controlado, despu¨¦s llega lograr que se pueda utilizar en las casas y colegios de los menores.
De momento solo hay cuatro Atlas 2030 en funcionamiento. El de M¨¦xico es el cuarto, despu¨¦s de Espa?a e Italia. Hasta ahora, la empresa solo ten¨ªa capacidad para fabricar un aparato al mes. Los 12 de este 2022 est¨¢n colocados, la mayor¨ªa se quedan en la Comunidad de Madrid. Han aumentado el equipo para duplicar la producci¨®n y que pueda haber 24 al a?o que viene. Que de esa cantidad m¨ªnimo uno haya aterrizado a M¨¦xico ha sido ¡°un sue?o com¨²n¡± muy costoso, explica Guadalupe Maldonado.
La directora de APAC explica que han tenido que convencer y recurrir a un gran n¨²mero de empresas y fundaciones ¡ªentre las que se encuentran gigantes como Santander o Coca-Cola¡ª para reunir los cinco millones de pesos (unos 200.000 d¨®lares) que costaba traer el exoesqueleto a Ciudad de M¨¦xico. Al ver los primeros resultador ya han logrado que una fundaci¨®n ¡ªde la que omite el nombre¡ª compre el segundo aparato. Ese va a estar destinado principalmente a la investigaci¨®n: se va a utilizar con un grupo de control de ni?os en la Universidad Anahu¨¢c y la UNAM para observar las mejoras en movilidad y neuroplasticidad. Pero Maldonado ya piensa en el tercer dispositivo. Tambi¨¦n las madres de estos ni?os: ¡°Tener al alcance de una familia, como nosotros con muy pocas posibilidades econ¨®micas, un robot as¨ª lo cambia todo¡±, dice Alejandra Mohedano, ¡°es fundamental que ellos cuenten con este tipo de herramientas, porque nosostros no vamos a ser eternos toda la vida. Yo quiero que mi hija sea lo m¨¢s independiente posible, quiero prepararla para ese momento¡±.
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