Las inconsistencias del informe presidencial del ¡®caso Ayotzinapa¡¯ elevan la presi¨®n sobre el grupo internacional de expertos

Reh¨¦n de brutales tensiones pol¨ªticas, la investigaci¨®n por el caso Ayotzinapa avanza entre sospechas y suspicacias. La validez de un paquete de pruebas presentado hace dos meses y medio por la comisi¨®n presidencial que ayuda en las pesquisas est¨¢ en entredicho. El grupo internacional de expertos que apoya en el caso, el GIEI, ha dedicado las ¨²ltimas semanas a analizar estas evidencias. Sus conclusiones y la postura que adopte al respecto el grupo, que este lunes comparece ante los medios, marcan el futuro del proceso.

Ha sido otra semana accidentada para el caso Ayotzinapa, como pr¨¢cticamente todas desde mediados de agosto, una espiral acelerada de novedades, intrigas y renuncias, que se llev¨® por delante al fiscal del caso, Omar G¨®mez Trejo, y meti¨® en prisi¨®n a dos personajes importantes. Por un lado, la Fiscal¨ªa detuvo al exprocurador, Jes¨²s Murillo, primer encargado de las pesquisas durante el Gobierno de Enrique Pe?a Nieto (2012-2018). Por otro, la dependencia aprehendi¨® a un general del Ej¨¦rcito, Jos¨¦ Rodr¨ªguez, por su presunta colaboraci¨®n con el grupo criminal que perpetr¨®, junto a diferentes autoridades, el ataque contra los estudiantes, Guerreros Unidos.

Ahora, la atenci¨®n est¨¢ puesta en las pruebas de la comisi¨®n, concretamente en m¨¢s de 400 capturas de pantalla que su encargado, Alejandro Encinas, present¨® a mediados de agosto, como parte del informe de la dependencia sobre el caso. Tanto el GIEI como los abogados de las familias de los 43 estudiantes desaparecidos se?alaron que reci¨¦n se hab¨ªan enterado de la existencia de los pantallazos y que era necesario cotejar su autenticidad. La manera de informar sobre las capturas abri¨® la primera brecha seria en la confianza construida estos a?os entre los diferentes actores que investigan el caso, la comisi¨®n, por un lado, y el GIEI y la unidad especial de la Fiscal¨ªa, por otro.

Las capturas, que recogen supuestos intercambios de mensajes de la red criminal de Iguala durante el ataque y en los d¨ªas posteriores, dibujan el posible destino de los estudiantes y el involucramiento de militares de alto rango en el ataque y la desaparici¨®n de los muchachos. El problema es que quiz¨¢ sean pruebas parcial o totalmente falsas, como el mismo Encinas sugiri¨® esta semana, en una entrevista con The New York Times. El funcionario neg¨® despu¨¦s que hubiera dicho tal cosa y se?al¨® que las capturas son solo parte de una voluminosa bater¨ªa de evidencias, suficientes para sostener su versi¨®n de los hechos, relato todav¨ªa en construcci¨®n.

La sospecha, en todo caso, es que buena parte de las capturas no ha aguantado el peritaje. Fuentes cercanas al caso han confirmado a EL PA?S que las inconsistencias son varias. ¡°Primero, Guerreros Unidos usaba principalmente Blackberry y no WhatsApp, como muestra el seguimiento de la DEA al grupo¡±, dice una de las fuentes consultadas, en referencia al sistema de mensajer¨ªa predominante en las capturas de pantalla. ¡°Luego la interfaz del mismo WhatsApp. En algunos casos no coincide la forma en que se ve¨ªa Whatsapp en 2014 y los pantallazos¡±. Por ¨²ltimo, est¨¢ la manera en que se expresan los presuntos criminales, diferente de los modos que muestran los chats de la DEA.

Actor neutral

La postura y la posici¨®n que adopte el GIEI parece ahora m¨¢s relevante que nunca, al menos en la actual Administraci¨®n. Depositarios de la confianza de las familias de los 43, empuje de las investigaciones en tiempos de Pe?a Nieto, azote de Murillo y su Fiscal¨ªa en esos a?os, el grupo de expertos, integrado por Carlos Beristain, Claudia Paz, Francisco Cox y ?ngela Buitrago, son el ¨²nico actor neutral en torno al caso. La salida de G¨®mez Trejo por las presiones del fiscal general, Alejandro Gertz, y la llegada a la unidad de un hombre de confianza de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador alimentan la suspicacia de las familias de los estudiantes.

En una reuni¨®n mantenida esta semana con las familias, integrantes del GIEI les han explicado que dentro del grupo existen actualmente diferentes ¡°visiones¡± del papel que deben jugar. El affaire de las capturas de pantalla molest¨® a los expertos, que hasta entonces hab¨ªan compartido toda la informaci¨®n con la comisi¨®n y viceversa, antes de ponerla en conocimiento del p¨²blico. Las presiones a G¨®mez Trejo, la cancelaci¨®n de dos decenas de ¨®rdenes de detenci¨®n que ¨¦l y su equipo obtuvieron de un juez y la salida del fiscal ampliaron la molestia.

El mandato del grupo concluye este lunes, aunque ya tienen sobre la mesa la posibilidad de extenderlo hasta diciembre. La mitad del grupo apuesta por seguir, pese a la sospecha de que su papel, importante con G¨®mez Trejo, se ver¨ªa limitado con el nuevo fiscal, Rosendo G¨®mez Piedra. La otra mitad no lo ve tan claro. El martes, el GIEI se reuni¨® con G¨®mez Piedra en la sede de la Fiscal¨ªa, uno de los primeros encuentros con el nuevo fiscal. Fuentes conocedoras de lo que se dijo en la junta se?alan que el fiscal apenas est¨¢ empezando a conocer el caso, armado por su antecesor durante los ¨²ltimos tres a?os y medio.

M¨¢s all¨¢ de construir una relaci¨®n fruct¨ªfera con el fiscal, en el tintero quedan preguntas que apuntan a los ¨²ltimos meses, caso por ejemplo de las ¨®rdenes de detenci¨®n que pidi¨® G¨®mez Trejo y que la Fiscal¨ªa de Gertz orden¨® cancelar. Un mes despu¨¦s de este movimiento, la agencia investigadora no ha dado una sola explicaci¨®n. Quien s¨ª lo ha hecho ha sido L¨®pez Obrador, que ha denunciado intentos de desestabilizaci¨®n desde dentro de la Fiscal¨ªa, sin se?alar a nadie.

Las palabras del presidente esta semana, que criticaba que la unidad del caso Ayotzinapa no se hubiera plegado al contenido del informe, han resultado sorprendentes, por el grado de intromisi¨®n que sugieren en el actuar de la Fiscal¨ªa en el caso Ayotzinapa. No es que L¨®pez Obrador exigiera cancelar orden alguna, pero su confianza en Encinas, su trabajo y el informe, impresi¨®n trasladada al mismo Gertz ante la presentaci¨®n del informe en agosto, como el mandatario dijo el jueves, catalizaron todo movimiento posterior, incluyendo la cancelaci¨®n de las ¨®rdenes.

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