El juicio contra Garc¨ªa Luna se enciende en la recta final: ¡°La corrupci¨®n lleg¨® hasta los niveles m¨¢s altos¡±
La Fiscal¨ªa explica por qu¨¦ construy¨® el caso a partir de las declaraciones de antiguos narcotraficantes: ¡°Se necesita un criminal para conocer a otro¡±. La defensa cuestiona la falta de pruebas f¨ªsicas: ¡°?D¨®nde est¨¢n las evidencias?¡±
Durante poco m¨¢s de seis horas, Genaro Garc¨ªa Luna fue ¨¢ngel y demonio. La Fiscal¨ªa lo present¨® como un criminal, un hombre que escal¨® hasta las m¨¢s altas esferas del Gobierno mexicano y se benefici¨® durante a?os de sobornos millonarios del Cartel de Sinaloa. A los ojos de la defensa, sin embargo, su cliente era un funcionario ejemplar, que sacrific¨® todo por su pa¨ªs como el rostro de la guerra contra las drogas. Esos son los dos extremos que se presentaron este mi¨¦rcoles en la recta final del juicio por narcotr¨¢fico que enfrenta el exsecretario de Seguridad P¨²blica en Estados Unidos. La Fiscal¨ªa y la defensa chocaron por ¨²ltima vez en la corte de Brooklyn para presentar sus conclusiones ante el jurado en los argumentos de cierre. ¡°Damas y caballeros, lo tienen que creer, la corrupci¨®n lleg¨® hasta los niveles m¨¢s altos¡±, afirm¨® la fiscal adjunta Saritha Komatireddy, ¡°solo existe una posibilidad: Genaro Garc¨ªa Luna tom¨® los sobornos¡±. ¡°?D¨®nde est¨¢n las evidencias?¡±, rebati¨® C¨¦sar de Castro, el abogado principal del acusado. Doce ciudadanos de Nueva York decidir¨¢n qui¨¦n tiene la raz¨®n y lo declarar¨¢n culpable o inocente en los pr¨®ximos d¨ªas.
Los abogados de ambas partes presentaron su mejor rostro ante 12 desconocidos. Fueron simp¨¢ticos, explicaron todo con peras y manzanas, trataron de ser lo m¨¢s encantadores que pudieron. Casi todo vale para convencer al jurado: mirar con sarcasmo cuando los rivales hacen sus argumentos m¨¢s importantes, bostezar cuando hablan demasiado tiempo, negar con la cabeza a sus espaldas. De eso se tratan los argumentos de cierre. El ¨²nico objetivo de la Fiscal¨ªa es probar su caso y eliminar cualquier rastro de duda en los jurados que el acusado es culpable. Los abogados de Garc¨ªa Luna tienen que hacerles creer lo contrario. ¡°Este caso se arm¨® durante m¨¢s de una d¨¦cada, tom¨® tiempo unir las piezas¡±, dijo Komatireddy, ¡°pero las piezas encajan, todo encaja¡±, agreg¨®. ¡°Es imposible que el cartel se hubiera expandido como lo hizo sin el apoyo del Gobierno mexicano¡±, remat¨®. En alg¨²n punto de su exposici¨®n se?al¨® en un mapa todos los Estados donde creci¨® la facci¨®n de Joaqu¨ªn El Chapo Guzm¨¢n. Sonora, Sinaloa, Durango, Chihuahua, enlist¨® la abogada con marcado acento estadounidense.
En el juego de estrategias, la batalla m¨¢s urgente para la Fiscal¨ªa era desbaratar el argumento de la defensa de que no existen pruebas f¨ªsicas contra su cliente. ¡°No hay videos, no hay fotograf¨ªas, no hay grabaciones, no hay correos¡±, insisti¨® De Castro. Los argumentos de cierre fueron una oportunidad para que los fiscales pudieran responder y zanjar que nadie sabe m¨¢s de un delincuente que sus c¨®mplices. ¡°Se necesita a un criminal para conocer otro¡±, dijo Komatireddy.
La abogada explic¨® con paciencia c¨®mo se un¨ªan todos los puntos y por qu¨¦ las autoridades llamaron a declarar a hombres como Sergio Villarreal El Grande, Oscar Nava Valencia El Lobo o Jes¨²s El Rey Zambada. ¡°Era como tener a un profesor del Cartel de Sinaloa¡±, dijo Komatireddy sobre El Grande, el primer testigo que tom¨® el estrado. ¡°Podr¨ªa usar una chamarra con parches en los codos¡±, apunt¨®. ¡°Les dio todos los detalles¡±, coment¨® emocionada. ¡°Les dijo c¨®mo pag¨® dinero a autoridades de todos los niveles¡±, relat¨®. ¡°Se los dijo El Lobo¡±. ¡°El Rey les dijo lo mismo¡±. ¡°?Se acuerdan de su testimonio el pasado lunes?¡±.
La fiscal opt¨® por ser did¨¢ctica: puso un tablero titulado Estados Unidos contra Garc¨ªa Luna, coloc¨® las fotos de los narcos implicados, proyect¨® una presentaci¨®n de Power Point y pas¨® una por una las diapositivas. ¡°Tuvimos aqu¨ª tambi¨¦n a ?dgar Veytia y H¨¦ctor Villarreal¡±, dijo sobre los testimonios del exfiscal de Nayarit y el extesorero de Coahuila, que se declararon culpables en Estados Unidos. ¡°Contaron todo sobre c¨®mo funciona la corrupci¨®n en M¨¦xico¡±, sigui¨®. ¡°Estos tipos son como los FedEx de la coca¨ªna, usan trenes, barcos, submarinos¡±, se?al¨® sobre hombres como Harold Poveda El Conejo o Tirso Molina El Futbolista. Todo se tiene que poner en los t¨¦rminos m¨¢s sencillos y directos. ¡°Cr¨¦anles, son los ¨²nicos que pueden se?alar a los polic¨ªas corruptos que los ayudaron¡±.
¡°Tiene sentido, ten¨ªan confianza, ten¨ªan una amistad¡±, dijo Komatireddy sobre los v¨ªnculos de Garc¨ªa Luna con Arturo Beltr¨¢n Leyva, uno de los capos m¨¢s temidos de M¨¦xico, abatido en 2009. ¡°Es evidencia espec¨ªfica, ellos pagaron o vieron como se entregaron los sobornos, lo podr¨ªan condenar con eso, pero sigamos¡±, insisti¨®. La fiscal desglos¨® todo otra vez: por qu¨¦ le dec¨ªan Metralleta o Tartamudo al acusado aludiendo sus problemas del habla; c¨®mo los capos declararon que ten¨ªan uniformes, patrullas y credenciales de las corporaciones dirigidas por el exfuncionario; d¨®nde eran las reuniones secretas que denunciaron los cooperantes, y c¨®mo hombres que no se conoc¨ªan o no se hab¨ªan visto ni hablado en a?os, a veces viejos enemigos, dieron testimonios que apuntaban en la misma direcci¨®n: que Garc¨ªa Luna lo hizo.
¡°Cabr¨®n, no te preocupes, todo est¨¢ arreglado¡±, dijo Komatireddy en espa?ol al parafrasear las declaraciones de El Conejo y despu¨¦s se disculp¨® por las malas palabras. En el camino, la fiscal hizo varias afirmaciones lejos del lenguaje diplom¨¢tico que pesa en las relaciones diplom¨¢ticas entre M¨¦xico y Estados Unidos. ¡°Cuando uno habla de M¨¦xico hay que decir que es f¨¢cil lavar dinero¡±, coment¨®. ¡°No pod¨ªan confiar en sus contrapartes¡±, coment¨® sobre lo que cont¨® el exembajador estadounidense Anthony Wayne.
¡°El gran problema que tiene la Fiscal¨ªa es que no puede demostrar estas acusaciones. Ellos tienen que probarlas, nosotros no¡±, respondi¨® De Castro. ¡°Les dicen que es dif¨ªcil obtener evidencias de M¨¦xico, son excusas¡±, dijo como si estuviera hablando con los jurados mientras se tomaba un caf¨¦. ?l no se apoy¨® tanto en lo que proyectaba en la pantalla, apost¨® m¨¢s por las preguntas ret¨®ricas y los paseos frente al jurado para no perder su atenci¨®n. ¡°No caigan, no caigan, no caigan en lo que les est¨¢n diciendo¡±, les pidi¨® a los ciudadanos. ¡°?Hay videos? No¡±. ¡°El Grande dijo que Beltr¨¢n Leyva grababa sus reuniones, ?d¨®nde est¨¢n las grabaciones?¡±. ¡°?Pagos? No les ense?aron nada de eso¡±.
El abogado defensor dispar¨® las preguntas una tras otra. ¡°?Encontraron las evidencias? No, es la historia de este caso¡±, cuestion¨® De Castro. ¡°Este hombre era famoso no solo por su posici¨®n, fue el rostro de la guerra contra el narcotr¨¢fico¡±, elogi¨® a su cliente. La defensa tampoco tuvo miedo de exagerar: ¡°Fue un funcionario clave del Gobierno de Felipe Calder¨®n, su cargo equival¨ªa al del vicepresidente en Estados Unidos¡±. ¡°Y era un hombre de familia, con una gran familia extendida, ?vieron algo en esas fotos que les gritara ¡®narcotraficante¡¯?¡±.
El litigante tambi¨¦n carg¨® con la credibilidad de los testigos, como lo hizo en los contrainterrogatorios. ¡°?Confiar¨ªan en la palabra de estos asesinos, secuestradores y delincuentes para elegir la escuela de sus hijos?¡±. Nueva pregunta ret¨®rica. ¡°?Para tomar cualquier decisi¨®n importante en su vida?¡±. De Castro tambi¨¦n justific¨® la decisi¨®n de su cliente de no declarar en el juicio. ¡°?l no tiene que probar su inocencia, aunque probablemente muchos de ustedes quer¨ªan escucharlo de ¨¦l¡±, concedi¨® por un momento. ¡°Pero s¨ª lo hizo¡±, dijo como met¨¢fora a que ¨¦l y su equipo hablaron por ¨¦l. ¡°Y les est¨¢ diciendo ¡®no soy culpable¡±.
Komatireddy tuvo momentos de complicidad y obtuvo sonrisas de varios miembros del jurado. De Castro, tambi¨¦n. Varios integrantes asintieron mientras resum¨ªa sus conclusiones. Como en las pel¨ªculas, la audiencia fue una puesta en escena.
Al final de los argumentos de cierre de la defensa, la Fiscal¨ªa hizo v¨¢lido el derecho de responder. Fueron ellos quienes tuvieron la ¨²ltima palabra. Erin Reid, la fiscal adjunta m¨¢s experimentada, refut¨® una vez m¨¢s el cuestionamiento de basar el caso en las declaraciones de testigos. ¡°Seamos muy claros, nos encantar¨ªa llamar a declarar en este juicio a maestros de escuela¡±, dijo la abogada antes de hacer una pausa, ¡°pero los maestros de escuela no encabezan organizaciones criminales¡±.
¡°As¨ª funciona la corrupci¨®n en los niveles m¨¢s altos, se hace en secreto y se paga en efectivo¡±, zanj¨® Reid. La fiscal tambi¨¦n cuestion¨® que se presentara al acusado como ¡°el hombre m¨¢s desafortunado del mundo¡±, ¡°el enemigo n¨²mero uno de los carteles¡± y que todo es producto de una ¡°revancha¡± de los criminales. ¡°No es verdad, simplemente verdad¡±, afirm¨®. ¡°Fue un esp¨ªa¡±.
¡°Todas estas detenciones fueron en Estados Unidos o posibles por informaci¨®n que proporcion¨® Estados Unidos¡±, asegur¨® Reid sobre los arrestos de los cooperantes del juicio. Sobre la declaraci¨®n de Cristina Pereyra, esposa del exsecretario, como ¨²nica testigo de la defensa, dijo que fue ¡°una clase magistral¡± de c¨®mo los pol¨ªticos esconden su patrimonio. ¡°No import¨® para nada, fue solo un show¡±.
Est¨¢ previsto que el jurado reciba este jueves las instrucciones del juez de c¨®mo tienen que llenar la hoja de veredictos. Los integrantes tienen que llegar a una decisi¨®n un¨¢nime para declarar culpable o no de cada uno de los cinco delitos que se imputan al exsecretario: tres por tr¨¢fico de coca¨ªna, uno por delincuencia organizada y otro por falsedad de declaraciones. Pueden decir, por ejemplo, que es culpable de unos, pero absolverlo de otros, pero todos tienen que estar de acuerdo. Tambi¨¦n deben decidir sobre una moci¨®n de la defensa que pide que se retire el cargo por delincuencia organizada bajo el argumento de que Garc¨ªa Luna dej¨® de cooperar con el Cartel de Sinaloa cuando dej¨® el Gobierno en 2012, sin que eso signifique que acepte haber pertenecido al cartel. Es muy probable que sea la ¨²ltima audiencia antes de dar paso a las deliberaciones del jurado para llegar al veredicto.
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