Rom¨¢n Meyer Falc¨®n: ¡°El 75% de los municipios no ha actualizado sus planes de desarrollo urbano¡±

Las personas que se mueven en las calles de M¨¦xico se juegan la vida cada d¨ªa. Ya sea que lo hagan a pie, en bicicleta, en transporte p¨²blico, motocicleta o autom¨®vil particular, los accidentes relacionados con la movilidad de las personas son un problema diario que en 2021 se tradujo en m¨¢s de 340.000 accidentes, m¨¢s de 60.000 lesionados y casi 4.000 fallecimientos, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estad¨ªstica y Geograf¨ªa (INEGI). Con esa premisa, hace casi un a?o entr¨® en vigor la Ley de Movilidad y Seguridad Vial a nivel nacional, que busca que los mexicanos puedan transitar libremente y de modo seguro por las calles del pa¨ªs. ¡°El objetivo de esta ley es salvar vidas¡±, dice en entrevista Rom¨¢n Meyer Falc¨®n, arquitecto y titular de la Secretar¨ªa de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), uno de los encargados de impulsar esta legislaci¨®n. ¡°Pero para poder reducir las fatalidades viales en las ciudades, se requiere toda una estrategia que sume los gobiernos municipales, los gobiernos estatales y el Gobierno federal¡±, detalla.

Para grandes metr¨®polis como Ciudad de M¨¦xico, Guadalajara o Monterrey, existen normativas locales que regulan el tr¨¢nsito de los veh¨ªculos motorizados y el transporte p¨²blico, pero en ciudades con menor densidad de poblaci¨®n no existe, en el mayor de los casos, ni un solo reglamento. Seg¨²n el diagn¨®stico elaborado por la Sedatu, de los 32 Estados de M¨¦xico, solo 19 cuentan con alguna ley de movilidad y solo cuatro han manifestado esfuerzos por acoplarse con la nueva ley.

Desde el piso 19 de la Sedatu, Meyer Falc¨®n observa el pesado tr¨¢nsito de la hora pico en la c¨¦ntrica colonia Condesa, donde se encuentran las oficinas centrales de la dependencia. Si se observa el panorama de movilidad a un nivel a¨²n m¨¢s dom¨¦stico, el diagn¨®stico es a¨²n m¨¢s complejo. ¡°El 75% de los municipios a nivel nacional no tienen actualizados sus programas de desarrollo urbano municipales, que es la base de todo¡±, refiere el funcionario.

A nivel regional, los ejemplos de legislaci¨®n en materia de movilidad no solo toman en cuenta a los autom¨®viles, sino que se enfocan en todas las maneras en que una persona hace sus traslados diarios. Desde pasos peatonales iluminados, carriles de bicicleta, paradas de autobuses o que las calles por donde todos circulan est¨¦n niveladas son tan solo algunos de los pormenores que se busca mejorar.

¡°Las cuestiones de dise?o del espacio p¨²blico es una cuesti¨®n en su gran mayor¨ªa de competencia local y lo que buscamos es sumar a los Estados y municipios en hacer incluyente la ejecuci¨®n de los espacios y la conexi¨®n de cada uno de sus sistemas de transporte¡±, comenta.

Peatones, mujeres y personas discapacitadas primero

Hist¨®ricamente, los modelos de movilidad en M¨¦xico siempre hab¨ªan estado enfocados a mejorar la movilidad de los usuarios de transporte p¨²blico y autom¨®vil, un enfoque que deja fuera a buena parte de la poblaci¨®n que requiere de transitar por las calles. Ya sea para ir a estudiar, llevar a los ni?os a sus escuelas, trasladarse al trabajo o simplemente de paseo.

En ese sentido, asegurar que los traslados de los grupos m¨¢s vulnerables es uno de los focos que m¨¢s atenci¨®n han llamado de esta nueva ley nacional. Por un lado, aunque las mujeres hacen m¨¢s de 800.000 viajes diarios tan solo en Ciudad de M¨¦xico, m¨¢s de la mitad lo hacen a pie y menos del 20% prefiere otro medio de transporte como bicicleta o incluso en autom¨®vil.

Ante un trayecto corto, las mujeres prefieren caminar, sobre todo si es de d¨ªa, para evitar situaciones de acoso o de plano, dejar de lado sus actividades. Seg¨²n el Instituto Nacional de las Mujeres en el pa¨ªs, el 76% de las usuarias de transporte han vivido situaciones de acoso o violencia, mientras que el 40% se ha sentido el peligro cuando camina por la calle.

Para el arquitecto Meyer, una de las claves para superar estas violencias y empezar a incluir a las mujeres, a personas discapacitadas y a otros grupos vulnerables, empieza con la infraestructura. ¡°Poder asegurar que las paradas del transporte p¨²blico hacia donde la gente cruza la calle est¨¦n bien iluminados, con se?alizaci¨®n, reductores de velocidad, etc¨¦tera¡±, detalla.

Para que esto suceda, el 75% de los municipios que no han actualizado sus planes de desarrollo urbano deben de ponerse al corriente para poder realizar las construcciones pertinentes o las prohibiciones necesarias para mejorar el flujo de personas.

Adicionalmente, para que la reci¨¦n aprobada Ley de Movilidad pueda tener efectos positivos en la sociedad, se propone que los tres niveles de Gobierno creen presupuestos espec¨ªficos para movilidad y transporte p¨²blico. La Sedatu hasta el momento ha organizado dos foros regionales en el noroeste y suroeste del pa¨ªs para tratar de coordinar esfuerzos con las autoridades locales.

Al exterior de la Sedatu hay m¨²ltiples opciones para moverse: pasos peatonales, bicicleta p¨²blica y estaciones de Metrob¨²s, pero es solo el retrato de una ciudad con alta densidad de infraestructura. Meyer reconoce que para que todos tengan mejores condiciones de movilidad, las opciones tienen que llegar a m¨¢s ciudades. ¡°Todos nos movemos: en transporte p¨²blico, caminando o como sea, por eso queremos con esta Ley que sea la forma m¨¢s segura para nosotros, para nuestras familias, para nuestros hijos y que se pueda hacer de forma eficiente y sin perder tiempo y de modo sustentable¡±, reflexiona, mientras abajo, cientos de personas buscan el modo m¨¢s sencillo de regresar a sus casas tras una jornada de trabajo.

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