El d¨ªa que 94 opositores demostraron a Ortega que ser nicarag¨¹ense va m¨¢s all¨¢ de lo que diga un papel
El r¨¦gimen sandinista despoj¨® de la nacionalidad a decenas de disidentes y cr¨ªticos, pero jam¨¢s pudo sacarles de dentro su anhelo de lucha por un pa¨ªs m¨¢s justo y libre
Han pasado 100 d¨ªas desde que el dictador Daniel Ortega les retirara la nacionalidad nicarag¨¹ense a 94 opositores, disidentes o cr¨ªticos del gobierno, a quienes consider¨® traidores de la patria y pr¨®fugos de la justicia. Medida desesperada de un autoritario sin l¨ªmites, la medida fue atajada con dignidad por los ¡°ap¨¢tridas¡± de papel, pero nicarag¨¹enses de sangre, memoria y futuro. El escritor Sergio Ram¨ªrez, Premio Cervantes 2017, tuite¨®: ¡°Nicaragua es lo que soy y todo lo que tengo, y que nunca voy a dejar de ser, ni dejar de tener, mi memoria y mis recuerdos, mi lengua y mi escritura, mi lucha por su libertad por la que he empe?ado mi palabra. Mientras m¨¢s Nicaragua me quitan, m¨¢s Nicaragua tengo¡±. La poeta Gioconda Belli rompi¨® su pasaporte en una entrevista en vivo, como muestra de que un reconocimiento oficial de nacionalidad no es lo que la hace nicarag¨¹ense. ¡°Yo no soy este documento, yo soy Gioconda Belli, soy una poeta nicarag¨¹ense y cuando la historia haya olvidado a estos tiranos (Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo) yo todav¨ªa voy a estar en mis libros como poeta nicarag¨¹ense¡±, dijo al cortar una hoja de su pasaporte.
Este nuevo embate de Daniel Ortega ¨Dexguerrillero sandinista y presidente de Nicaragua de 2007 a la fecha¨D contra las voces cr¨ªticas se suma a la represi¨®n ejercida desde 2018, cuando estallaron protestas ciudadanas masivas en el pa¨ªs que recibieron como respuesta del r¨¦gimen el asesinato de m¨¢s de 360 manifestantes ¨Dmuchos de ellos estudiantes¨D, la persecuci¨®n de los presuntos l¨ªderes de las movilizaciones, destierros, despojos, amenazas e intimidaci¨®n contra l¨ªderes campesinos y otros activistas, que los orill¨® a exiliarse en Costa Rica, pa¨ªs considerado epicentro del exilio nicarag¨¹ense.
Otra de las personas a las que le retiraron la nacionalidad nicarag¨¹ense es la lideresa campesina Francisca Ram¨ªrez, exiliada justamente en Costa Rica por la intimidaci¨®n que sufrieron ella y su familia, luego de oponerse por a?os a entregar sus tierras al magnate chino Wang Jing para que desarrollara el proyecto del Gran Canal Interoce¨¢nico de Nicaragua. La Chica Ram¨ªrez, como le llaman cari?osamente, se vio obligada a emigrar en septiembre de 2018 con 41 miembros de su familia por su seguridad, por lo que en La Fonseca, Nueva Guinea ¨Dsu pueblo natal¨D ya solo le quedaba su casa, que ahora fue confiscada por el gobierno con la decisi¨®n de Ortega de expatriarlos.
100 d¨ªas despu¨¦s hablo con ella, me muestra las dos caras de esta desaparici¨®n forzada de papeles que le ha impuesto Ortega. ¡±Nuestros bienes ya est¨¢n en manos del Estado. Ellos siguen quit¨¢ndole a la gente, nadie puede oponerse, ya no aparecemos en los registros de la propiedad, tampoco aparecemos en las partidas, o sea, ya no tenemos nacimiento. Ya no hay nada que nosotros aparezcamos, que somos nacidos en nuestros pueblos. Demostramos que tenemos nuestra c¨¦dula nicarag¨¹ense, nuestros pasaportes; que ¨¦ramos nicarag¨¹enses, y que una sola persona tom¨® la decisi¨®n de quitarnos ese derecho, pero en Nicaragua no hay nada ya: ning¨²n registro del nacimiento, ni registro de las propiedades, ya no existen¡±, me dice Do?a Francisca.
La defensora de Derechos Humanos asegura que, aunque las afectaciones por el desplazamiento forzado han sido muchas, las econ¨®micas aumentaron desde que les fue retirada la nacionalidad, pues antes al menos ten¨ªan un espacio en Nicaragua y posesiones que a veces les enviaban, inclusive les depositaban dinero, pero todo eso cambi¨®. ¡°?Ustedes ya no tienen nada en Nicaragua?¡±, le pregunt¨¦. ¡°Nada, solo la esperanza de regresar a nuestra patria¡±.
Esa esperanza se alimenta de saber que la persecuci¨®n del r¨¦gimen de Ortega se basa en acciones ilegales e inconstitucionales, puntualiza Ram¨ªrez, por lo cual los exiliados esperan que esas acciones tampoco duren. ¡°Eso nos llena de esperanza que pronto tambi¨¦n podremos ver esta Nicaragua que queremos, y que regresaremos, no va a ser f¨¢cil pero vamos a regresar a trabajar en nuestra Nicaragua. Vemos que la persecuci¨®n sigue hacia nosotros a pesar que estamos en el exilio, y de ver que tambi¨¦n nos quitan la nacionalidad, pues tambi¨¦n nos demuestra que seguimos siendo odiados por ellos aunque nosotros nunca hemos hecho ning¨²n da?o, sino lo que siempre exigimos fue que se nos respetaran nuestros derechos como campesinos, que nos respetaran nuestras tierras¡±.
Pero tambi¨¦n hay un aspecto positivo de la decisi¨®n de Ortega de quitarles la nacionalidad a los 94 ciudadanos, reflexiona La Chica Ram¨ªrez. Haber hecho esa lista de los ¡°sin patria¡± los ha unido m¨¢s que nunca, les quit¨® la distancia entre Costa Rica, Espa?a, Estados Unidos y otros pa¨ªses. Despu¨¦s del despojo de su nacionalidad, varios de ellos se acercaron e iniciaron un contacto que se mantiene 100 d¨ªas despu¨¦s, para planear acciones legales, ya sea locales o internacionales, contra este y otros atropellos del r¨¦gimen en su contra.
¡°Nosotros seguimos juntos y viendo qu¨¦ hacemos, siempre pensando en Nicaragua. Siempre mantenemos conversaciones de lo que est¨¢ pasando, tal vez antes de que nos quitaran la nacionalidad no pasaba lo que ahora pasa y creo que Ortega con todo lo que hace m¨¢s bien nos une, porque no hab¨ªamos tenido ese acercamiento con tanta gente que hoy estamos en la misma situaci¨®n, hoy nos ha generado como esa unidad de ser solidarios y ayudarnos unos a otros. Entonces yo creo que por un lado ha sido triste y emocionalmente enoja que una persona tome esas decisiones, pero tambi¨¦n ha sido muy bueno porque nos ha ayudado a unirnos y a estar m¨¢s cerca y estar pendiente de nosotros mismos¡±, expres¨® la fundadora del Movimiento Campesino Anti-Canal de Nicaragua.
Quitarles la nacionalidad por decreto los ha aglomerado, les ha dado fuerzas, ha creado una red que se alimenta de esperanza y con la certeza de que Nicaragua ya est¨¢ en todas partes.
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