Nayeli Cinco, la cantante secuestrada por un comando en Chiapas, ya est¨¢ de vuelta en casa

Nayeli Cinco, la cantante que fue secuestrada en su casa el 22 de junio por un comando armado, ha sido liberada, seg¨²n el presidente de M¨¦xico, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, que no ha aportado m¨¢s informaci¨®n sobre su liberaci¨®n. La Fiscal¨ªa de Chiapas explica, en conversaci¨®n con este peri¨®dico, que no ha podido certificar su aparici¨®n porque los familiares ¡°no han presentado a la autoridad prueba de vida¡±. La joven se vio involucrada en una trama que alcanz¨® relevancia nacional hace dos semanas, cuando un grupo armado secuestr¨® a 16 funcionarios de Chiapas unos d¨ªas despu¨¦s del secuestro de Cinco, y que fueron liberados dos semanas despu¨¦s sin raz¨®n aparente.

Ahora la joven tambi¨¦n ha sido liberada, pero no quiere hablar. ¡°Ya est¨¢ afortunadamente la se?ora de regreso, pero no quiere opinar, no quiere saber nada y se le debe respetar¡±, declar¨® este lunes L¨®pez Obrador durante su conferencia ma?anera. El mandatario fue informado de la noticia durante su visita este domingo a Chiapas para revistar los avances del Tren Maya, el proyecto estrella de su sexenio. El presidente no se refiri¨® ni a la fecha exacta en la que la mujer volvi¨® a casa, ni de qui¨¦n recibi¨® esa informaci¨®n, que todav¨ªa no ha sido confirmada por la Fiscal¨ªa. ¡°Los familiares no han querido informar¡±, aseguran.

El 22 de junio, dos camionetas negras llegan hasta una casa en el fraccionamiento Santa Clara, al norte de Tuxtla Guti¨¦rrez, capital de Chiapas. Justo despu¨¦s, Cinco esconde a sus dos hijas detr¨¢s de unos tanques de agua en la azotea de su casa y ella empieza a correr por los tejados hasta que los secuestradores la alcanzan y se la llevan. Cinco d¨ªas m¨¢s tarde, en la carretera que va hasta Tuxtla, un grupo armado frena un autob¨²s lleno de funcionarios de la Secretar¨ªa de Seguridad del Estado, y raptan a 16 de ellos. En un v¨ªdeo que circula por internet, los criminales exigen la destituci¨®n de tres altos jefes de la dependencia y la liberaci¨®n de Nayeli Cinco, que hasta ese momento estaba fuera del radar y no ten¨ªa conexi¨®n aparente con el caso.

Los d¨ªas siguientes son confusos. Las fuerzas de seguridad realizan un despliegue de m¨¢s de 1.000 efectivos que se lanzan a la b¨²squeda de los funcionarios y de la joven desaparecida. Los familiares de ambos convocan manifestaciones, piden por la liberaci¨®n de sus hijos y maridos y por el fin de la violencia en el Estado. Chiapas lleva meses sumergido en una batalla heterog¨¦nea que enfrenta al mismo tiempo a grupos de autodefensa contra las huestes del narcotr¨¢fico y contra las fuerzas de seguridad. Los da?os colaterales de esos enfrentamientos tienen consecuencias: hasta marzo de este a?o se han registrado 1.215 homicidios dolosos, superando con creces los 871 que se registraron el a?o pasado en el mismo periodo.

Sin previo aviso, el 30 de junio, cuando la situaci¨®n parec¨ªa estancada, los 16 funcionarios quedaron libres sin grandes afectaciones para su salud, adem¨¢s de la mala alimentaci¨®n y la falta de agua que sufrieron. Ni las autoridades ni los propios funcionarios dieron m¨¢s informaci¨®n sobre su liberaci¨®n, que en un principio parec¨ªa fuertemente condicionada a la destituci¨®n de los altos cargos y la liberaci¨®n de Nayeli Cinco. Pasaron los d¨ªas y hoy, de repente, L¨®pez Obrador anuncia que la joven cantante ha sido liberada, pero que no quiere hablar con la prensa y ni siquiera la Fiscal¨ªa ha recibido pruebas de vida de su familia, que no se ha puesto en contacto con ellos.

La informaci¨®n compartida hasta ahora por medios de comunicaci¨®n y fuentes en el terreno apuntan a que la mujer fue secuestrada por el C¨¢rtel de Sinaloa, que se encuentra en guerra abierta con el Cartel Jalisco Nueva Generaci¨®n por el control del tr¨¢fico de personas y sustancias en Chiapas. Los presuntos captores informaron a la polic¨ªa estatal, seg¨²n Milenio, que el pleito no es con ellos, sino con el Cartel de Sinaloa, que supuestamente tiene como jefes de la Secretar¨ªa de Seguridad P¨²blica a tres altos cargos que trabajan para ese grupo criminal. De momento no se ha hecho efectiva la destituci¨®n de estos funcionarios, pese a las exigencias de la sociedad civil, y el caso sigue embarrado en las preguntas que se han quedado sin contestar.

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