Crisis entre M¨¦xico y Ecuador: una semana de jaque a la diplomacia latinoamericana
El asalto a la Embajada mexicana dinamit¨® la relaci¨®n entre los dos pa¨ªses. El Gobierno de Daniel Noboa enfrenta ahora una demanda en la Corte Internacional de Justicia y un pedido de suspensi¨®n de la ONU
A Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador no le gustaba meterse en pol¨ªtica internacional. O al menos eso repet¨ªa una y otra vez ante las c¨¢maras. El presidente de M¨¦xico, que ha viajado pocas veces al exterior en los cinco a?os de gobierno, evitaba los asuntos espinosos de la regi¨®n e incluso miraba hacia otro lado cuando algunos abusos se perpetraban en pa¨ªses vecinos. Pero en el ¨²ltimo a?o dio un giro inesperado: se posicion¨® fuertemente sobre la crisis pol¨ªtica en Peru ¡ªdefendi¨® al expresidente Pedro Castillo, lo que le gan¨® la designaci¨®n de persona non grata por el Congreso peruano¡ª, mostr¨® su disgusto cuando el ultraderechista Javier Milei gan¨® la Presidencia de Argentina y hasta critic¨® la mano dura en seguridad de Nayib Bukele en El Salvador. Su ¨²ltima batalla la sostiene ahora con el Ecuador de Daniel Noboa, quien hace una semana asalt¨® la Embajada mexicana en Quito, golpe¨® al personal diplom¨¢tico y se llev¨® por la fuerza al exvicepresidente Jorge Glas, condenado por corrupci¨®n y asilado pol¨ªtico del Gobierno mexicano. La brutal arremetida, condenada masivamente por la comunidad internacional, puso en jaque a la diplomacia latinoamericana, que tendr¨¢ esta vez que resolver sus problemas en la Corte Internacional de Justicia.
El inicio de la crisis entre Ecuador y M¨¦xico comenz¨® bastante antes de que el mundo entero pudiera ver al jefe de la Canciller¨ªa mexicana en Quito por los suelos, forcejando con la polic¨ªa para evitar una aprehensi¨®n en su Embajada. El pasado 5 de abril, algunas horas despu¨¦s de que el Gobierno de L¨®pez Obrador otorgara asilo pol¨ªtico a Glas, las fuerzas de seguridad ecuatorianas llevaban un rato rodeando el edificio. Pero las Embajadas son consideradas un lugar sagrado en la pol¨ªtica internacional y ning¨²n funcionario mexicano en ese edificio pensaba que era posible vivir lo que vivieron. Hasta que un golpe para derribar la puerta los alert¨®. Glas estaba refugiado all¨ª desde diciembre pasado, y despu¨¦s de varios gestos que hicieron escalar la tensi¨®n entre los dos pa¨ªses, la delegaci¨®n mexicana esperaba un salvoconducto que le permitiera a su acogido tomarse un vuelo rumbo a Ciudad de M¨¦xico.
Lo que pas¨® en lugar de eso recorri¨® las pantallas y los noticieros de todo el mundo. Una docena de agentes con armas largas en las manos salt¨® los muros de la Embajada, venci¨® la puerta y se llev¨® a rastras a Glas. En el camino, amedrentaron y apuntaron con armas al personal diplom¨¢tico mexicano que intent¨® detenerles. ¡°Cuando finalmente ten¨ªan que salir, creo que ah¨ª fue donde me pegaron en el ojo, que tengo una marca aqu¨ª, porque era con un escudo que llegaba hasta mi cabeza¡±, relat¨® incr¨¦dulo esta semana Roberto Canseco, el jefe de la Canciller¨ªa, que hab¨ªa quedado frente a la misi¨®n diplom¨¢tica horas antes, al ser expulsada de Ecuador la embajadora Raquel Serur.
M¨¦xico respondi¨® con el rompimiento inmediato de las relaciones bilaterales. La actitud del Gobierno de Noboa fue r¨¢pidamente condenada por gran parte de los pa¨ªses de la regi¨®n, y con m¨¢s timidez por otros, como Estados Unidos y Canad¨¢, que solo tomaron una postura m¨¢s fuerte despu¨¦s de la difusi¨®n de las grabaciones de la c¨¢mara de seguridad que hizo L¨®pez Obrador. El asalto sirvi¨® de combustible a un presidente que dedic¨® su semana a hacer lo que mejor se le da: el espect¨¢culo pol¨ªtico. Y ten¨ªa con qu¨¦ hacerlo. Las brutales im¨¢genes acompa?aron cada una de sus palabras. ¡°Ni [Augusto] Pinochet, el temible Pinochet, y otros, se hab¨ªan atrevido a eso¡±, lanz¨® el lunes.
La canciller mexicana, Alicia B¨¢rcena, un tibur¨®n de la diplomacia latinoamericana, fue la encargada de defender la bandera. M¨¦xico busc¨® primero apoyo en los foros regionales y en los espacios internacionales. Consigui¨® la condena en¨¦rgica hacia Ecuador de la Organizaci¨®n de los Estados Americanos (OEA) con una aplastante mayor¨ªa y el respaldo casi completo de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribe?os (Celac). Con el apoyo tambi¨¦n de la Uni¨®n Europea, Estados Unidos y Canad¨¢, elev¨® el asunto a la Corte Internacional de Justicia y pidi¨® la suspensi¨®n de el pa¨ªs sudamericano de las Naciones Unidas, as¨ª como la expulsi¨®n en caso de comprobarse que viol¨® la carta fundacional de la organizaci¨®n. El Ejecutivo de L¨®pez Obrador acus¨® adem¨¢s a la Administraci¨®n de Noboa de interceptar sus comunicaciones.
En la tarea de buscar sanciones para Ecuador, no s¨®lo ha participado M¨¦xico. Tambi¨¦n lo ha hecho el expresidente Rafael Correa, quien ha sido denunciado por la ministra de Trabajo, Ivone N¨²?ez, por el presunto delito de traici¨®n a la patria. Correa pidi¨® a la comunidad internacional represalias contra el pa¨ªs por el asalto a la Embajada y en defensa de su amigo y compa?ero de Gobierno, Jorge Glas. El exvicepresidente guarda prisi¨®n en la c¨¢rcel de m¨¢xima seguridad La Roca, en Guayaquil, donde fue trasladado despu¨¦s de su captura y mantiene una huelga de hambre, seg¨²n inform¨® su equipo internacional de abogados.
Glas se quedar¨¢ en ese reclusorio por lo pronto. Esta semana un tribunal le neg¨® la solicitud de h¨¢beas corpus que hizo su defensa con el argumento de que su captura al interior de la legaci¨®n diplom¨¢tica fue ilegal. Los abogados de Glas pidieron que el exvicepresidente pueda ser trasladado a otra embajada, pero los jueces negaron el recurso al aducir que tiene dos sentencias en firme por corrupci¨®n por las que debe cumplir una pena de ocho a?os, aunque catalogaron la detenci¨®n ¡°como ilegal y arbitraria¡±.
La crisis diplom¨¢tica ha detonado m¨¢s hacia afuera que internamente en Ecuador, un pa¨ªs que parece no descansar de los esc¨¢ndalos pol¨ªticos y judiciales que polarizan a¨²n m¨¢s las opiniones en la esfera p¨²blica. ¡°Aquellos que dec¨ªan que los organismos internacionales no serv¨ªan para nada hoy est¨¢n apelando a su autoridad, y los que antes elevaban el respeto internacional, ahora lo cuestionan y lo subjetivizan¡±, dice Pedro Donoso, analista pol¨ªtico, que describe el ambiente tras lo ocurrido en la ¨²ltima semana. No hay datos precisos de c¨®mo los ciudadanos valoran lo que pas¨® en la Embajada mexicana, pero su efecto se ha sentido en la relaci¨®n de partidos pol¨ªticos del pa¨ªs.
Algo est¨¢ claro, la decisi¨®n del presidente Daniel Noboa, ha pateado el tablero pol¨ªtico en un periodo crucial. Es un a?o electoral, en el que el presidente tambi¨¦n es candidato. Adem¨¢s, en pocos d¨ªas el mandatario medir¨¢ su poder de gobernabilidad en una consulta popular, con la que promete solucionar los problemas de inseguridad, en un momento en el que la violencia ha repuntado en el pa¨ªs y los muertos comienzan a contarse nuevamente por decenas, a pesar de su estrategia de mantener a los militares a cargo de la seguridad en las calles. Y ah¨ª es cuando el pa¨ªs podr¨ªa sentir ¡°un impacto que puede ser sutil, pero importante: la p¨¦rdida de credibilidad del Gobierno ecuatoriano¡±, dice el analista C¨¦sar Febres Cordero. ¡°M¨¢s all¨¢ de las sanciones, esto puede hacer dif¨ªcil el trabajo del servicio exterior en un momento en el que Ecuador necesita desesperadamente aliados para combatir al crimen organizado transnacional¡±, a?ade.
El momento pol¨ªtico tambi¨¦n ha sido crucial para M¨¦xico, que este a?o tiene elecciones presidenciales y la puntera en las encuestas en justamente la sucesora de L¨®pez Obrador, Claudia Sheinbaum. La candidata del Movimiento de Regeneraci¨®n Nacional tambi¨¦n aprovech¨® el tropiezo de Noboa. ¡°Es completamente condenable, viola todos los protocolos internacionales y es una violaci¨®n a la soberan¨ªa de nuestro pa¨ªs, no tiene otro nombre¡±, dijo en un mitin esta semana. ¡°Adem¨¢s vimos las escenas deleznables que ocurrieron en la Embajada y aprovechamos tambi¨¦n para felicitar tambi¨¦n a nuestro cuerpo diplom¨¢tico que actu¨® con una enorme valent¨ªa¡±, destac¨® sobre unos funcionarios que estos d¨ªas son vistos como h¨¦roes nacionales.
El principal efecto del impasse diplom¨¢tico en Ecuador se ha sentido en la Asamblea, donde el partido del corre¨ªsmo, Revoluci¨®n Ciudadana, que se declar¨® en permanente oposici¨®n al Gobierno, ha perdido tres curules de su bloque, con los que gozaba de m¨¢s poder en la toma de decisiones. En la ¨²ltima semana tres legisladores se desafiliaron, y podr¨ªan ser captados por el oficialismo, que cuando asumi¨® funciones solo contaba con 14 asamble¨ªstas y ahora suma 26. Pero a¨²n siendo minor¨ªa hab¨ªa conseguido gobernar todo este tiempo sin oposici¨®n, gracias a un pacto con los partidos. As¨ª logr¨® que el Congreso aprobara ¡ªcasi con unanimidad¡ª cinco proyectos de ley indispensables para Noboa. ¡°Es interesante el juego del Gobierno, gole¨® a la Revoluci¨®n Ciudadana porque hizo que pasen cinco leyes con sus votos, para finalmente robarle a sus asamble¨ªstas¡±, analiza Donoso. Aunque es dif¨ªcil determinar si el conflicto con M¨¦xico deton¨® esto, ¡°s¨ª demuestra que el Gobierno puede hacer cualquier cosa y ahora los c¨®digos son distintos¡±, indica.
Mientras se reordenan las relaciones de poder en la Asamblea y el Gobierno ecuatoriano intenta convencer al mundo sobre su versi¨®n de por qu¨¦ entr¨® a la fuerza a la Embajada mexicana, la violencia toma fuerza nuevamente en las calles. Dos masacres ocurrieron en 24 horas y dejaron 14 personas acribilladas en Guayaquil y Dur¨¢n, ciudades claves para el crimen organizado. Las familias cuentan los centavos para lograr comprar los productos b¨¢sicos que est¨¢n m¨¢s caros debido al incremento del IVA y la especulaci¨®n, y el desempleo toc¨® la tasa m¨¢s alta en casi dos a?os. En Ecuador los problemas cotidianos de la gente contin¨²an, mientras fuera los litigantes mexicanos se alistan para llevar al pa¨ªs sudamericano a rendir cuentas ante La Haya.
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