L¨®pez Obrador viaja a Chiapas en plena crisis de desplazados a Guatemala

Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador inaugurar¨¢ este viernes un puente en pleno coraz¨®n de Chiapas, en la presa de la Angostura. De su mano estar¨¢ el Gobernador del Estado y amigo cercano del presidente en funciones, Rutilio Escand¨®n. Previsiblemente, habr¨¢ alg¨²n tipo de ceremonia, discursos, felicitaciones por el trabajo bien hecho. El puente servir¨¢ para unir dos regiones, la frailesca y la sierra Mariscal, el epicentro de la guerra en la que el C¨¢rtel de Sinaloa y el C¨¢rtel Jalisco Nueva Generaci¨®n combaten por el control del territorio fronterizo: la dominaci¨®n de sus pueblos, del tr¨¢fico de drogas y seres humanos, la extorsi¨®n a sus habitantes, el monopolio del miedo.

Chiapas sufre una guerra sin cuartel entre ambos c¨¢rteles, sazonada por todo un arsenal de grupos armados locales, paramilitares, autodefensas ind¨ªgenas ¡ªalgunas que buscan protegerse de las constantes agresiones, otras en la ¨®rbita del crimen organizado¡ª. Es poco probable, sin embargo, que durante la inauguraci¨®n del puente el presidente de la Rep¨²blica y el gobernador del Estado se refieran directamente al ¡°conflicto armado¡±, como lo denominan las organizaciones sociales que monitorean la regi¨®n. El discurso oficial de las autoridades no se ha movido un ¨¢pice a pesar de los miles de personas que han tenido que abandonar su hogar ante la escalada de la violencia.

Para L¨®pez Obrador, Chiapas es uno de los Estados m¨¢s pac¨ªficos del pa¨ªs, una de las regiones que m¨¢s se han beneficiado del desarrollo que ha tra¨ªdo su Administraci¨®n (a pesar de ser la entidad m¨¢s pobre de M¨¦xico), y los problemas de seguridad se acotan solo a la sierra Mariscal. La realidad se empe?a en contrariar al presidente mientras los c¨¢rteles se extienden por todo el territorio chiapaneco. En febrero, un informe denunciaba el desplazamiento de al menos 10.000 personas solo en la regi¨®n fronteriza y la sierra Mariscal. De eso hace ya seis meses y el ¨¦xodo no se ha detenido. El ¨²ltimo cap¨ªtulo del conflicto es la in¨¦dita imagen de mexicanos huyendo de las balas para refugiarse al sur de la frontera, en Guatemala.

Medio centenar de oeneg¨¦s y diversas organizaciones sociales, adem¨¢s de una treintena de individualidades, hicieron un llamado este mi¨¦rcoles al Gobierno federal y estatal de M¨¦xico para una ¡°inmediata intervenci¨®n en la zona para prevenir nuevos desplazamientos forzados y otros da?os irreparables a la vida, la integridad y otros derechos de las personas afectadas por el crimen organizado¡±. En una carta p¨²blica con el encabezado ¡°La disputa por el control de territorios en Chiapas y la acci¨®n poco efectiva del Gobierno mexicano pone en riesgo inminente la vida y la seguridad de miles de familias¡±, los colectivos denunciaban la violencia que ha conducido a la crisis humanitaria, as¨ª como el riesgo del actual relato de las autoridades ¡°que minimizan la situaci¨®n humanitaria y descargan la responsabilidad de los hechos en la poblaci¨®n¡±.

Los principales municipios afectados por la nueva ola de desplazamientos, se?ala la carta, son Frontera Comalapa, Chicomuselo, La Concordia, El Porvenir, Motozintla, Bejucal de Ocampo, Bella Vista, Siltepec, Mazapa de Madero, Amatenango de la Frontera, Monte Cristo de Guerrero, Angel Albino Corzo (Jaltenango), La Grandeza, Niquivil, Pablo L. Sidar y Las Chicharras. Los pueblos se encuentran incomunicados por bloqueos del crimen organizado, con toque de queda, escasez de alimentos y reclutamiento forzoso de la poblaci¨®n civil para participar en las ¡°barricadas humanas por si viene el grupo rival o para impedir el paso de fuerzas federales¡±.

Conflicto armado desde 2021

La situaci¨®n no es nueva. Las denuncias de las organizaciones y de la poblaci¨®n se remontan ya tres a?os en el tiempo. El informe que denomin¨® ¡°conflicto armado¡± a la guerra entre c¨¢rteles situaba su inicio en el verano de 2021. La inactividad de las autoridades, que se han limitado a desplegar a las Fuerzas Armadas en Chiapas sin atender los problemas de fondo, ha contribuido a empeorarlo, defienden. La carta plantea que en mayo, agosto y septiembre de 2023 ya se produjeron situaciones similares, solventadas temporalmente con la presencia de los militares. ¡°Sin embargo, al retirarse las fuerzas federales, los grupos volvieron a enfrentarse, escalando la violencia y dejando nuevamente a la poblaci¨®n en riesgo¡±.

El fin de semana, en un comunicado conjunto, los gobiernos de M¨¦xico y Guatemala anunciaron el despliegue de acciones humanitarias para que los ciudadanos que lo deseen puedan regresar a sus hogares ¡°en condiciones de dignidad y seguridad¡±. No hay evidencias, por el momento, de que nadie se haya acogido a este mecanismo, ni en qu¨¦ consiste exactamente. De la frontera siguen llegando noticias de enfrentamientos: entre el lunes y el martes, en torno a 400 habitantes de Chicomuselo huyeron del pueblo ante el ataque de un dron que lanz¨® una bomba contra ellos. El Ej¨¦rcito guatemalteco vigila las entradas a su territorio y las autoridades han facilitado certificados de permanencia humanitaria, que tienen vigencia de 30 d¨ªas prorrogables.

No hay datos oficiales y los n¨²meros son inexactos, pero la mayor¨ªa de las organizaciones sobre el terreno y la prensa local que lo cubre coinciden en que en estos momentos entre 400 y 600 mexicanos se han cobijado en Guatemala, un pa¨ªs que est¨¢ lejos de ser seguro (m¨¢s a¨²n en la selv¨¢tica frontera), pero que parece una mejor opci¨®n para los desplazados que Chiapas. Lo habitual es lo contrario: guatemaltecos atravesando M¨¦xico para llegar a Estados Unidos.

No solo las organizaciones sociales, hasta la Iglesia Cat¨®lica se ha posicionado en numerosas ocasiones durante los ¨²ltimos meses para exigir medidas urgentes contra la espiral de violencia desatada por los c¨¢rteles. La ¨²ltima, este jueves, cuando las parroquias de Santa Catarina y de San Pedro Ap¨®stol, en Pantelh¨® y Chenalh¨®, dos pueblos de los Altos de Chiapas, exigieron medidas para garantizar la ¡°seguridad y la paz¡±: ¡°Desde nuestra Fe en Jesucristo, el dolor del pueblo que sufre, y la indignaci¨®n, por la ingobernabilidad que vivimos en el estado, la minimizaci¨®n que ha hecho el Presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador frente a la violencia que se ha viralizado en dichos municipios, y sin entender en manos de qui¨¦n est¨¢ la lucha contra el crimen organizado, ya que vemos que los criminales, cada d¨ªa se hacen m¨¢s fuertes en presencia de los militares y la Guardia Nacional, o ?est¨¢n protegidos por ellos? [sic]¡±. Son muchos los ojos que este viernes mirar¨¢n a la presa de La Angostura y su nuevo puente.

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