Diez polic¨ªas detenidos por desaparici¨®n forzada y secuestro: el Gobierno toma el control de Taxco ante la ola de violencia

Taxco no conf¨ªa en sus polic¨ªas. El pueblo m¨¢gico de antiguas casitas coloniales, calles empedradas y artesan¨ªas de plata vive d¨ªas in¨¦ditos en los que el Gobierno de Guerrero ha tomado el control de la seguridad del municipio despu¨¦s de que diez efectivos de su Secretar¨ªa de Seguridad Ciudadana (SSP) fueran arrestados en un turbio caso. El pasado mi¨¦rcoles 28 de agosto un operativo conjunto de las Fuerzas Armadas arrest¨® a los 10 sospechosos. Cuatro de ellos fueron identificados desde el principio como agentes en activo, acusados de un delito de secuestro agravado. El Ministerio P¨²blico no ha podido confirmarlo con los otros seis hasta este lunes: ¡°La identidad de los polic¨ªas en activo fue acreditada por la autoridad municipal correspondiente¡±, ha declarado el organismo en un comunicado, donde especifica que sobre los seis pesan los cargos de desaparici¨®n forzada.

El operativo del 28 de agosto, conjunto entre agentes de la Fiscal¨ªa y la Polic¨ªa estatal, la Guardia Nacional y el Ej¨¦rcito, buscaba a una mujer ¡°de identidad reservada¡±, v¨ªctima de desaparici¨®n forzada a la que todav¨ªa no se ha encontrado, aunque contin¨²a la investigaci¨®n. Los cuerpos de seguridad irrumpieron en un edificio del Gobierno, la sede de Seguridad P¨²blica, Protecci¨®n Civil y Tr¨¢nsito de Taxco, donde esperaban localizarla. No estaba all¨ª, pero en su lugar encontraron a un hombre que tambi¨¦n hab¨ªa sido secuestrado y era retenido ilegalmente por los polic¨ªas detenidos. No lo esperaban.

Los casos est¨¢n claramente relacionados, pero la Fiscal¨ªa todav¨ªa no ha dado informaci¨®n de c¨®mo. En principio, los seis hombres identificados como polic¨ªas este lunes (Luis, David, Carlos, Cristofer, Alexis y ?ngel) han sido acusados de la desaparici¨®n forzada de la mujer, y los cuatro que ya fueron acreditados como agentes desde el pasado mi¨¦rcoles est¨¢n acusados del secuestro agravado del hombre que se encontr¨® en la sede p¨²blica. De los cuatro ¨²ltimos, tres fueron detenidos en el lugar de los hechos (Florentino, Marino y Yolanda) y otro, Eusebio, en Cacalotenango, municipio cercano.

Los sospechosos ya han sido puestos bajo la custodia de las autoridades y un juez de control los ha enviado a prisi¨®n preventiva en una c¨¢rcel del Estado, el Centro de Reinserci¨®n Social (Cereso) de Iguala, desde donde seguir¨¢n su proceso judicial. La siguiente audiencia, en la que un juez decidir¨¢ si los vincula a proceso, tendr¨¢ lugar el pr¨®ximo jueves, 5 de septiembre.

Las autoridades investigan tambi¨¦n si los 10 polic¨ªas detenidos est¨¢n relacionados con la desaparici¨®n de otros cinco j¨®venes de Taxco. La Fiscal¨ªa no descarta una implicaci¨®n de los 10 agentes en este caso, previo al operativo del mi¨¦rcoles pasado, pero todav¨ªa no han reunido todas las pruebas necesarias para confirmarlo, seg¨²n fuentes del Ministerio P¨²blico. La informaci¨®n es opaca y apenas han trascendido detalles, pero el organismo asegura que contin¨²a trabajando para encontrarlos.

La operaci¨®n para detener a los 10 polic¨ªas no incluy¨® a las fuerzas de seguridad de Taxco. Ni siquiera sus autoridades pol¨ªticas fueron avisadas de que iba a suceder. El alcalde del municipio, Mario Figueroa, recientemente reelegido en las elecciones del pasado 2 de junio por Movimiento Ciudadano (antes formaba parte de Morena), denunci¨® que ¡°en ning¨²n momento el ayuntamiento fue informado y mucho menos notificado¡± sobre el operativo del mi¨¦rcoles 28, como recoge un comunicado publicado ese mismo d¨ªa.

El 31 de agosto, el Estado de Guerrero asumi¨® el control de la seguridad de Taxco por ¡°los hechos ocurridos en la ciudad platera en d¨ªas pasados, en donde fueron detenidos elementos de la polic¨ªa municipal, quienes se encuentran bajo investigaci¨®n por su posible participaci¨®n en actos delictivos¡±, seg¨²n un comunicado del Gobierno estatal. La Mesa de Coordinaci¨®n para la Construcci¨®n de la Paz le notific¨® la decisi¨®n a Figueroa, que no se ha pronunciado desde entonces.

Taxco vive meses violentos. Los grupos criminales del Estado se han adue?ado de las calles y los barrios del pueblo m¨¢gico. Su lucha por el control de las rutas de transporte del municipio provoc¨® que en enero se declarara un toque de queda. La Iglesia tuvo que intervenir como mediadora entre las mafias y el Gobierno y, aparentemente, consigui¨® una tregua que no dur¨® mucho. Un mes despu¨¦s, Figueroa, que hab¨ªa salido p¨²blicamente a negar que en Taxco hubiera ning¨²n tipo de inseguridad, sufri¨® un atentado en su contra. Primero lo minimiz¨® y neg¨® que fuera un ataque contra ¨¦l, pero acab¨® reconociendo lo evidente d¨ªas despu¨¦s.

Polic¨ªas asesinados, secuestros, tiroteos a plena luz del d¨ªa, desaparecidos, extorsiones¡­ El repertorio habitual del crimen organizado en M¨¦xico se ha desplegado con todos sus elementos en Taxco y, como demuestra la detenci¨®n de los 10 polic¨ªas, ni las fuerzas de seguridad se libran de estar implicados en los negocios il¨ªcitos y en la espiral de inseguridad que se ha desencadenado en el municipio. La imagen m¨¢s dram¨¢tica lleg¨® el jueves santo: el asesinato de una ni?a de ocho a?os, Camila, provoc¨® una brutal reacci¨®n en la que decenas de ciudadanos lincharon a los tres supuestos culpables. A una de ellos, una mujer, la mataron a golpes ante la mirada de polic¨ªas que no hicieron nada para evitarlo. Los otros dos hombres conservaron la vida pero recibieron una paliza. Una sucesi¨®n de violencia que ha conducido a que el Gobierno estatal tenga que tomar cartas en el asunto.

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