El Museo del Estanquillo expone el ¡°mundo org¨¢nico¡± de Francisco Toledo
Una nueva muestra del gran artista contempor¨¢neo mexicano ahonda en su relaci¨®n con la naturaleza y la magia de las leyendas de los pueblos originarios de Oaxaca
Una mujer con forma de iguana se aparea con una serpiente pit¨®n. Cuenta una leyenda zapoteca que la mujer se entristece cuando matan a la serpiente, por lo que decide convertirse totalmente en iguana. ¡°Prefiere la condici¨®n de reptil a la humana¡±, acota Alejandro Brito Lemus, director del Museo del Estanquillo, en Ciudad de M¨¦xico, que este jueves inaugur¨® una exposici¨®n sobre Francisco Toledo, el gran artista contempor¨¢neo mexicano, que ahonda en la ¨ªntima relaci¨®n de su obra con la naturaleza, las leyendas del istmo de Tehuantepec y la condici¨®n humana.
La obra de la mujer iguana forma parte de una serie de trabajos que Toledo produjo de la mano de los promotores y galeristas mexicanos Armando Colina y V¨ªctor Acu?a, cofundadores de la c¨¦lebre galer¨ªa Arvil y amigos cercanos del artista. Juntos produjeron una serie de carpetas gr¨¢ficas entre 1974 y 1981, que forman parte de una de las ¨¦pocas de mayor esplendor del artista oxaque?o. Una de esas carpetas se titula Toledo-Guchachi¡¯ (1976), que expone a la mujer iguana. Toledo recopila en este trabajo textos que van desde la conquista de M¨¦xico, pasando por leyendas de pueblos originarios y hasta llegar a obras contempor¨¢neas en los que se menciona a la iguana. As¨ª es que al lado de los fascinantes grabados de Toledo aparecen escritos de Bartolom¨¦ de las Casas, Vespucio, Fern¨¢ndez de Oviedo, Pablo Neruda, Alejo Carpentier, Mario Vargas Llosa o Miguel ?ngel Asturias.
Armando Colina, que el jueves particip¨® en un recorrido para la prensa en la exposici¨®n, explic¨® que el libro que re¨²ne aquellos grabados fue encuadernado en piel de iguana, pero que no fue una tarea f¨¢cil encontrarlas, porque la iguana es un animal muy apreciado en las poblaciones del istmo de Tehuantepec, donde adoran su carne y se comen hasta la piel del reptil. ¡°No me las quer¨ªan vender¡±, cuenta sonriente el galerista.
La exhibici¨®n, titulada Francisco Toledo. Grabador de enigmas, presenta m¨¢s de 60 piezas de Toledo, entre autorretratos, grabados originales y las placas que utiliz¨® en su trabajo. En un video de la muestra se ve y escucha al artista explicando su delicado y tambi¨¦n complicado proceso de trabajo. Toledo hund¨ªa varias veces las placas de bronce en ¨¢cido antes de poder trabajarlas. Luego dibujaba sobre ellas las im¨¢genes que sal¨ªan de su cabeza privilegiada, ese mundo de fantas¨ªa, magia y vanguardia que lo convirti¨® en el mayor artista contempor¨¢neo de M¨¦xico. En el video se ven las manos laboriosas del artista, de largas y duras u?as ennegrecidas, trazando las figuras que produc¨ªa su mirada inquisitiva.
Una de las obras m¨¢s destacadas de la muestra es Libertad a V¨ªctor Yodo (1978), grabado realizado mediante diez 10 tratamientos sucesivos de una sola placa, en la que Toledo expresa su compromiso pol¨ªtico. El grabado es una cr¨ªtica a los militares de la ¨¦poca, porque se presume que ellos secuestraron y desaparecieron a Yodo, maestro y activista. El cuerpo de Yodo nunca apareci¨® ni tampoco se supo qu¨¦ pas¨® en realidad con ¨¦l.
La exposici¨®n, que estar¨¢ abierta hasta el 21 de abril, muestra el ¡°mundo org¨¢nico¡± que explora la obra de Toledo, la relaci¨®n de la naturaleza con la realidad humana, explica Brito Lemus. El artista se hunde en las leyendas de los pueblos originarios para ¡°reescribirlas¡±, como hizo en la carpeta sobre el Chilam Balam, la serie de libros que relatan hechos de la civilizaci¨®n maya. Toledo hizo un manuscrito del llamado Libro de los enigmas, que acompa?¨® con ocho grabados a color. ¡°Es una versi¨®n propia, salida de su cabeza. De su lectura extrae y expone en im¨¢genes su propia concepci¨®n del Chilam Balam¡±, advierte Brito Lemus.
Entre los grabados encargados por la galer¨ªa Arvil tambi¨¦n se exponen autorretratos del autor y retratos que le hizo a sus amigos Colina y Acu?a, hermosos cuadros que cierran una exposici¨®n llena de magia y erotismo, porque la obra de Toledo tambi¨¦n tiene una fuerte carga er¨®tica, como demuestra el grabado de un conejo masturb¨¢ndose y el semen que brota de su falo se convierte en una lluvia de estrellas, o el de la mujer con una iguana en la vagina o el de la flor en forma de penes que huele otra mujer. Ya el escritor Carlos Monsiv¨¢is, el gran cronista de M¨¦xico, hab¨ªa advertido de Toledo que ¡°le ha dado su nombre a una manera de recrear y transfigurar la realidad¡±. Una realidad m¨¢gica que ahora se puede apreciar en el Museo del Estanquillo.
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