Clara Brugada: ¡°Las mujeres ganamos elecciones y sabemos gobernar bien¡±

Clara Brugada se planta frente a los micr¨®fonos, se lleva la mano derecha al coraz¨®n para agradecer las porras y respira por ¨²ltima vez antes de pronunciar su discurso. Frente a ella est¨¢n m¨¢s de 200 mujeres que fueron convocadas el martes a formar un enorme mosaico color morado afuera del Palacio de Bellas Artes, uno de los sitios m¨¢s representativos de la capital. El acto es para conmemorar 70 a?os del derecho de las mujeres al voto en M¨¦xico, pero tambi¨¦n para mandar un mensaje: ¡°Es tiempo de mujeres¡±.

Tras el triunfo de Claudia Sheinbaum en la contienda por la candidatura presidencial de Morena, todas las miradas est¨¢n puestas en qui¨¦n va a tomar el bast¨®n de mando en Ciudad de M¨¦xico. Por su importancia. Por su peso pol¨ªtico. Porque es el lugar que deja vacante quien est¨¢ llamada a suceder a Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador. Y porque la oposici¨®n, despu¨¦s de conseguir varias alcald¨ªas clave hace tres a?os, quiere llevarse la capital en las elecciones de 2024.

La carrera ha entrado en la recta final. Faltan menos de dos semanas para conocer los resultados de la encuesta qu¨¦ definir¨¢ al ganador o ganadora y para poner punto final a una contienda interna que ha partido en dos al movimiento: ?Ser¨¢ el antiguo jefe de la Polic¨ªa, Omar Garc¨ªa Harfuch o ser¨¢ Clara Brugada, la exalcaldesa de Iztapalapa? ?Habr¨¢ una sorpresa? El dilema hace que dos asistentes al mitin se muerdan las u?as, crucen los dedos y debatan acaloradamente hasta que les piden que bajen la voz.

A estas alturas, la duda no es s¨®lo qui¨¦n va a ganar la encuesta, sino c¨®mo va a incidir el criterio de paridad en el reparto de las candidaturas. La ley electoral establece que la mitad debe ser para mujeres y la otra, para hombres. El meollo del asunto, sin embargo, es que el pr¨®ximo a?o hay nueve gubernaturas en disputa. ¡°Es tiempo de mujeres, es tiempo de que las mujeres gobiernen, es tiempo de paridad¡±, afirma Brugada ante sus simpatizantes. ¡°Es un honor estar con Clara hoy¡±, responde la multitud. ¡°La 4T ser¨¢ feminista o no ser¨¢¡±, clama la aspirante entre gritos desbocados de sus seguidoras. ¡°Por el bien de todos¡­¡±, dice la pol¨ªtica de 60 a?os, mientras el p¨²blico se prepara para corear una de las frases m¨¢s conocidas de L¨®pez Obrador, ¡°primero las mujeres¡±. ¡°?No est¨¢s sola, no est¨¢s sola!¡±, rugen las asistentes.

Brugada camina a toda prisa hacia una camioneta Jeep Comander gris que la espera a unos metros para seguir con los eventos del d¨ªa. ¡°?A qu¨¦ hora es el pr¨®ximo?¡±, pregunta la aspirante. ¡°A las 11¡å, le responde su equipo. ¡°?Pero si son las 11!¡±, dice la pol¨ªtica antes de soltar una carcajada. ¡°No te preocupes, haces media hora¡±.

¡°Tenemos una competencia real y s¨ª, est¨¢ peleado¡±, admite Brugada, mientras clava su mirada en la ventanilla para ver de reojo el tr¨¢fico. Los traslados son los momentos que aprovecha para prepararse antes de cada evento o para leer Presidenta, el libro de Arturo Cano sobre Sheinbaum, que se asoma en la bolsa del asiento frente a ella. Hoy no puede. Su agenda est¨¢ desbordada y hay que llegar lo antes posible a la UAM Azcapotzalco, mientras le siguen los pasos un periodista y una fot¨®grafa. ¡°Ha habido pol¨¦mica, no tenemos permitido debatir entre los aspirantes, pero la comunidad s¨ª lo ha hecho¡±, agrega sobre las divisiones internas en la capital.

¡ª A mucha gente le hace ruido que un polic¨ªa sea el candidato de la izquierda¡­

¡ª Son de los temas que se est¨¢n debatiendo, pero yo pienso que, en el fondo, el proyecto de Morena deber¨ªa ser el mismo y que los candidatos deber¨ªamos, en dado caso, poner nuestro sello. Desde mi punto de vista, no es solo un periodo de gobierno, debe ser una etapa hist¨®rica para la ciudad. Lo importante es que toda la militancia tenga claro hacia d¨®nde vamos, porque ellos tienen que ser nuestro principal contrapeso. Eso creo que ha faltado en Morena.

Brugada es disciplinada. Piensa bien cada palabra antes de decirla, respeta las jerarqu¨ªas y no cae en la tentaci¨®n de hablar de sus rivales. El partido les ha pedido unidad. Apenas un d¨ªa antes, la dirigencia convoc¨® a todos los finalistas para las encuestas de los nueve estados en disputa. Se les record¨® las reglas del juego y se les pidi¨® refrendar la promesa de que respetar¨¢n los resultados.

¡ª ?Por qu¨¦ es tiempo de mujeres?

¡ª Primero, porque las mujeres somos competitivas. Las mujeres ganamos elecciones y sabemos gobernar bien. No se debe estar pensando lo contrario. Es tiempo de mujeres porque hay una desigualdad hist¨®rica, porque queremos combatirla y porque es hora de hacer justicia. No solo se trata de equilibrar los gobiernos entre hombres y mujeres, sino tambi¨¦n de lograr que todo lo que ha atrasado y ha puesto a la mujer en desventaja sea erradicado. Han pasado muchas revoluciones y transformaciones en el pa¨ªs, y lo que ha quedado intocado es la situaci¨®n de la mujer.

La relaci¨®n entre Morena y el feminismo ha sido, por decir lo menos, dif¨ªcil. ¡°Me reconozco como feminista, pero no estamos de acuerdo con la violencia¡±, dijo Sheinbaum en 2020 tras una protesta en la capital. ¡°Soy humanista¡±, dijo L¨®pez Obrador, cuando se le pregunt¨® al respecto ese mismo a?o.

¡ª Hay varios liderazgos del partido, incluso mujeres, que no se identifican con el feminismo¡­

¡ª Creo que el feminismo es un concepto todav¨ªa poco comprendido. Hay un estigma. Soy una mujer que lleva luchando 40 a?os en esta ciudad por su democracia y mi mayor utop¨ªa es lograr cambios para las mujeres.

¡ª ?Cu¨¢l es el estigma?

¡ª Bueno, se piensa que el feminismo es lo contrario al machismo y no es as¨ª. Hay una falta de conocimiento a fondo de que el feminismo es parte del humanismo, de que el feminismo es esencialmente transformador, de que es una ideolog¨ªa que combate un sistema econ¨®mico-social patriarcal que lleva milenios.

¡°Siempre hay un techo de cristal para las mujeres. Yo he obtenido cargos por mi propio esfuerzo, pero tienes que ser extraordinaria para que te tomen en cuenta y hoy tenemos leyes para que eso no tenga que ser as¨ª¡±, defiende Brugada. ¡°No es solo qui¨¦n gane la encuesta, tambi¨¦n va a ser clave la perspectiva de g¨¦nero y qui¨¦nes son las mujeres m¨¢s competitivas¡±, agrega. La conversaci¨®n se interrumpe cuando la camioneta se estaciona en la UAM. Antes de saludar, retoca su maquillaje y se pone un poco de labial. Los alumnos le ense?an una manta, le muestran un mural y la gu¨ªan por tres pisos de escaleras para llegar al siguiente evento.

¡°Nos preocupa que llegue Harfuch, ¨¦l no es de izquierda ni tiene la visi¨®n que tiene una egresada de esta universidad, como Clara¡±, afirma Uriel Jim¨¦nez, un estudiante de 28 a?os que carga una pancarta en apoyo a la aspirante. ¡°Creo que es la que tiene m¨¢s experiencia y est¨¢ m¨¢s pegada al pueblo¡±, concuerda David Garc¨ªa, de 21.

¡°Antes Iztapalapa era considerado el patio trasero de la ciudad, un lugar donde se escond¨ªa la pobreza¡±, se?ala Brugada al presentar los resultados de su gesti¨®n en la alcald¨ªa m¨¢s poblada de la capital, sus principales credenciales para buscar la candidatura. Todav¨ªa en el coche, la aspirante hablaba de buscar soluciones a la crisis del agua como la captaci¨®n de lluvia y un nuevo modelo de gesti¨®n; de fortalecer la infraestructura del metro en vez de buscar ampliar las l¨ªneas, y de combatir la inseguridad, la principal preocupaci¨®n de la poblaci¨®n, en sus palabras.

Pero en estas campa?as at¨ªpicas, formalmente procesos partidistas para evitar chocar con la normativa electoral, est¨¢ prohibido presentar propuestas y la frontera entre los actos proselitistas y las asambleas informativas es borrosa e inc¨®moda para todos los involucrados, incluso para el ¨¢rbitro a cargo del proceso. Seis de los siete partidos con registro han ca¨ªdo en el mismo juego. Andr¨¦s Castro, un alumno de 20 a?os, se queja de que vengan a ¡°hacer campa?a en la universidad por debajo del agua¡±. ¡°Esta es una universidad p¨²blica, con recursos p¨²blicos, y nadie nos pregunt¨® si est¨¢bamos de acuerdo¡±, reclama el joven. ¡°No la conoc¨ªa bien y lo que dice se escucha muy interesante, pero creo que ha hecho un gasto excesivo en publicidad y eso le puede jugar en contra¡±, asevera Paola V¨¢zquez, una egresada de 24 a?os.

Brugada reparte selfies y abrazos, y se encarama de nueva cuenta en la camioneta tras una hora de evento. ¡°?Y ahora? ?Ad¨®nde?¡±, pregunta. ¡°A Radiof¨®rmula. Tienes una entrevista con L¨®pez D¨®riga¡±, le dice su equipo. El coche arranca hacia Las Lomas y pasa frente a uno de los carteles que promueven su candidatura.

¡ª Una de las asistentes se quejaba de la propaganda de esta contienda interna. Dec¨ªa que la ciudad est¨¢ tapizada de pintas y carteles. El propio presidente se ha quejado. ?C¨®mo ataja esos cuestionamientos?

¡ª Pues deslindar. Eso es lo que tenemos que hacer. Yo me he deslindado de toda la propaganda, es lo que nos pide Morena que hagamos.

¡ª ?Usted no tiene nada que ver?

¡ª No, tenemos que deslindarnos y lo estamos haciendo.

¡ª ?Pero entonces qui¨¦n lo hace?

¡ª Hay mucha gente, grupos que se entusiasman, pero hay que deslindarse.

¡°Esta ciudad no fue desarrollada de manera homog¨¦nea, se apost¨® a ciertas partes y se abandon¨® otras, como Iztapalapa y las periferias¡±, se?ala Brugada, que lanz¨® las utop¨ªas, un exitoso programa de urbanismo social y combate a la desigualdad. Ella, sin embargo, no es oriunda de Iztapalapa. Naci¨® en Benito Ju¨¢rez, uno de los bastiones del Partido Acci¨®n Nacional, la fuerza opositora m¨¢s votada. Despu¨¦s de un breve paso por Chiapas tras la muerte de su padre, la menor de tres hermanos decidi¨® estudiar Econom¨ªa y se mud¨® por convicci¨®n a San Miguel Teotongo, uno de los barrios m¨¢s pobres de la capital. Sostiene que fue la decisi¨®n m¨¢s importante de su vida. Fue ah¨ª donde se inici¨® en pol¨ªtica hace m¨¢s de 40 a?os. En el camino, decidi¨® que no iba a tener hijos para volcarse de lleno en el trabajo. Y ahora, en la interna.

¡ª Habla poco de su vida personal, ?no?

¡ª Es que no hay mucho qu¨¦ contar.

¡ª ?Nunca baja el switch de pol¨ªtica?

¡ª Muy pocas veces, la verdad. No me da tiempo. Quisiera tener m¨¢s tiempo para m¨ª y para mi vida, pero es una responsabilidad tremenda tener cualquier cargo p¨²blico. Pero soy feliz. Me encanta lo que hago.

Las elecciones de 2021 fueron unas de las m¨¢s re?idas en la historia de la capital. De forma sorpresiva, el oriente vot¨® por el partido del presidente y el poniente, en contra. Pronto se empez¨® a hablar de un muro que separaba a dos ciudades diferentes. ¡°Tenemos que derribar esos muros. Ganar una elecci¨®n no pasa por una estrategia electoral, se trata de construir un movimiento que entusiasme y nos ayude a lograrlo, ese es nuestro principal reto¡±, afirma.

¡ª ?Qu¨¦ lecciones saca de 2021?

¡ª Muchas. Las propias de Morena. Nunca hay que confiarse en ninguna elecci¨®n. Pero creo que el momento pol¨ªtico era diferente. Est¨¢bamos en pandemia, la poblaci¨®n estaba aislada y hab¨ªa toda una campa?a de mentiras y de odios hacia la Cuarta Transformaci¨®n.

¡ª ?Fue una advertencia para Morena?

¡ª Claro, despu¨¦s de la autocr¨ªtica, nos pusimos a trabajar mucho para evitar que eso ocurriera. La elecci¨®n de 2024 va a ser diferente, el presidente tiene un 70% de aprobaci¨®n. Claudia Sheinbaum, m¨¢s del 70%. El humor social es otro. Esta ciudad quiere m¨¢s cambios y no la veo votando por el pasado.

Brugada asegura que no tiene un plan B en caso de no ganar. ¡°No soy una pol¨ªtica tradicional, no ando buscando cada tres a?os a ver d¨®nde me cuelo¡±, dice entre risas, aunque pronto vuelve a subir la guardia. El d¨ªa seguir¨¢ con m¨¢s entrevistas, un mitin en la Magdalena Contreras y reuniones privadas, para finalmente volver a Iztapalapa y hacerlo todo otra vez. ¡°Me siento responsable por miles de personas que creen en m¨ª. Yo estoy aqu¨ª por ellos¡±, insiste antes de despedirse. Los resultados de la encuesta est¨¢n previstos para el pr¨®ximo 30 de octubre.

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