Marcelo Ebrard reaparece en el acto de cierre de precampa?a de Claudia Sheinbaum

Marcelo Ebrard vuelve a escena. El exsecretario de Relaciones Exteriores ha protagonizado una imagen impensable hace unos meses, al abrazar con una sonrisa a Claudia Sheinbaum durante su acto de cierre de precampa?a, este jueves en el monumento a la Revoluci¨®n de Ciudad de M¨¦xico. El excanciller compiti¨® contra Sheinbaum en el proceso interno de Morena para elegir un candidato a la carrera por la presidencia de la Rep¨²blica, que se disputar¨¢ en las pr¨®ximas elecciones de este junio. La antigua jefa de Gobierno de la capital result¨® vencedora en unas primarias que Ebrard denunci¨® por presuntas irregularidades. En aquel momento, el veterano pol¨ªtico estuvo a punto de romper con el partido fundado por el actual presidente, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador. ¡°No nos vamos a someter a esa se?ora¡±, lleg¨® a decir en referencia a su contrincante.

Ebrard recupera la disciplina de partido, despu¨¦s de meses de vaivenes e incertidumbre. Su presencia ahora en el cierre de precampa?a de Sheinbaum supone una de sus primeras apariciones p¨²blicas desde aquellos d¨ªas de tensi¨®n y acusaciones, el pasado septiembre. Tambi¨¦n un nuevo acercamiento a su antigua rival, pese a las acusaciones de despilfarro e irregularidades en la campa?a interna que en su momento lanz¨® contra ella. ¡°Acompa?¨¦ a Claudia en su cierre de Precampa?a en el Monumento a la Revoluci¨®n. Vamos por la siguiente etapa de la 4T !! [sic]¡±, ha publicado Ebrard en su perfil de X (antes Twitter). Al evento tambi¨¦n han acudido Ad¨¢n Augusto L¨®pez y Ricardo Monreal, contrincantes de Ebrard y Sheinbaum en la disputa.

Cuando Sheinbaum result¨® elegida, Ebrard abri¨® la puerta a su salida del partido. ¡°Lo que nos queda claro es que en Morena no tenemos espacio despu¨¦s de lo de ayer¡±, declar¨® ante el periodista Ciro G¨®mez Leyva. L¨®pez Obrador terci¨® para calmar las aguas entre sus dos colaboradores. ¡°Espero que decida apoyar la transformaci¨®n. Es una muy buena persona, un buen dirigente, un buen servidor p¨²blico, es mi amigo¡±, dijo conciliador el presidente sobre el excanciller. Sheinbaum y toda la primera plana de Morena se sumaron a la llamada de unidad del dirigente para evitar que Ebrard rompiera filas.

Aun as¨ª, Ebrard se resisti¨® a las buenas palabras. Primero lanz¨® un ¨®rdago de alto calibre: amenaz¨® con abandonar Morena si no se repet¨ªa la encuesta interna que encumbr¨® a Sheinbaum. Dej¨® sus declaraciones macerando a fuego lento en el ¨¢nimo cada vez m¨¢s tenso del partido y se refugi¨® en el silencio. El farol no se materializ¨® y el excanciller dio un volantazo al anunciar la creaci¨®n de su propio movimiento dentro de las fronteras de la agrupaci¨®n, una ¡°asociaci¨®n civil¡± llamada El Camino de M¨¦xico A.C. ¡°?Por qu¨¦ formamos una asociaci¨®n? Es la forma de organizarnos, somos un movimiento pol¨ªtico, eso es lo que somos, pero necesitamos tener nuestra propia forma de organizaci¨®n, y los pasos que demos ser¨¢n del movimiento¡±, justific¨®.

El movimiento, secundado por unas 800 personas en el primer momento, se qued¨® en poco m¨¢s que una ocurrencia que no caus¨® mayores efectos en el engranaje de Morena. A finales de septiembre, el excanciller escal¨® las amenazas y llev¨® la designaci¨®n de Sheinbaum ante el Tribunal Electoral, un golpe, tambi¨¦n, sin demasiado efecto. En octubre, el culebr¨®n pol¨ªtico por excelencia del momento escribi¨® nuevas p¨¢ginas. Ebrard se dejaba cortejar por Movimiento Ciudadano, uno de los partidos de la oposici¨®n, que ve¨ªa con buenos ojos presentar al exsecretario de Exteriores como su propio candidato presidencial.

Ebrard coquete¨® durante unas semanas con ellos hasta que, en noviembre, Morena se cans¨® de la actitud err¨¢tica y lanz¨® un ultim¨¢tum. El excanciller ten¨ªa que elegir de una vez: o se quedaba o romp¨ªa definitivamente con el partido. Unos d¨ªas despu¨¦s, la rebeli¨®n del hijo d¨ªscolo lleg¨® a su fin. Ebrard enterr¨® el hacha de guerra, neg¨® su incorporaci¨®n a Movimiento Ciudadano y anunci¨® su permanencia en las filas del oficialismo.

Desde entonces, el silencio ha reinado sobre los movimientos del excanciller. Se dej¨® ver a principios de diciembre con Clara Brugada, la aspirante de Morena al Gobierno de la Ciudad de M¨¦xico, como una muestra de apoyo a la candidatura, y poco m¨¢s. Hasta este jueves, una muestra de apoyo in¨¦dita de Ebrard hacia Sheinbaum desde la campa?a interna del partido.

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