La Organizaci¨®n Panamericana de la Salud del siglo XXI: un nuevo pacto por la salud para Am¨¦rica y El Caribe
La pandemia nos ense?¨® que las relaciones comunitarias, locales, nacionales y transnacionales nos salvan y que la salud es sobre todas las cosas y, sobre todo, por encima del mercado
La salud es lo primero. Esta frase solo adquiri¨® el sentido y la grandeza que merece despu¨¦s de dos a?os de pandemia global (2020-2021) en la que vivimos en carne propia, todos y todas, lo definitivo que puede ser el hecho de tener o no acceso a la salud p¨²blica. Prevenci¨®n, atenci¨®n, vacunas. Tres pasos que marcaron diferencias y aumentaron las desigualdades entre sectores sociales, ricos y pobres; entre hombres y mujeres y entre pa¨ªses.
Nuestra regi¨®n latinoamericana respondi¨® como pudo: con sistemas de salud fragmentados y, en muchos casos, debilitados debido a las ¨²ltimas d¨¦cadas de recortes.
Sin embargo, tambi¨¦n pudimos rescatar esa otra parte de la experiencia que tuvo que ver con la resiliencia, el valor, la unidad, la generosidad y la entrega de las mujeres y hombres que forman parte de esa familia global que llamamos sistema p¨²blico de salud: personal m¨¦dico, de enfermer¨ªa, param¨¦dicos y limpieza de los hospitales y cl¨ªnicas.
Toda esta vivencia puso en el centro la vida, las personas, la calidad de nuestra ciudadan¨ªa, la democracia y ese contrato social que nos sostiene y que nos conduce, m¨¢s all¨¢ de gobiernos y de partidos, hacia un futuro de bienestar, convivencia y paz.
La pandemia nos dej¨® muchas ense?anzas y una de ellas es que la prevenci¨®n es nuestra arma m¨¢s poderosa, que las relaciones comunitarias, locales, nacionales y transnacionales nos salvan, y que la salud es, sobre todas las cosas y sobre todo por encima del mercado, un bien com¨²n, un patrimonio colectivo de bienes, servicios y saberes que debemos proteger.
Es tiempo de implementar lo que hemos aprendido de esta gran lecci¨®n mundial. Es tiempo de decirnos y probarnos que no habr¨¢ vuelta atr¨¢s; que los sistemas de salud no pueden abandonarse ni a su suerte ni a la mano invisible del mercado; que no podemos ignorar la fuerza de la cooperaci¨®n internacional regional ni tampoco desaprovechar esta oportunidad para actualizar, innovar y perfeccionar la Organizaci¨®n Panamericana de la Salud (OPS).
La OPS es un organismo vivo, conformado por cientos de valiosos y valiosas profesionales de la salud, comprometidos d¨ªa a d¨ªa con su avance y por asentarla, con toda solidez, al frente de este promisorio proyecto com¨²n que es la idea de una Am¨¦rica y Caribe en el siglo XXI.
Y este proyecto com¨²n es un nuevo pacto por la salud universal que contiene tres elementos fundamentales: el fortalecimiento de los servicios de atenci¨®n primaria de cobertura universal as¨ª como de salud mental y salud sexual y reproductiva; la construcci¨®n corresponsable de la autosuficiencia sanitaria, instalando y manteniendo capacidades para la innovaci¨®n y regulaci¨®n sanitaria en la regi¨®n, listas para generar las soluciones a los retos presenten en el futuro; y tercero, trabajar entre todos por una OPS m¨¢s eficaz, eficiente, transparente, inclusiva y vers¨¢til, con una proyecci¨®n global din¨¢mica dispuesta al di¨¢logo con otras agencias, al tiempo que sea la voz de nuestra Am¨¦rica y Caribe en la OMS.
El 28 de septiembre pr¨®ximo tendr¨¢ lugar la elecci¨®n que decidir¨¢ el rumbo de esta organizaci¨®n para los siguientes a?os. No es una elecci¨®n m¨¢s, M¨¦xico se suma a esta competida elecci¨®n no solo para tener, por fin, la primera directora general mexicana del Organismo, sino porque contamos con una pol¨ªtica exterior generosa, abierta y activa. Lo comprobamos durante la pandemia cuando donamos vacunas en periodos cr¨ªticos, y cuando decidimos envasar dos biol¨®gicos en nuestro pa¨ªs.
Soy mexicana, mujer, m¨¦dica y salubrista. Viv¨ª la pandemia como presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres de M¨¦xico. Asum¨ª este puesto 40 a?os despu¨¦s de haber estudiado medicina y dedicado mi carrera a la salud p¨²blica, la equidad de las mujeres y la cooperaci¨®n internacional. Haber estado del lado de la sociedad civil, las agencias internacionales y ahora del gobierno me ha permitido construirme una mirada amplia, comprensiva e incluyente, capaz de ver el todo y no solo una parte del problema. Creo en la necesidad de escuchar y en nuestra humana capacidad de crecer con el di¨¢logo.
Son tiempos de cambios, m¨¢s que nunca. Estoy convencida de que ha llegado el momento de poner a la OPS en el siglo XXI y eso solo ser¨¢ posible con un liderazgo horizontal, dialogante, participativo, capaz de dominar el dif¨ªcil arte de construir un futuro com¨²n por encima de los intereses particulares, considerando siempre la historia, los contextos y la diversidad cultural, pol¨ªtica, econ¨®mica, ¨¦tnica y geogr¨¢fica de nuestra regi¨®n.
Una Am¨¦rica unida, vinculada con el mundo, pero suficientemente fuerte como para mirar hacia dentro y dialogar en igualdad de condiciones con eso que conocemos como norte global. Rosario Castellanos, la gran escritora mexicana, nos dijo que ¡°la emancipaci¨®n significa, fundamentalmente, no una haza?a de la voluntad, no una prueba de la aptitud, no un alarde de la inteligencia, sino algo m¨¢s dif¨ªcil y m¨¢s peligroso que todo eso: una proeza del equilibrio¡±.
Y con esta idea inspiradora en mente, con este dilema que es tambi¨¦n la paradoja en la que vivimos diariamente las y los americanos y caribe?os, quienes vemos la diferencia entre ser una suma de pa¨ªses o ser un proyecto colectivo, hago un llamado a construir juntos este nuevo pacto de la salud que ponga en el coraz¨®n de las pol¨ªticas p¨²blicas sanitarias de la Regi¨®n, la idea del derecho universal a la salud, a la calidad de vida y el bienestar recuperando la unidad y un destino com¨²n.
Nadine Gasman es candidata de M¨¦xico a la direcci¨®n de la OPS.
Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S M¨¦xico y reciba todas las claves informativas de la actualidad de este pa¨ªs
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.