X¨®chitl G¨¢lvez y sus posibilidades de ser presidenta

?Cu¨¢nto de espuma y cu¨¢nto de realidad hay en el fen¨®meno medi¨¢tico pol¨ªtico que se est¨¢ gestando en torno a X¨®chitl G¨¢lvez? Tras meses de sequ¨ªa las corrientes contrarias a Morena parecen haber encontrado una buena noticia y a ella se han aferrado en los ¨²ltimos d¨ªas. Un personaje relativamente ignorado por la derecha y marginal a los partidos pol¨ªticos, aunque en lo formal le haya prestado la camiseta del PAN, s¨²bitamente se est¨¢ convirtiendo en la esperanza para dar la batalla en la lucha por la presidencia en 2024, que parec¨ªa inevitablemente perdida. ?Hay algo s¨®lido detr¨¢s de esas esperanzas?

Primero, habr¨ªa que considerar las posibilidades reales de X¨®chitl G¨¢lvez para ganar la candidatura de la llamada Alianza por M¨¦xico (PRI, PAN y PRD). No es la candidata natural de las dirigencias de los tres partidos, que preferir¨ªan a alguno de los suyos: Santiago Creel, Enrique de la Madrid, Silvano Aureoles, respectivamente. Y adem¨¢s de estos hay una lista de figuras con asideros entre las estructuras pol¨ªticas tradicionales: Beatriz Paredes, Claudia Ru¨ªz Massieu, Jos¨¦ ?ngel Gurr¨ªa, Ricardo Anaya, Miguel Mancera. El problema es que todas ellas son figuras vinculadas al pasado con pocas o nulas posibilidades de generar alguna expectativa real de triunfo. Cualquiera de los anteriores simplemente confirmar¨ªa un paseo en la alfombra roja para Claudia Sheinbaum o Marcelo Ebrard en el verano pr¨®ximo, y los sondeos as¨ª lo muestran de manera categ¨®rica.

De all¨ª la creciente menci¨®n de figuras menos desgastadas por el pasado, entre las que se han mencionado a Gustado de Hoyos, X¨®chitl G¨¢lvez, Lilly T¨¦llez, Luis Donaldo Colosio, Sergio Aguayo y una larga lista, algunos de los cuales han preferido declinar. Habr¨¢ que aclarar que todos ellos, incluyendo a X¨®chitl, salen muy mal parados en los sondeos al confront¨¢rseles con el candidato de Morena.

Y, sin embargo, el empresario y activista Claudio X Gonz¨¢lez, promotor de la alianza, percibi¨® algo que los dirigentes de los partidos se han negado aceptar: de todos ellos solo X¨®chitl puede crecer en la opini¨®n p¨²blica, pues su perfil ofrece ¨¢ngulos capaces de ser trabajados con una campa?a medi¨¢tica, considerando que tras las elecciones internas quedar¨ªan nueve meses para los comicios definitivos. As¨ª que lo que sigue para definir al candidato de la oposici¨®n ser¨¢ un pulso en las pr¨®ximas semanas entre quienes la apoyan y la inercia cerrada de las dirigencias de los partidos. Si la consulta que habr¨¢ de hacerse es a poblaci¨®n abierta y sin mano negra, X¨®chitl muy probablemente obtendr¨¢ la candidatura. Pero trat¨¢ndose de dirigentes con la oscura reputaci¨®n de Alito Moreno (PRI) y de Marko Cort¨¦s (PAN) la limpieza del proceso es una mera hip¨®tesis de trabajo.

Asumiendo que X¨®chitl resulte abanderada de la Alianza, la pregunta, en efecto, es ?cu¨¢nto puede crecer de cara al verano pr¨®ximo? Ciertamente tiene atributos que ning¨²n otro miembro de la oposici¨®n posee. De entrada cualquiera de ellos tendr¨ªa a su favor el grueso del voto anti obradorista, pero con eso no alcanza; la intenci¨®n de voto a favor de Morena y sus partidos aliados ronda el 50% y los niveles de aprobaci¨®n del presidente giran en torno a 60%; solo un tercio podr¨ªa considerarse netamente antiobradorista. La ¨²nica manera de aspirar a un triunfo es atraer a una buena parte de los ciudadanos indecisos y algunos filo obradoristas moderados o descontentos con algunos aspectos del Gobierno de la 4T.

All¨ª es donde entrar¨ªa la figura de X¨®chitl G¨¢lvez en la estrategia alternativa: la procedencia humilde de la hidalguense, la ascendencia otom¨ª de su padre, su nombre ind¨ªgena frente a los apellidos extranjeros de sus rivales (Sheinbaum o Ebrard), su lenguaje desparpajado y coloquial, su imagen ajena a la figura del pol¨ªtico profesional. Todos ellos son argumentos explotables para constituirse en s¨ªmbolos con arrastre popular. Podr¨ªan tener alguna resonancia entre votantes que en otras condiciones favorecer¨ªan de manera natural a los candidatos de Morena. En todo caso, dificultar¨ªa el discurso binario y c¨®modo en el que se ha instalado el obradorismo con tanto ¨¦xito, al construir la imagen de una confrontaci¨®n de pa¨ªs entre un proyecto popular, versus un proyecto de las ¨¦lites, de los fif¨ªs. De alguna forma, la confrontaci¨®n entre Claudia y X¨®chitl o Marcelo y X¨®chitl matizar¨ªa enormemente esta aproximaci¨®n, pues los perfiles personales no coincidir¨ªan con tales argumentos. En estricto sentido X¨®chitl procede de un origen m¨¢s humilde que el de sus probables rivales; ir¨®nicamente, un perfil m¨¢s asociado al M¨¦xico profundo tan cercano a L¨®pez Obrdor.

Como se recordar¨¢, ella naci¨® en una familia de muy escasos recursos de un pueblo a 60 kil¨®metros de Pachuca. Estudi¨® la primaria y la secundaria con dificultades, vendiendo gelatinas en el mercado y la preparatoria en la capital del Estado, gracias a un empleo modesto en el Registro Civil. Logr¨® recibirse en la UNAM como Ingeniera en Computaci¨®n y se hizo experta en rob¨®tica e inteligencia artificial. Tambi¨¦n result¨® buena empresaria; sus consultor¨ªas le ofrecieron una posici¨®n holgada, lo cual le permiti¨® impulsar proyectos filantr¨®picos entre la poblaci¨®n otom¨ª de su estado. Eso llev¨® a Fox a convertirla en coordinadora de la Comisi¨®n para el Desarrollo de los Pueblos Ind¨ªgenas, al que renunciar¨ªa en el primer a?o de Calder¨®n por el recorte de presupuestos. Se retir¨® a sus negocios aunque en 2010 contendi¨® por la gubernatura de Hidalgo infructuosamente; siempre se quej¨® de la falta de apoyo del PAN, que nunca la vio como una de las suyas. Con todo, se segu¨ªan necesitando mutuamente y con ese partido gan¨® la delegaci¨®n de Miguel Hidalgo en la capital en 2015-2018 y una posici¨®n en el senado para 2018-2024. Ha sido una relaci¨®n de mutua conveniencia: X¨®chitl es un personaje inc¨®modo para la dirigencia del blanquiazul, pero buena candidata a la hora de conseguir votos.

No hay espacio para intentar ahora un an¨¢lisis de los verdaderos merecimientos de X¨®chitl Galvez en sus dos gestiones como delegada y senadora, una valoraci¨®n de sus atributos para asumir una responsabilidad de esa magnitud, o una exploraci¨®n de su ideolog¨ªa m¨¢s all¨¢ del partido que le ha prestado casaca para competir. El desparpajo es un atributo muy apreciado en tiempos tan contrarios a los pol¨ªticos profesionales, pero dificulta conocer realmente qu¨¦ hay de fondo, m¨¢s all¨¢ de las frases efectistas.

Por lo pronto, habr¨ªa que concluir que X¨®chitl, a diferencia de las otras alternativas, s¨ª constituir¨ªa una amenaza a la certidumbre que hoy posee Morena. Obligar¨¢ a L¨®pez Obrador a afinar la estrategia, a generar una tercera opci¨®n que divida el voto opositor, a consolidar a los partidos aliados, a preparar el trabajo de gobernadores, a cerrar filas. Eso ser¨ªa materia de otro texto.

@jorgezepedap

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