Menos homicidios en M¨¦xico pero ?y las personas desaparecidas?

Esta semana, el INEGI revel¨® datos preliminares sobre los homicidios sucedidos en M¨¦xico durante el a?o pasado. De acuerdo con las cifras oficiales, de enero a diciembre de 2022 hubo 32.223 homicidios dolosos en el pa¨ªs, lo que significa una reducci¨®n de 9,74% con respecto a 2021. Nada despreciable, sobre todo si consideramos que en 2021 tambi¨¦n se produjo una reducci¨®n de 2,92% con respecto a 2020.

Con estos datos, el promedio diario de asesinatos se ubic¨® en 88,28%, 12 homicidios menos por d¨ªa que en 2018, cuando L¨®pez Obrador asumi¨® la presidencia de la Rep¨²blica. Al respecto, el Presidente atribuy¨® la reducci¨®n al trabajo diario del gabinete de seguridad y enfatiz¨® que la ¡°estrategia de atender las causas que originan la violencia¡± comenzaba a mostrar resultados. Aprovech¨® tambi¨¦n el dato para arremeter contra sus adversarios.

?Es esto as¨ª?, ?la reducci¨®n de homicidios obedece a la estrategia de seguridad y los programas sociales?, ?estamos ante un cambio de comportamiento definitivo?.

Me gustar¨ªa decir que s¨ª, pero la respuesta es que no sabemos. B¨¢sicamente por dos razones, la primera tiene que ver con c¨®mo contamos los homicidios y con la relaci¨®n de esa violencia con otras violencias que muchas veces son tambi¨¦n homicidas, en espec¨ªfico la de las personas que desaparecen y nunca son encontradas.

De acuerdo con los datos del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO), en 2022 se documentaron 22.575 casos de personas desaparecidas en M¨¦xico, de las cuales permanecen sin localizar el 41%, que equivale a 9.286 casos. Es la cifra m¨¢s alta para un a?o desde que se tiene registro de estos delitos. Otro 4%, 932 casos, fueron hallados sin vida durante 2022.

El dato obliga a pensar si estamos ante una reducci¨®n real de los homicidios o ante un problema m¨¢s complejo que incluye una evoluci¨®n de la violencia homicida hacia otras din¨¢micas, d¨®nde se nos sustituyen los asesinatos por desapariciones y fosas clandestinas y d¨®nde no queda claro cu¨¢l es el rol de criminales y autoridades involucradas.

Cabe se?alar, adem¨¢s, que los delitos relacionados con la desaparici¨®n de personas presentan una gran cifra negra, mientras que los homicidios se investigan de oficio. Con esos datos, el sexenio de L¨®pez Obrador acumula m¨¢s de 36.000 personas desaparecidas y no localizadas, lo que representa poco m¨¢s del 30% del total a nivel nacional desde 1970. Durante 2022, en M¨¦xico desaparecieron 25 personas diarias, pero de ellas no se dijo una sola palabra durante la conferencia matutina.

En segundo lugar, habr¨ªa que matizar para ver la reducci¨®n de homicidios en t¨¦rminos absolutos desde una perspectiva m¨¢s compleja y comparativa. Sin dejar de reconocer que el cambio de tendencia en la curva de asesinatos es relevante y prometedor, la violencia homicida que M¨¦xico sufre sigue muy lejos de los est¨¢ndares internacionales para considerarlo un pa¨ªs pac¨ªfico.

Con una tasa de 25 homicidios por cada 100.000 habitantes, la tasa de M¨¦xico es pr¨¢cticamente diez veces mayor que la de 2,6 que promedian los pa¨ªses de la OCDE. De hecho, en M¨¦xico solo Yucat¨¢n est¨¢ por debajo de ese dato con 2 homicidios por cada 100.000 habitantes. El extremo negativo es Colima, que en 2022 registr¨® una tasa descomunal de 113 homicidios por cada 100.000 habitantes.

En suma, el gobierno de L¨®pez Obrador parece ¡ªy digo ¡°parece¡± porque es muy pronto y a¨²n no tenemos evidencia de una correlaci¨®n entre la ¡°estrategia¡± y la ¡°reducci¨®n¡±¡ª haber contenido la violencia homicida que hered¨® en niveles hist¨®ricos, lo que no quita que ser¨¢ el sexenio con el mayor n¨²mero de homicidios acumulados de la historia moderna de M¨¦xico. La pregunta es si la tendencia decreciente ser¨¢ posible de sostener en los pr¨®ximos a?os y, especialmente, tras el cambio de gobierno que se espera en 2024. Solo as¨ª sabremos si el abordaje actual funciona.

Y sobre todo, si ser¨¢ capaz de reconocer y encontrar una estrategia extraordinaria para atender esa otra violencia que es ya una crisis humanitaria reconocida a nivel internacional: la de 110.000 personas desaparecidas y sus familiares que las buscan. Un problema que no ha dejado de crecer desde que L¨®pez Obrador asumi¨® la presidencia y a cuyas v¨ªctimas directas e indirectas su gobierno ha sido incapaz de ofrecer justicia.

Adri¨¢n L¨®pez Ortiz es periodista y director del diario Noroeste

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